Subir aquí me calmaba, sentir el viento y mirar desde la altura me hacía sentir consciente. No había aguantado seguir escuchando a mi madre, verle llorar, saber que yo era la causa de ese martirio y no poder hacer nada para calmarla, era un nivel de mortificación insoportable.Así que, aún pensado en sus palabras, me fui al techo del edificio, se supone que subir era prohibido, pero a mí eso nunca me importo. Este era mi lugar, nuestro lugar, tenía todo el derecho de estar acá.
El poder atravesar las cosas fue nuevo, tal parece que, si quería hacer tangible algo solo tenía que pensar en que lo era, pero cuando me encontraba en medio de la inconsciencia podía traspasar todo.
El techo no tenía barandas, algo muy peligroso, pero el paso era prohibido así que asegurar la zona nunca fue importante. Me acerque al borde, si podía apreciar el viento, como soplaba, como movía mi cabello, pero no podía sentir su temperatura ¿Así se sentía? ¿De verdad había muerto? O esto es un sueño, como la película de navidad del viejo tacaño, película de mierda ¿Algún espíritu de algo me está mostrando un futuro donde no existo? ¿Cómo vuelvo a la realidad?
Estaba entrando en una paranoia, mire hacia abajo ¿Cuántos pisos tenía el edificio? Nunca me pare a contarlos, tampoco tenía ascensor, no me fijaba en esos detalles, pero se veía alto. Mire hacia atrás ¿cuánto tiempo había pasado aquí? Divagando, el sol no demoraba en salir por el horizonte.
Lo recordé, hacia unas semanas estuvimos aquí, viendo el amanecer, el recuerdo Chifuyu temblar por el frío, me hizo sonreír.
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Aún era verano en ese entonces, él de terco no se abrigo correctamente y se la paso tiritando un rato, yo me reí, pero luego le tendí mi abrigo. Quería hacerme el fuerte, quería impresionarlo y lo conseguí; sus mejillas rojas solo cobraban más color y movía la cabeza de un lado a otro, negando la prenda. Al final se la puse a la mala, obtuve un puchero y un “gracias” como respuesta.
Nos sentamos, entre palabras y chistes le tomé la mano, él solo se pegó más a mí, buscando calor, yo lo abracé porque también tenía frio y porque lo quería cerca.
Cuando el sol empezó a brillar lo mire. El sol era resplandeciente, sin embargo, Chifuyu relucía mucho más, al menos para mí era así. Sus ojos también me vieron, estos me profesaban amor, puede que más grande que el que yo le tenía. A veces teníamos esas peleas estúpidas del “yo te quiero más”, lo dejaba ganar, mejor dicho, dejaba que ocupara el puesto que le correspondía, estoy seguro de que Chifuyu me quería con más intensidad. Luego recibí esa sonrisa, él sonríe por muchas cosas y a varias personas, pero la de ese momento era “la sonrisa”, lo sabía, era distinta a la normal y solo me la dedicaba a mí.
Recuerdo sus palabras, aún las siento frescas, entrando a mis oídos y grabándose en mi cabeza.
–Hace un año empezamos a salir ¿lo recuerdan Baji-san? Usted me lo pidió en una madrugada como esta, luego de pelear contra una pandilla ya disuelta. Su moto se averió, y yo no llevaba la mía, así que nos vinimos a pie. Como era verano amanecía más rápido, justo como hoy, paramos en el santuario. Dijo que quería agradecer, que le acompañará. Yo accedí, claramente, pensé que agradecería haber ganado, o algo de la ToMan. Jamás pensé que agradecería el haberme conocido, luego me dijo que a pesar de conocernos hacia relativamente poco quería que continuará en su vida, como algo más que su amigo, yo no me iba a negar a tal propuesta, seguro estaba todo rojo de los nervios.
–Es verdad, tan rojo como un tomate, justo como ahora. – Le respondí sonriéndole burlonamente.
–No se ría ¿cómo no estarlo? Después de todo usted me pedía salir. Aunque lo niegue Baji-san es todo un romántico. – Una dulce risa se le escapo. – Y usted también estaba rojo mientras lo decía, así como está ahora ¿le Avergüenza recordar?
–No, no me avergüenza recordar, porque no me da pena habértelo pedido. Chifuyu, que seas mi novio es algo de lo que estoy orgulloso, estoy más que feliz de tenerte a mi lado.
–Eso es trampa, se supone que yo debo decirle gracias.
–Bueno pues gane, como siempre. – Chifuyu empezó hacer pucheros. – No hagas esos gestos, sabes que puedes hacer como compensación.
– ¿Qué?
–Besar a tu lindo novio. – Dije como si fuera lo más obvio del mundo.
–Entonces lo besare todo el día. – Me respondió, mientras me plantaba un beso en la mejilla, para después acurrucarse en busca de un abrazo que obvio le di.
–Eso espero.
–Baji-san. – Inicio, sabía que venían sus cursilerías, separándose un poco de mí, para mirarme a los ojos de nuevo.
– ¿Qué?
–Estoy muy muy, pero muy feliz de tenerlo a mi lado. Quiero que sepa que usted me genera toda clase de emociones y que lo quiero muchísimo. Espero que este sea el primero de muchos aniversarios. – Acompaño sus palabras con una cara de ensueño, en sus ojos llenos de ilusión se notaba que imaginaba mil escenarios felices, porque brillaban, además estaba “la sonrisa” era demasiado dulce para mí, aunque no me empalagaba, nunca lo haría.
–Ay, cómo mi lindo novio lo anhela tanto, entonces no puedo negarme. Ten por seguro que este es el primero de muchos, así será. – Le respondí mientras desviaba la cara, intentando ocultar mi propio sonrojo.
–¿Me lo promete?
– Te lo prometo.
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Parece que no cumplí esa promesa.
Amargo.
Ahora ese dulce recuerdo era amargo. El calor de Chifuyu en mis brazos ya no existía, no había frío, solo no se sentía nada. Mire abajo, desde ahí el suelo se veía algo lejano ¿De verdad estaba muerto? Entonces no importaba si saltaba.
¿Qué podría pasar?
Si ya nada importaba. No podía consolar a mi madre, tampoco podía molestar con mis amigos, o escuchar la dulce risa de Chifuyu, mientras lo tenía entre mis brazos. Si no podía hacer nada de eso ¿Por qué tendría razón de seguir aquí? Mire hacia atrás, el amanecer que hace unas semanas se veía hermoso ahora se sentía sombrío y vacío, el cielo tenía nubes grises, hoy llovería. Volví a fijar mi vista hacia al frente, cerré los ojos y caminé, caminé hasta que sentí que debajo de mí no había nada, hasta que el vacío me jalo hacia abajo.
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Quiubo banda 8) ¿cómo están?
Les vengo con otro minicap jsjs no sé si me demoro mucho en actualizar :( si es así pido perdón, trato de q salga decentico.
Espero que el fic les esté gustando, cualquier cosa me dicen jsjs <3
Muchísimas gracias por leer, besitos
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Invisible
FanfictionBaji siempre estará al lado de Chifuyu, incluso después de la muerte. ..................................... Disclaimer: los personajes no me pertenecen, son parte del manga Tokyo Revengers, escrito e ilustrado por Ken Wakui.