El viaje hacia Roma fue más o menos extenso,a pesar de que normalmente fuera de una hora y media aproximadamente ,nos había tocado un tráfico horrible,por lo que en vez de ser una hora,fueron más de tres. El Erick iba estresado y enojado,así que el único sonido que se escuchaba dentro del auto,era la música.
- ¿Puedo poner una yo?.- pregunté.
- Sí.- habló después de dos horas en completo silencio. - La clave es "EAPF15".- deletreó.
- Gracias.- sonreí a pesar de que él no me estuviese viendo. - Oye,¿estás muy enojado?.- pregunté aún sabiendo la respuesta.
- No estoy enojado.- me miró de reojo. - Solo que quería aprovechar el día allá,y mira,tres horas en un taco de mierda.- se quejó. - Pero no tiene que ver contigo,mi Sofi.
Aunque yo supiera desde el principio que su mal humor era simplemente por la cantidad de autos,escuchar esas palabras salir de su boca,me ayudaron mucho a poder relajar mi cuerpo,ya que teniendo la culpa o no,el ambiente estaba muy tenso,y no era del todo agradable.
- Lo sé.- hice un puchero. - ¿No te gustaría escuchar alguna historia mía?,digo,para pasar el rato.
- Me encantaría.- sonrió. - Cuéntame.
- ¿Que te gustaría que te contara,más o menos?.
- ¿Alguna de amores del pasado?,pa' saber que hacer y que no,digo yo.- encogió sus hombros.
Reí e inhalé una buena cantidad de aire para comenzar a contarle sobre mi primer amor.
- Bueno.- suspiré. - Conocí a este personaje cuando yo tenía trece años y el catorce.- pausé. - Después de un año de conocernos,nos pusimos a pololear. Típico pololeo de pendejos po.- ambos reímos.
-Todo al principio de la relación era lindo,tú cachai'. Pero después,el weon se puso híper tóxico,casi al punto de que con el único hombre que podía salir,era él.- recordé con lástima. - Yo lo amaba caleta,era prácticamente dependiente de él,entonces no tenía una venda en los ojos,tenía una sábana.- exageré.- Mi mejor amiga de ese momento,me dijo muchas veces,pero yo nunca la tomé en cuenta. Viví años de relación así,donde me tenían súper controlada.- el me miró atento. - Y cuando finalmente me di cuenta de todo,terminé con él.- encogí mis hombros.- Chucha.- formó una "O" con su boca. - ¿Cuántos años duraron?.
- Nueve.- achiné mis ojos. - De hecho,terminé con él el mismo día de nuestro cumple años número nueve.- reí al darme cuenta de lo mala que había sido.
- No sé qué decir.- tomó mi mano. - Yo por mi parte te prometo,pero te prometo,que jamás te haré vivir algo así.- lo miré directamente a los ojos. - Yo te cuidaré Sofi,como mi más Preciado tesoro,pero jamás de los jamases llegaré a ser una persona tóxica.
- Gracias flaquito.- sonreí. - Sé que tú no eres así.
- Pero.- interrumpió. - Tú ya no lo amas,¿verdad?.
- Erick.- apreté su mano. - No,no pienses eso. Yo te quiero a ti.
Este sonrió satisfecho por mi respuesta,o quizás era porque el tráfico cada vez avanzaba más rápido.
Cuando quedaban cuarenta minutos para llegar,el Erick decidió parar en un McDonald's a comprar cosas para comer,ya que ni en nuestros mejores sueños llegaríamos a tiempo para poder almorzar algo decente.
- Pucha Sofi.- me miró. - Esto no salió para nada como yo quería.- en sus ojos notaba cierta tristeza y decepción.
- Pero Erick,estamos juntos.- sonreí. - Eso es lo que importa al final,¿o no?.
- Sí.- me abrazó tiernamente
La fila para poder pedir la comida fue bastante rápida,por lo que ya nos encontrábamos en el auto comiendo mientras cantabamos algunas canciones de reggaetón al unísono.
- Esto es como lo que siempre soñé.- dije metiéndome una papa frita a mi boca.
- Yo igual.- sonrió. - Oye,¿te puedo preguntar algo?.
- Obvio,dime.- miré atenta.
- Antes de conocerme personalmente acá,en Italia,¿sabias de mi existencia?.- preguntó curioso.
- No.- bromeé. - Obvio que si po,si eri' seleccionado nacional de mi país.
- Pero igual po,no a todas las minas le gusta el fútbol,o aveces les "gusta". - hizo comillas con sus dedos. - Pero no cachan ni una. - reí.
- Es que, al cacas le gustaba.- hice cara de asco.
- Entonces siempre lo apañaba a ver los partidos,e incluso varias veces fui a ver como jugaba.- Ese weon no te merecía. - dijo serio.- Mucha mina pa' muy poco culiao.- reímos. - Y,¿por mi verías fútbol?.- me hizo ojitos.
- Obviamente.- tragué saliva. - Pero me gustaría más verte jugar a ti.- al parecer mi respuesta le había causado mucha impresión,ya que se había quedado en completo silencio.
- ¿De verdad?.- sus ojitos estaban más chinos de lo normal.
- Si po.- reí. -¿Por qué no lo haría?.- acaricié su cabello.
- Mi ex nunca lo hizo.- se excusó. - Me pasó casi lo mismo que a ti,pero con menos toxicidad.- reí.
- Que pencas pueden llegar a ser algunas personas.- reclamé. - Y uno ahi enamorá' hasta las patas.
- Bueno,ya llegó quien sí te va a valorar,bebé.- se auto-señaló.
- Lo mismo digo.- me acerqué un poco más a él y besé cortamente su boca.
Luego del beso,me dio una de esas sonrisas que tanto me gustaban para continuar con nuestro camino,sin ninguna parada más.
Al llegar a Roma,me puse a observar atentamente cada detalle de la bella ciudad,ya que era mi primera vez ahí,y quién sabe,podría ser la última. Saqué mi celular para dejar registro de mi hermosa visita en una parte de Italia. Cuando por fin me gustó realmente una de las mil fotos que había tomado,decidí subirla a mi historia.
- Erick.- dije nerviosa.
- Dime.- respondió sin despegar su vista del camino.
- ¿Te puedo etiquetar en mi historia?.- pregunté.
- Obvio.- sonrió.
- ¿Seguro?,si te complica dime nomás...yo soy súper comprensiva.- este rió leve.
- Sofi,súbela.- continuó riendo mientras negaba con la cabeza. - No me complica,dale.
- Bueno.
Le di las ultimas retocadas a mi historia antes de publicarla. Sabía que esa gente que no me hablaba nunca,me la respondería al instante al ver la mención del grandísimo Erick Pulgar.
- Listo.- dije después de subirla.
- La voy a resubir.- aprovechó el semáforo en rojo.
@gary_medel17, @eduardovargasrj1, @alexis_officia1, @charles.20aranguiz y otros usuarios más han comenzado a seguirte.