◤Cingulomania◢

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Sing-gyoo-Loh-may-nee-uh /(seŋgolumania)/

Sustantivo

Un fuerte deseo de sostener a una persona en tus brazos

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Aunque todos habían empacado temprano, la mañana en que tomaron el autobús noctambulo de regreso a Hogwarts fue apresurada y bastante estresante. Elara apenas tuvo tiempo de tirar de sus zapatos antes de salir corriendo por la puerta. Al menos esta vez, la Sra. Black no volvió a gritar desde su retrato.

-¡Adiós, papá! ¡Te amo! - Llamó por encima del hombro después de bajar las escaleras, sintiendo la extraña necesidad de decir eso antes de irse.

-¡Te amo, El! - Sirius volvió a llamar con una sonrisa antes de llamar a Harry para su propia despedida.

Elara no se toma la palabra "amor" a la ligera. Simplemente se sintió bien decirlo en este momento... ¿Tenía sentido eso?

En cuestión de dos minutos, los estudiantes, acompañados por Remus y Tonks (que estaba disfrazada de mujer tweedy con cabello afilado y gris) caminaron por la calle rápidamente. -Vamos, cuanto más rápido subamos al autobús, mejor- apresuro Tonks, doblando una esquina antes de que Remus extendiera su brazo derecho.

Al instante, y no sin un fuerte estallido, un autobús púrpura de tres pisos apareció en el aire, casi derribando un poste de luz en el proceso. Stan Shunpike salto para saludarlos a todos, diciendo -Bienvenidos a él...

-Sí, sí, lo sabemos, gracias- interrumpió Tonks apresuradamente, haciéndoles señas a todos por los escalones. -Adelante, adelante, adelante- Elara podría haber jurado que escuchó a Tonks murmurar amenazadoramente al otro conductor después de reconocer a Harry

"Si gritas su nombre, te maldeciré en el olvido."

-Siempre había querido subir- proclamó Ron con asombro, mirando a su alrededor la lámpara de araña que colgaba del techo.

Elara resopló, luego casi gritó cuando vio a una cucaracha salir corriendo de un bolso caído y rápidamente se alejó corriendo. Era tarde, el autobús estaba lleno y los únicos asientos vacíos estaban separados entre sí.

-Parece que tendremos que separarnos- señaló Tonks, pareciendo un poco ansiosa. -Fred, George, Ginny y Elara, si solo toman esos asientos en la parte trasera ... Remus puede quedarse con ustedes ...

Al no tener absolutamente ningún problema con ese grupo, ya que necesitaba continuar su conversación con Fred y George que se cortó esa mañana con gritos de la Sra. Weasley, Elara siguió a Remus y a los demás a los asientos vacíos en la parte trasera del autobús.

Justo después del momento en que se sentaron y pagaron a Stan once sickles cada uno, el autobús aceleró con otro BANG furioso, y todos fueron arrojados hacia atrás en sus asientos. Elara evitó por poco caer agarrándose a una barandilla corta de arriba, muy probablemente allí por esa razón.

A medida que el autobús continuaba su ritmo sin paradas repentinas ni sacudidas, la gente lentamente comenzó a reanudar sus actividades, en las que Fred le pasó a Elara un pequeño trozo de pergamino. Ella le dio una mirada curiosa antes de desplegarlo, solo para leer en su cabeza:

¡Ayudando a Ellie a conseguir a la chica!
Haz esto (sin ningún orden en particular):
~Pasa tiempo con ella
~llévala a una cita
~Hazle un cumplido.

~Cosas pequeñas y significativas.
De nada,

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Selcouth// Hermione Granger (Traducción)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora