But I love you so | Chifuyu Matsuno |

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—Gracias por ayudar a Chifuyu—Dijo Baji mientras veíamos como el rubio compraba los medicamentos en la veterinaria—Hace 2 días él estaba llorando porque ni él ni su madre podrían pagar del tratamiento, es todo un llorón— río bajito.

— Estoy segura de que Chifuyu tiene un buen corazón—Conteste meneando mis hombros, mi mochila no era pesada, pero estaba comenzando a cansarme, odiaba esto.

—Te ayudo— Hablo Baji deprisa para forzarme a darle mi mochila, él era muy despreocupado...

—¡Listo, las compré!—Se aproximó Chifuyu mostrando la bolsa blanca contento—¡Todas!

Yo solo le ofrecí una sonrisa, no era muy afectuosa y menos con personas que acababa de conocer, pero esos chicos tenían una vibra peculiar.

Dado a qué siempre me conservaba ocupada en el hospital, nunca llegue a relacionarme con personas de mi edad, no sabía cómo hablar o actuar con ellas ¿Qué clase de temas hablas con amigos? ¿O a que lugares vas cuando quieres divertirte con ellos? Yo solo conocía el olor a alcohol y las pastillas sabor cereza...

Todos ellos pensarán que soy una persona reservada y sería, pero la verdad es que no sé cómo reaccionar...

— Dame eso, luego puedes perder la bolsa—Baji le arrebato la bolsa a Chifuyu y abrió mi mochila con toda la confianza del mundo.

No sabía si incomodarme por eso, cuando la abrió me dio una mirada rápida. En mi mochila guardaba medicamentos y aparatos médicos de mano por si llegaba a pasarme algo. Era una norma de mis padres para que no pasará nada malo cuando salía sola.

Me avergoncé de que haya visto el interior, Baji solo metió la bolsa y cerro la mochila como si no hubiera visto nada.

— ¡Tonto! ¿Por qué metes cosas en la mochila de ____ como si nada?

— ¡No me digas tonto! ¿No ves que vamos al mismo lugar? Somos amigos, hay confianza Fuyu—Le reclamo Baji.

Chifuyu se cubrió la frente cansado, yo estaba en silencio, Baji había visto todos mis medicamentos y me preparaba mentalmente para contestar cualquier pregunta suya.

—Vámonos, tengo hambre y necesito robar la comida de Chifuyu—Hablo finalmente Baji y camino pasando de nosotros.

—¿Ah?—Dijo molesto el rubio haciéndome reír, él se giró a verme divertido también—Lo siento Baji-san puede ser muy infantil.

Comenzamos a caminar lentamente con Baji frente a nosotros.

—No me molesta en lo absoluto, Fuyu.

Su expresión relajada cambio por completo cuando le llame por su apodo, sus mejillas y orejas se pintaron de un tono rojizo muy notable, el bajo la cabeza avergonzado, todas sus acciones me causaban ternura.

—Oooh discúlpame, es un apodo lindo, no lo pensé y solo lo dije— Hablé haciendo gestos raros con las manos para tranquilizar el ambiente.

— ¡Me gusta! Solo fue inesperado, Baji-san solo me llama así, pero me agrada cuando lo dices tú— Contesto con una sonrisa, pero luego se volvió a avergonzar de lo que dijo— Me gustan tus pecas—Dijo de manera repentina.

Fue difícil no sonreír, el chico se moría de vergüenza y no podía controlar lo que decía, veía como el rubio tomaba de sus cabellos y se maldecía mentalmente.

— AAAAH ¿Por qué no cierro la boca?— susurraba para sí mismo pero podía escucharlo.

— Tortolitos ¿Ya dejaron sus juegos?—Dijo Baji parando de caminar y voltear a vernos.

— ¡No estás ayudando Baji-san!— esquivo a toda costa mi mirada y camino un poco más rápido.

En el momento en el que lo alcance, tomé de la manga de su sudadera negra y me miró.

— A mí me gustan tus ojos, Fuyu.