Nos sentaron en una pequeña mesa cerca de la ventana donde podíamos ver el cielo tan despejado y las preciosas estrellas.
Pedimos vino y pasta para cenar, parece un tópico italiano, pero me encanta la pasta y el vino.
-Llevamos cuatro meses viviendo juntos, nunca pensé que te aguantaría tanto-dijo bebiendo un poco de su copa
-Lo mismo digo, pensé que acabaría matándote-sonreí
-Me divierto mucho contigo, Marle
-Y yo contigo, creo que eres el mejor compañero, pero no te acostumbres
-Tengo que decirte algo muy importante, por eso quería cenar contigo- mi cara cambió completamente, me espero lo peor
-Si quieres que me vaya, no te preocupes, no me voy a enfadar
-¿Qué? ¡No! Dios mío, a veces eres tonta- se rie-no quiero que te vayas
-¿Entonces?
-Bueno... sabes que tengo que irme a hacer algunas entrevistas y conciertos y quería dejar las cosas claras entre nosotros
-Oh... -empecé a ponerme nerviosa
-Si no quieres hablar de ello, pasamos y solo cenamos
-No,no, quiero y necesito hablar de esto, solo que no me esperaba que fuera ahora
-Necesito saber lo que sientes antes de irme
-Damiano... creo que a estas alturas toda Roma sabe lo que siento
-Pero necesito que tú me lo digas, necesito saber qué quieres
-Me gustas, eso está claro, pero no me siento preparada para verme en una relación a distancia. Damiano, vas a estar meses de aquí para allá y casi no voy a poder verte
-Marle-me coge la mano- se que es duro y que lo va a ser, pero te prometo que vas a ser la única en mi cabeza
-Lo se, y te creo, pero no puede ser, al menos no ahora. Cuando vuelvas podríamos volver a hablar
-Si... me parece bien
-Siento si te he arruinado la noche...
-Marlena, no has estropeado nada, es como te sientes, no puedo enfadarme con tus sentimientos.Después de la conversación pensé que sería incómodo, pero fue todo lo contrario, seguía insistiendo en tatuarme su apellido, no podía parar de reírme, quizás porque me gusta o por las copas que llevo de más o simplemente porque está loco.
-Tú imagínatelo, David tatuado en tu brazo, se pensarán que es un nombre, aaaah pero no, es mi apellido
-No me voy a tatuar tu apellido-sigo riéndome- si acaso me lo cambio en el registro- me mira serio
-Marlena, que atrevida -se rie- así que... te casarías conmigo y cambiarías tu apellido... interesante
-Me parece que voy a dejar de beber por mucho tiempo-me sonríe-Hoy estás muy bella - cada vez que habla me mata
-Gracias-me puse nerviosa, no se que contestar
Después de cenar fuimos a dar una vuelta por la ciudad, íbamos de la mano
-¿Helado?
-Eso no se pregunta mi amor- le dije y fuimos a una heladería.
Pedimos nuestros helados y los fuimos comiendo por la calle.
-No quiero irme
-Tienes que hacerlo Damiano, es tu trabajo
-Lo se, pero se que si estuviéramos en el mismo país estaríamos juntos...
-Damiano hay que esperar, por tí y por mí
-Marlena, no se si aguantaré tanto tiempo sin verte
-Yo tampoco aguantaré, me he acostumbrado a que entres todos los días a molestarme a mi habitación a todas horas
-Y yo me he acostumbrado a que me quites el cigarro mientras fumo
-También a que te pasees canturreando- le quité un poco de su helado- la casa va a estar muy sielenciosa , ya era hora
-Lo único que no voy a echar de menos es que me robes la comida, bueno y que te quejes de que no te dejo dormir
-Es que eres muy pesado-me rio- me despiertas cuando estoy dormida
-Si quieres me quedo observándote toda la noche
-A veces eres muy rarito-empezamos a reírnos
-Ahora enserio, te voy a echar de menos, Marle
-Y yo a ti... va a ser muy raro no verte todos los días- me termino el helado y tiro la tarrina. Acto seguido, Damiano me abraza muy fuerte
-Ven algún día a visitarme-me mira a los ojos- por favor
-Por supuesto, voy a ver a mis chicos favoritos
-Los demás me dan igual, ven a verme a mí-Se acerca más quedando a centímetros, que centímetros, milímetros- Marle- me besa, es tan dulce que no puedo evitar soltar una risita y seguir besándole.
-Ire a verte solo a ti- puse mis manos en su cuello-Te lo prometo.Es imposible pensar que lo que me está pasando sea real, es demasiado bueno para ser verdad. Obviamente le quiero muchísimo, iré a visitarle todo lo que pueda y le besaré todo el rato, le quiero.
Subimos al coche y enseguida llegamos a casa ,me quité los tacones tirándolos por ahí y me arrastré hasta el sofá
-Necesito una ducha pero la pereza de ir al baño es enorme-dije tumbándome sin dejar espacio
-Yo te puedo duchar-me dio en el culo y le miré raro
-Espero que sea con agua y no con otra cosa
-¡Marlena! La única que piensa en cosas obscenas eres tú- empieza a reírse
-No soy yo, eres tú y tu forma de hablar, me pones nerviosa
-¿Es mi manera de hablar?-asiento- ¿No será que estás loca por mí y todo lo que tiene que ver conmigo?- Claro que estoy loca por él y con todo lo que hace y dice...
-No creo...-empiezo a ponerme nerviosa
-Imaginaciones mías- se aleja y se va. Es el rey de ponerme a 100 y dejarme con las ganas.Me fui a duchar rápidamente y a desmaquillarme. Después me puse el pijama y me tumbé en la cama con el móvil .
Escucho un ruido en la puerta principal, empiezo a ponerme nerviosa y a temblar, cojo un cojín y salgo al pasillo. Me dirijo en silencio hasta la puerta y vi a Damiano con los zapatos en la mano.
-Si piensas hacer daño a alguien con eso vas mal
-Joder, no sabes el miedo que tenía, gilipollas
-Iba a salir a dar una vuelta, no quería molestarte, lo siento-se puso los zapatos
-No importa, pero pensé que íbamos a morir
-No vamos a morir-soltó una pequeña risa- con tu súper cojín seguro que salen corriendo
-Eres un idiota- le pego suavemente en el brazo
-¿Vienes?-me pregunta y yo niego con la cabeza- volveré enseguida.

ESTÁS LEYENDO
Nada es lo que parece, Marlena ~Måneskin
FanficMarlena lleva viviendo en Roma un año,nunca fue fácil para ella, así que ¿Por qué debería serlo ahora? Amistad, peleas, amor y misterio rodea la vida de nuestra protagonista.