Conquistando tu amor

Capitulo 5.

Desde aquella vez que hablé con él no he podido estar tranquila, siento que debo hacer algo y saber más de él, no es que lo esté acosando pero en el amor no se manda y estoy que me muero de los nervios saber que no puedo hablar con él y sólo fue un momento.
Ahora estoy con mi primo, solos, y yo no quiero preguntarle nada a él porque es un poco muy chismoso y no me cae tan bien… Pero al final de cuentas es la única persona.

-Joshua. Tengo que preguntarte algo

- A ver cuenta, cuenta – se sentó frente mí

- ¿Recuerdas el audio que me enviaste?

- Así, el de mi amigo Neri, bueno disque amigo

- ¿Por qué disque amigo?

- Porque ya casi no lo veo

- Bueno, ¿él tiene hermanos?

- Si, él es… Deja mejor  le pregunto a mi mamá – se fue a buscar a mi tía no tardó ni tres minutos y regresó – Él es mediano, tiene un hermano que es mayor Ariel y una hermana menor Abigail

- De acuerdo, me voy a la casa.

Bien, al menos sé que no era el perfil de él y el otro perfil era de su hermana, siento que estoy más cerca. Pero así lo tenga frente a frente me siento lejos por no hablarle, por no poder hablarle. Pero igual buscaré la forma.

[...]

Una semana después.

Estábamos comiendo, y para ser la comida ya era más tarde de lo normal.
Llegaron mis tíos y Neri venía con ellos, pero entró reproduciendo “2:50” volteo al comedor y yo miré a él. Me sonrió con complicidad y saludo a mi familia.
No pude evitar sonreír y sentir una corriente que me recorría el cuerpo entero. Algo no lo había sentido nunca, y no sé porque con él, con él lo siento.

-Les quería decir – entró mi tía, Merari – Que al rato vendrán la familia de Neri

- ¿Gabriel y Kennedy? – preguntó mi abuelo. Ellos son los padres

- Si, ellos y sus hermanos, bueno y su cuñada

- Bueno, si está bien – respondió mi abuela

Ahora resulta que será una convivencia de familias ¡Que emoción! No la puedo contener la emoción en verdad más cerca, y hoy hoy es cuando confieso todo, bueno a él le confieso todo.

[...]

Dos horas después (7:16 PM.)

Yo estaba en mi habitación y mi amigo ya se había enterado de todo y me había dado algunos consejos, como:

“Vilu arréglate” “Come antes algo para estar tranquila” “No te muestres desesperada por él” “siempre se tú y no cambies o inventes algo de ti o tus gustos” “recuerda que eres la mejor persona que he conocido, y vales un montón y si él no lo ve, no es el indicado”
Sin duda sus palabras me dieron más valor y sobre todo tranquilidad.
Yo estaba escuchando a morat, cuando llamaron a la puerta de la calle, eran ellos. Mi mamá bajó y enseguida bajé yo, estaban en la sala.

[...]

-¿Tú eres la hija de Karen? – me dijo el papá, Gabriel

- Si – respondí nerviosa

- Lo sabía – sonreí – Y tienes la sonrisa de tu abuelo

- Gra- gracias – miré a Neri, el cual me veía y sonreía

Ellos siguieron platicando un buen rato

-¿No quieren café? – dijo mi abuela

- Claro que si, por favor – respondió Kennedy, la mamá de Neri

- Vilu, ¿puedes ir por azúcar y leche? – agregó mi abuela

- Claro, voy – me levanté

- Te acompaño, es tarde y no vayas sola – esa voz… Un momento ¡me va a acompañar! Es  mi momento

- Gracias

Salimos y comenzamos a caminar con dirección a la tienda.

-¿Y cómo vas con lo de tu novia?

- Hemos terminado, ya no tenía arreglo lo nuestro… Pero no quiero hablar ahora de eso

- Bien, lo entiendo.

Compramos lo que teníamos que comprar e íbamos de regreso a mi casa.

-Deberíamos de quedar un día y salir – sonrió al verme

- Imposible, mi familia no lo ve así

- Una escapada no le hace mal a nadie

- ¿Me estás diciendo que salga contigo a escondidas?

- Si, fue lo que dije. Piénsalo y me avisas

- ¿Cómo se supone que lo haré?

- Dos – mostro el dedo índice y medio – cincuenta – formó un círculo con la mano y lo colocó en su ojo derecho – Es buena ¿no?

- Neri, estás loco. Pero dale, yo te aviso – hice lo que él anteriormente

- rió – Ojalá te animes

Entramos a mi casa, siguieron platicando su familia con la mía durante una hora más.
Se fueron y yo sabía que no tenía que rechazar la oportunidad. En verdad estaba siendo sincero, yo lo sabía y lo sentía.

[…]

Íbamos ya directo a nuestra casa. Que por cierto quedaba cerca de la de la familia Hoffman.

-Neri, en cuanto lleguemos quiero hablar contigo – dijo mi papá

- Tss… Le toca regaño – mi hermano bromeo

- Y se callan porque siguen ustedes – dijo mi papá mirando por el retrovisor

Después de cinco minutos ya estábamos en mi casa.
Yo me iba a subir a mi habitación… Antes de que mi padre se le ocurriera hablarme otra vez

-Neri, te regresas, no se me olvida hablar contigo – si me vio. Bajé los tres escalones y regresé con mi papá

- Dime

- ¿Qué te traes con Violetta?

- ¿A qué te refieres?

- Pues, eso es lo que quiero que me expliques. Las miradas, sonrisas. Ah y para variar hoy la acompañas a comprar las cosas

- Bueno, que no dices que soy un mal educado y más con esa familia, pues estoy cambiando

- A ver, no, pero yo me refería a que tienes que cambiar en general, no sólo con ella o esa familia. ¿Sabes? Merari dice que si a ti te pagaran por matar a alguien, vas y lo haces

- ¿Sabes que no lo haría?

- Exacto, pero es culpa mía porque a ver ¿para qué trabajas? Aquí tienes todo… Ellos piensan que solo es para molestar. Por eso no te han prestado la camioneta.

- Bueno, que piensen lo que quieran, a mí no me van a cambiar

- Claro, hasta terminar como tu hermano, a punto de ser padre a los veinte años, no saben hacer nada

- Pues sí que lo sabían

- Mira cállate ya… Yo solo te voy a decir cuidado con la nieta de Hoffman, sabes lo que son ellos para mí

- Bueno. No me voy a volver a acercar a ella, si eso te pone mejor

- Gracias será lo mejor – me dio una palmada y fui a mi habitación.

Era evidente que no le haría caso a mi papá, pero tampoco le haría daño a Vilu, ahora si es importante y eso de matar a alguien… Pues sí, si lo hubiera hecho pero, en un pasado ahora no. Y de que soy un mal educado, sólo no respondí un par, bueno quizá tres veces el saludo de uno de los tíos de Violetta. Pero y qué ¿eso significa que no amo a Violetta? Bueno, amarla, amarla… Lo que es amarla.