𝕮𝖍𝖆𝖙 𝕹𝖔𝖎𝖗 𝖃 𝕽𝖊𝖆𝖉𝖊𝖗: 𝕿𝖍𝖊 𝕸𝖚𝖘𝖊 +18 *ESPAÑOL*

𝘾𝙝𝙖𝙥𝙩𝙚𝙧 10: 𝙏𝙝𝙚 𝙏𝙧𝙞𝙪𝙢𝙥𝙝 𝙤𝙛 𝙀𝙧𝙤𝙨

Tus ojos se abrieron y lo primero que viste fueron hojas de árboles meciéndose con el viento. Parpadeaste para aclarar la vista, intentaste moverte.

Una mezcla de negro y rojo apareció en su campo de visión.

-Oh, estás despierta. -La amable voz estaba más cerca de lo que esperabas y te diste cuenta de que estabas acostada en los brazos de alguien.

-¿Ladybug? -Tu voz salió un poco estrangulada, tu garganta seca. Ella tarareó mientras se aclaraba la garganta. Mientras te ayudaba a sentarte en el césped, te diste cuenta de que estaba un poco sin aliento y que su cabello corto estaba levantado en algunos lugares. Con el ceño fruncido, miraste a tu alrededor y viste el campus de la universidad lleno de gente que se levantaba y se frotaba la cabeza. -¿Qué pasó? -Preguntaste, notando que cerca de ti estaban tus cosas, tu pintura y la paleta de colores.

-Bueno... -Se rascó el cuello mientras se agachaba cerca de ti. -Fuiste akumatizada.

-¿Qué? -Dijiste, más fuerte de lo esperado. Con los ojos muy abiertos, miraste a la heroína, los latidos de tu corazón aumentaron. -¿Yo? 

-Oye, relájate. -Ella puso una mano en tu hombro, tratando de consolarte, pero fue inútil. ¿Cómo puedes relajarte después de escuchar noticias como esta? Ladybug continuó, con una sonrisa tranquilizadora en su rostro. -Se acabó.

-Pero cómo... Qué... -Te detuviste, tus ojos se abrieron aún más ante el pensamiento que cruzó por tu mente. -¿Dónde está Chat? -Miraste a tu alrededor, buscando al chico gato, pero no estaba a la vista. Volviste a mirar a Ladybug, tratando de recordar tus acciones como villana. -Yo no... lastimé a ninguno de ustedes, ¿verdad? -Te mordiste el labio y te miraste las manos, jugueteando con ellas, una ola de inseguridad se apoderó de ti. -Lo siento mucho.

-Oye. -Ella apretó ligeramente tu hombro y miraste hacia arriba. -Hemos sido héroes durante muchos años. Estamos acostumbrados a esto. -Ella sonrió. -Y fue una gran pelea. -Te pusiste una mano en la cara y suspiraste. ¿Cómo había llegado a esto? -Y Chat. -continuó Ladybug y tú la miraste a través de tus dedos. -Está bien, no te preocupes. -Se aclaró la garganta y miró hacia otro lado, casi como si estuviera tratando de no reír. Estabas completamente perdida. Ella recuperó la compostura y te miró. -Tenía que... hacerse cargo de algo. -Abriste la boca para hacerle el millón de preguntas en tu mente, cuando Ladybug volvió la cabeza hacia el edificio principal de la universidad como si hubiera escuchado un ruido. -Y hablando de eso... -Sus ojos se endurecieron. -Hay algo que debo hacer antes de que desaparezca mi transformación. -Seguiste su mirada, pero no viste nada. Ladybug te miró y sonrió, su mirada cálida de nuevo. -Tus amigos te explicarán todo, pero trata de no asustarte, ¿de acuerdo? -Se levantó y tú seguiste mirándola con los ojos muy abiertos. ¿Asustarte? ¿Qué habías hecho? Al ver tu cara de sorpresa, se rió entre dientes. -Estás bien, eso es lo que importa. -Tengo que darme prisa ahora. -Ella preparó su yo-yo y con una despedida, se fue al edificio principal. Seguiste mirando fijamente el lugar donde ella estaba hace un segundo, tus emociones arremolinándose dentro de tu pecho y casi haciéndote doler el estómago por toda la ansiedad reprimiendo dentro de ti.

Entonces alguien gritó tu nombre y tú volteaste la cabeza hacia la entrada del edificio. Alya corría en tu dirección, esquivando a los otros estudiantes que comenzaban a volver a sus tareas. Intentaste levantarte, pero un dolor agudo en la cabeza te hizo silbar y detenerte.

-¡Oh, mon dieu , no intentes levantarte! -Alya se acercó, se agachó y luego te envolvió en un fuerte abrazo. Rápidamente te soltó y comenzó a buscar en tu rostro. -¿Estás bien?

Casi le diste una pequeña risa. Actuaba como una madre preocupada.

-Estoy bien. -Te tocaste el sienes, donde el dolor disminuía un poco. -Todavía me duele la cabeza cuando me muevo, pero estoy bien.