Michael se posicionó al lado de la última fila de la iglesia.
Lo ultimo que quería era ocasionar problemas con la familia de Danielle.
Los padres de Danielle no dejaban de llorar. A pesar de lo estrictos que eran la amaban. Solo querían lo mejor para Danielle. Siempre quisieron lo mejor para ella, pero ella nunca los entendió.
Michael quería salir de la iglesia y aventarse de un acantilado. No sabia que hacer sin ella.
Danielle no iría a Harvard como lo había planeado. No seria la mejor mamá del mundo como ella quería. No conocería a sus idiolos como lo había soñado. No viajaría por el mundo como lo anhelaba. Danielle no se casaría con Michael y era que la idea le encantaba.
La misa había terminado. Michael no resistió y fue hacia el ataúd. Los padres de Danielle lo abrazaron.
-Danielle siempre nos aseguró que eras un buen chico y nunca le creímos. Ella escribió una carta antes de la huida. Quédate en paz muchacho, no te sientas culpable.
Los presentes salieron de la iglesia y Michael quedo frente al ataúd donde descansa a el frágil cuerpo de Danielle.
Quería abrasarla. Quería besarla. Lo hubiera hecho si se hubiese podido parar de la silla de ruedas.
Michael había perdido la movilidad de su cuerpo tras el grave impacto.
Ni siquiera tenía el permiso de su doctor para andar así. Michael rompió las reglas de nuevo.
-No he dejado de llorar desde hace dos días -Michael susurró lo más cercano a Danielle-. Te extraño.
Rompió el llanto por milésima vez en el día.
-Desearía estar en tu lugar, tenias toda una vida por delante, no como yo que seguiré jugando videojuegos y comiendo en McDonalds.
Michael tomó la mano de Danielle.
Él aún sentía la carga eléctrica de pies a cabeza.
-Me he teñido el cabello rojo como a ti te gusta -sonrió Michael-. No sé que decir Danielle, no soy bueno con las despedidas.
Michael sorbió su nariz y miró el cuadro de Dios.
-¿Por qué te la llevaste lejos de mi?
Todos las noches Michael se imaginaba una vida perfecta a su lado.
La miro de nuevo.
-No sé si pueda amar a alguien de nuevo. Todas las personas que amo se van.
Michael recordó a su padre que se fue cuando él ni siquiera nacía y a su madre que había muerto años atrás por el cáncer.
-Sé que me esperaras. Tendremos hijos y nos casaremos en el cielo -Michael rió-. Pero primero tendré que ser bueno, así podré verte cuando deje este mundo.
Michael dejo de sostener la mano de Danielle y se alejó del ataúd.
FIN.
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Last kiss | mgc
Fiksi Penggemar-¡No se lo puedes decir a nadie! -susurró un poco alto-. Michael Clifford, prométeme que no le dirás a nadie sobre esto. -Con una condición. -¿Una pizza? -Dame un beso.
