𝕮𝖍𝖆𝖙 𝕹𝖔𝖎𝖗 𝖃 𝕽𝖊𝖆𝖉𝖊𝖗: 𝕿𝖍𝖊 𝕸𝖚𝖘𝖊 +18 *ESPAÑOL*

𝘾𝙝𝙖𝙥𝙩𝙚𝙧 11: 𝙎𝙡𝙚𝙚𝙥𝙞𝙣𝙜 𝘾𝙪𝙥𝙞𝙙

Las últimas hojas de otoño luchaban contra el viento mientras miraba a través de la ventana de la clase. El profesor de Historia del Arte estaba hablando y hablando. Estaba tratando apresuradamente de repasar todos los temas que tenía que hacer antes de que terminara el semestre, lo que no tomaría mucho tiempo. Durante los últimos meses, muchas clases se habían pasado con estudiantes discutiendo entre ellos para ver quién sabía más sobre el tema y no dejaban hablar al maestro. Ahora la clase estaba atrasada en el horario.

Pero aun así, no te atreviste a prestar atención. Tu mente estaba encerrada en un ciclo constante de pensamientos que consistían básicamente en Chat, tu calificación, la boca de Chat, tu calificación nuevamente, otras partes del cuerpo de Chat y, a veces, lo que comerías en el almuerzo. No pudiste evitarlo. Tenias hambre. Para el almuerzo, por supuesto.

Afuera, una hoja no resistió el viento y se dejó llevar, ahora a merced de las corrientes de aire. Lo acompañaste hasta que se perdió de vista, ahora viajando por París.

Esa hoja podría representar tu situación con Chat Noir en este momento. Como la hoja, habías intentado simplemente moverte con el espíritu libre que era Chat, pero no había sido suficiente, y ahora te lanzabas a un baile con el viento, que no sabías cómo terminaría. Aunque tuviste que admitir, al contrario que la hoja, no te habían dejado boquiabierta. Te habías ido de buena gana.

Parpadeaste cuando un grupo de palomas pasó volando, la bruma en la que estabas se rompió. Ciertamente te inspiraste hoy. Bueno, no fue realmente una sorpresa después de los eventos de ayer. Te acomodaste el grueso pañuelo alrededor del cuello. Cubrió bastante bien las marcas que Chat había dejado en ti, junto con el maquillaje que tenías que aplicar. Afortunadamente, hoy hacía tanto frío que incluso dentro de los edificios podías usar el accesorio y no ser observada, pero tendrías que hablar con el chico gato sobre esto. Tendría que controlarse la próxima vez.

Una mano tocó tu hombro y saltaste, dándote la vuelta. Marinette te miraba con los ojos muy abiertos.

-Oh mon dieu , désolé , no respondiste cuando llamé. -Ella tenía una expresión preocupada, pero luego te miró de frente. -Dos veces.

Respiraste profundamente y enderezaste tu postura en tu asiento, tu corazón se desaceleró por el susto.

-Lo siento Mari, hoy estoy un poco agotada.

-Oh.- inclinó la cabeza, analizando tu rostro. -También estás en la nube nueve también, ¿eh? -Ella se rió entre dientes.

Parpadeaste. ¿Quién más estaba también en la nube nueve?

-¿Qué?

Le diste una mirada confusa, pero ella rápidamente cambió de tema con una sonrisa ilegible.

-¿Cómo te sientes hoy? ¿Mejor?

Entrecerraste los ojos por un segundo mientras ella esquivaba la pregunta, pero luego te concentraste en la nueva.

-Sí, me siento mucho mejor. -Tocaste tu sien y esbozaste una pequeña sonrisa. -Sin dolor de cabeza.

-Me alegro. -Mari sonrió. -Ah, y además, la maestra dijo que podemos trabajar en el proyecto para el próximo lunes en grupos. -Señaló con el pulgar a la maestra frente al aula, recogiendo sus cosas. Al parecer, la clase había terminado. Llevabas mucho tiempo soñando despierta. -Y estaba pensando si querías ser parte de nuestro grupo.

-¿Nuestro? -Frunció el ceño mientras inclinaba la cabeza.

-Oh. -miró detrás de ella y agarró el brazo de un chico, llevándolo a su lado. -¿Para qué te escondes? -Ella susurró y él emitió un sonido de "¡uf!" Mientras ella lo empujaba. Tus ojos se agrandaron cuando tus miradas se cruzaron y viste mechones de cabello rubio y ojos verdes.