Comienzo del capítulo cinco!
Kageyama sabía que todo le estaba saliendo mal, pero no tenía las agallas para dar la cara, entonces le pidió un consejo a su madre. Después de la cena, él subió a la habitación de su progenitora.
— Mamá, necesito tu ayuda. — pidió en un leve murmullo.
— ¿uh? Claro...Dime, tesoro. — dijo un tanto curioso su madre.
— Quiero disculparme con una compañera, lo intente varias veces y nada resulta. ¿Que puedo hacer? —
— ...mgh...¿Por que no le regalas un perfume? De hecho, tengo de sobra, te doy uno y mañana se lo das. ¿Si? — Aconsejó su madre, tratando de subirle un poco el ánimo a su no tan pequeño hijo.
Tobio asintió y con un brillo en sus ojos le agradeció a su madre por las palabras. — Gracias mamá, eres la mejor. — y espero a que su madre le diera un perfume.
. . .
Tobio tenía el perfume con aroma a coco en sus manos, la clase número 4 estaba en el horario de educación física. El rápidamente se aproximó a los casilleros y buscó la mochila de (N).
La encontró, la abrió y colocó el perfume lo más parado posible, tomó la mochila desde más arriba al no poder cerrarla. Escucho varias voces de los chicos y chicas de la clase 4, rápidamente soltó la mochila y salió corriendo, lejos de ahí.
— (N)–chan, ¿por que dices que el setter del volley masculino te odia? Jamás hemos visto lo mal que te trata. — habló una compañera de la peli-negra.
— Cuando me vuelva a molestar te lo mostrare, Hiroe. — comentó la oji-avellana. Yendo a abrir su mochila para sacar su botella de agua.
Cuando la abrió, un aroma invasivo a coco inundó sus fosas nasales, tratando de taparse la nariz se apartó de su casillero.
El olor seguía, por lo que vio su mochila, sus compañeras miraban desde atrás al sentir un exagerado aroma a coco.
Sus libros, libretas y fotocopias, cartuchera y demás útiles bañados en un líquido trasparente que emanaba un olor fuertisimo. Simplemente miro a las chicas como: « Les dije. »
Simplemente saco todo y trato de soplarlo, intentando secar todo lo posible. Sus amigas ayudaron un poco pero no dio resultado.
Por lo cual, la carta de disculpa que había escrito Kageyama estaba empapada.
. . .
— ¿Escucharon de la chica de el salón 4 de primero? Dicen que alguien tiro perfume en sus apuntes. — comentó Ennoshita como un dato al aire.
Kageyama de atoró con su agua, llamando la atención de su compañero peli-naranja.
— No me digas que tú... — comenzó Hinata.
—...¡Maldicion! —
Plan perfume: ¡Fallido!
La próxima aprende que si tiras algo de vidrio al suelo, se rompe.
¡Eres un idiota!
Fin del capítulo cinco!
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maneras | KAGEYAMA
FanfictionMANERAS | Pedirle disculpas a alguien puede ser una tarea bastante complicada si es que no sabes como hacerlo. ✧ ✗ Fanfiction de durabilidad corta. ✗ Es completamente de mi autoría. ✗ Capítulos cortos. ✗ Female Reader 🅇 Kageyama Tobio.