Es como una angustia, una nostalgia por algo que tuve y ya no tengo pero, no se que es.
Cada vez que veo que alguien tiene algo que yo no tengo se me prende UN FUEGO, algo espantoso que ODIO sentir. Me niego a reconocerlo pero creo que ese fuego que siento es envidia.
Hay dos motores que mueven a la humanidad, uno es el deseo y el otro la envidia. O sea desear lo que desea el otro, todos tenemos deseos, son el motor de nuestra vida, no es malo tener deseos pero, cuando no alcanzamos lo que deseamos y lo alcanza otro, ahí nace la envidia. Nadie desea lo que nadie desea.
Hay otra envidia que es mucho más peligrosa, la envidia del ser.
La envidia del ser es algo tan profundo que a veces casi no lo podemos ver, ya no envidio lo que tiene el otro, envidio lo que es el otro.