Nada es lo que parece, Marlena ~Måneskin

Nuestra boda

Un tiempo más tarde...

-Principessa, ¿puedes alcanzarme los pañales? Me los he dejado en el pasillo

-Voy amore-cogí los pañales, este hombre es un poco desastre- aquí tienes- se los di

-Ya estás mi amore-le dijo a Kiara- hay que ver lo guapa que es esta niña, como se parece a su padre

-Que humilde eres- puse los ojos en blanco y se rió

-Sabes que tengo razón-me besó- Lo que le pasa a tu mami es que nos tiene envidia-sonrió

-Eres un creído y un...-me callé la palabra malsonante- tú sabes lo que te iba a decir

-Me lo puedes repetir esta noche si quieres-me guiñó un ojo

-Cuando quieras-me reí. Mi teléfono no paraba de sonar, Giovanna me estaba llamando

-Giovanna¿ qué ocurre?

-Lo mejor que nos podría pasar en el teatro-dijo casi chillando- Bueno, más bien a mi...

-¿Qué ha pasado?

-Este teatro está lleno de magia y de amor Marlena, he conocido al amor de mi vida-me reí

-¿Cómo es? ¿cómo se llama?

-No lo se, pero es alto, guapo, con una gran voz

-¿Canta hoy?

-Siii, Dios mío es que es guapísimo, tienes que venir

-Giovanna estoy con la peque, no puedo ir

-Escápate un rato por favor, Damiano lo entenderá

-Te llamo luego, no te preocupes-colgué, Giovanna es una loca enamorada, la entiendo perfectamente, se que el teatro es mágico al fin y al cabo allí conocí a los chicos y lo más importante, a Damiano.

-¿Estaba gritando?-preguntó Damiano

-¿Lo has escuchado verdad?

-No se si por suerte o por desgracia, pero si- me reí- pero podríamos salir a dar una vuelta y tú entras a ver al amorcito de Giovanna, nos quedamos la peque y yo fuera y después podríamos salir a cenar

-O podríamos llamar a la canguro-le besé

-Me parece una muy buena idea-me dio en el culo- pero te quiero solo para mi esta noche

-Sabes que siempre estoy solo para ti-le besé-posesivo

-Vamos a cambiarnos anda- entramos en la habitación y me puse un vestido largo de color negro y unos tacones rojos, era la primera vez en meses que saldríamos a cenar, tenía que arreglarme para la ocasión. Me maquillé un poco y cogí mi bolso

-Amore, ¿llamaste a la canguro?-pregunté

-Si, pero hoy no puede venir... pero he llamado a mi madre y me ha dicho que podemos dejarla en su casa y la recogemos mañana

-Adoro a tu madre-contesté- voy a preparar las cosas de mi princesita-le dije a Kiara- hoy vas a estar con la abuela- empezó a reírse. Damiano se puso una camisa rosa y unos pantalones negros con unas botas blancas y un bolso negro.

Colocamos la sillita en el coche y guardamos la bolsa con las cosas de Kiara en el maletero, condujimos hasta casa de la madre de Damiano y dejamos a la niña con ella.

-Aunque parezca mentira se me hace raro no estar con ella-dijo

-Ya ves... es que me falta algo... la echo de menos ya