The Phoenix Girl ༄⭒ Elijah Mikaelson

❧ 018 | New York.

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018 | NUEVA YORK.

Después de hacer las maletas me encuentro bajando del auto que conduce el hibrido original. Conducimos por veinte minutos hacia las afueras de la ciudad. Frente a mi se encuentra un gran avión que grita en mayúsculas y negritas "elegancia", es de color blanco limpiado perfectamente, juro que el avión no tiene ni una gota de polvo.

— ¿Es suyo? — le pregunto a Rebe que se encuentra bajando del auto.

Presiento que el avión es de la familia, aunque, no me sorprendería la manera en la que lo consiguieron o si solo me respondieran con que hipnotizaron a alguien para obtenerlo o matar a alguien.

Después de todo son los Mikaelson.

— Claro que es de nosotros — alega con egocentrismo Klaus colocándose a mi lado.

Puedo ver como el personal del avión comienza a bajar nuestras maletas del auto para subirlas al avión. Klaus comienza a caminar hacia los escalones del avión, sin dudar mucho le sigo y pronto me encuentro en el interior del avión.

Lujoso, elegante, glamoroso y limpio.

Todo está perfectamente impecable. Cada cosa está en donde debería de estar.

Hay doce asientos de color negro distribuidas en dos columnas. En una esquina del avión hay un mini refrigerador que estoy segura que ha de contener bolsas con sangre y a su lado hay un carrito con vasos y botellas de licor.

Al final del avión hay un pasillo con dos puertas, una es la del baño y la otra ni idea.

Tomo lugar en el quinto asiento que este situado al lado de la ventana, siempre que viajo que gusta ir de lado de la ventana y más si es en avión.

Suena cliché pero cuando viajo me gusta colocarme los audífonos, escuchar mis canciones favoritas del momento mientras miro por la ventana las vistas hermosas que me regala el mundo.

— La planta por la que iremos, ¿por qué tenemos que ir a Nueva York por ella? — pregunta Kol sentándose en los primeros asientos.

Rebekah se coloca junto a él, Klaus se hecha en los primeros asientos de la segunda columna ocupando ambos, Freya se sienta en los asientos detrás de él quedando en la misma fila que yo. Elijah se sienta a lado mío.

Cabe recalcar que se sienta cerca.

Muy cerca.

Y lo recalco porque el cabe perfectamente en su asiento como para invadir el mío.

— Esa planta dejo de crecer en muchos lugares debido al ambiente. Esa planta es muy delicada y necesita de cuidados especiales, un brujo en Nueva York tiene una cosecha de ella — comienza a explicar Freya — Él es el único que tiene una cosecha de plantas ruvamarocri, así que tenemos que lograr que nos la de sí o sí — nos ordena a todos.

Sin presión claro.

— ¿Dónde nos quedaremos? — pregunta Kol vertiendo la sangre de la bolsa medica hacia una copa porque claro, primero la elegancia.

— Lo veremos cuando lleguemos — dice Freya sacando de su bolso un cuaderno.

— Sí quieren, podemos quedarnos en mi departamento — digo viendo a Klaus morder la muñeca de una azafata para después colocar la muñeca de la chica arriba de un copa dejando que comience a llenarse.

Cada quien tiene sus modos de beber sangre.

— ¿Vivías en Nueva York? — me pregunta Elijah, asiento.