Conquistando tu amor

19. DIA 99

Solo seis días seis y va más de un mes que no sé nada de Neri, no entiendo que es lo que pasa y menos con mis sentimientos.

Desde hace semanas cada que escucho hablar a Bruno, hago comparaciones con Neri y no se que es lo que siento, él juega con mi cabello y Angélica me lo ha dicho, intenta sacarme plática por WhatsApp o estar cerca de mi cuando estamos en la escuela y eso me confunde. Aunque a él lo quiero ver cómo amigo ahora me doy contra la pared y siento que no es lo que quiero.

- Hola - llegó Bruno y se sentó tras de mi

- Hola - dije un poco apagada

- ¿Qué te pasa?

- No es importante

- Claro que lo es, todo lo tuyo es importante

- Gracias

- Toma, algo pequeño pero para alegrar tu día

Me dió un chocolate, lo que hizo que recordara la primera salida con Neri, cuando me dió el chocolate y sus palabras. No puede evitar llorar.

- ¿Qué tienes? - se arrodilló frente a mi

- Es que - dije sollozando - me acordé de algo

- ¿Puedo abrazarte?

- Por favor

Me abrazó y sentí como su corazón empezó a latir muy rápido lo que hacía que me pusiera nerviosa.

- ¿Me quieres contar? - me soltó

- De acuerdo, pero prométeme que no dirás nada a nadie

- Lo juro

Comencé a contar desde la primera vez que vi a Neri hasta el último mensaje. 

- Es un idota, baboso, menso, estúpido. No vale la pena que te pongas así por él

- Gracias pero es difícil

- Lo sé, pero quizá alguien más va a llegar

- Es que - me interrumpió

- Salgamos éste sábado

- No se, tengo que avisar primero

- Házlo, y me avisas

- Está bien.

[...]

Al salir de la escuela, me despedí de Bruno como de costumbre, - dándole cinco y chocando los puños -

Angélica y yo caminamos a la avenida como de costumbre.

- ¿Te invito a salir?

Ya le estaba contando lo que había pasado con Bruno

- Si, pero es que estoy confundida, porque tú sabes lo que pasé con Neri, entonces ahora con Bruno y su forma de ser, es difícil.

- Sólo te recuerdo que un clavo no saca otro clavo.

- Lo sé, y no quiero sacar a Neri y menos ocupar a Bruno, pero no puedo

- ¿Neri no te ha hablado?

- Lo último fue - saqué mi celular y leí el mensaje - "Lleve a Coda al veterinario, por eso no te hablé"

- ¿Coda?

- Su perro

- Ah, buen pretexto... No te preocupes ha de seguir en el veterinario

- reímos - Seguro

Llegamos a la avenida, nos despedimos y yo me puse los audífonos dispuesta a caminar a casa, concentrada en mi música.

[...]

Llegué a mi casa, y como de costumbre revisé el chat de Neri para ver si me había escrito o ver su hora de conexión... Pero nada.

- ¿Cómo te fue? - estaba entrando mi mamá

- Bien, todo estuvo muy tranquilo

- Que bueno

- Oye, un amigo me invitó a salir el sábado

- ¿Qué le dijiste?

- Que iba a ver y después le avisaba ¿Me dejas salir?

- Está bien, pero un rato y no muy tarde.

- Gracias

Dicho eso sentí como algo en mi interior hizo como una conexión; estómago, corazón y cerebro, efectivamente me había emocionado y diferente.

Le mandé mensaje a Bruno para decirle que si me habían dejado salir con él, y él me dijo que le daba gusto, y que me iba a sacar una sonrisa y olvidar todo.

En definitiva no se que es lo que estoy haciendo con mi vida pero se que lo que haga será para bien.