*Narra Holly*
Al parecer Derek estaría ocupado hoy; ¡maldita sea!, ¿no podía agonizar en otro momento su tía?.
Entré a mi coche y y me quedé un rato ahí fumando. Los cigarrillos me ayudaban a calmar la ansiedad que siempre tenía.
Cuando terminé arranqué. Justo me cruzo con el coche de Lana. La seguí con la vista por el espejo retrovisor; paró en la casa de Derek.
Dí la media vuelta; las ruedas chirriaron en el asfalto. Aparqué mi coche detrás de un árbol y me quedé ahí observando.
Bajó la zorra de Lana con su típico bolsito blanco Chanel y tocó timbre en la casa de MI Derek.
La puerta se abrió y entró.
*Narra Lana*
Bajé de mi coche y toqué el timbre de la casa de Darren. Era algo pequeña y simple.
-¡West!. Dijo él.
-Darren...
-Pasa, pasa.
Entré.
-Mira, tengo algo para ti.
¿'Algo' para mí?, ¿que será?, ¿un par de calcetines?, ¿una sudadera de segunda mano?. Los regalos de Darren no son muy buenos...
-¿Qué es?. Quise saber.
-Ya verás. Dijo a la vez que iba a otra habitación. -Cierra los ojos.
-No.
-Como quieras.
-¿Y?. Dije.
-Toma. Dijo apareciendo con un ramo de rosas y extendiéndomelo.
*Narra Derek*
Le extendí el ramo de rosas que había robado anoche, a la rubia.
-24 rosas rosas, ¡y de las mejores!.
Mentira, ahí sólo había 20 rosas y ni siquiera las conseguí limpiamente...
*Narra Lana*
-Gracias. Dije algo atónita.
No pensé que Darren me haría un regalo de este tipo...
-¿Esta mejor así?. Preguntó.
-¿A qué te refieres?.
-El otro día te llevé una flor y tú la rechazaste; y hoy te doy 24 rosas. ¿Está mejor así?.
Eso me dió risa. Recordé la cara que puso cuando rechazé su mísera flor.
-Sí, está mejor. Mis flores preferidas son las rosas rosas, ¿cómo lo supiste?.
-Tengo mis contactos. Ahora, ¿estudiamos?.
Asentí.
*Narra Derek*
¿Sus flores preferidas eran las rosas rosas?, ¡qué suerte la mía!.
Estuve explicando álgebra a la rubia por dos horas, verdaderamente no entendía nada.
-¿Así está bien?. Dijo ella entendiéndome su hoja de cálculos.
La verifiqué.
-No... ¡está terrible!.
-¡Hice lo que me dijiste!. Se excusó.
-Tendrás que venir más seguido West...
-Creo que tú me enseñas mal para que tenga que venir más veces a tu casa. Dijo ella.
-West, yo enseño bien, ¡tú no entiendes nada!. ¿Cómo has logrado pasar la materia toda la secundaria?.
-Mis padres sobornan al profesor.
-¡Vaya que tienen dinero!. ¿Puedo hacerte una pregunta?.
-Que sean dos...
-¿De qué trabaja tu padre?.
Esa pregunta la incomodó.
-No importa de qué. Enséñame álgebra.
Te enseñaría muchas cosas, y no están relacionadas con álgebra...
Le expliqué durante media hora más y luego ella se tuvo que ir.
-¿Te parece venir mañana?. Le dije.
-Tendría que ver. Luego te aviso.
-Bueno.
-Adiós Darren. Dijo ella.
-Adiós; por cierto ¡me encanta como luces hoy!.
-Cállate ya.
-¡West!. La llamé.
Ella miró.
-Te olvidas las flores. Dije llevándoselas hasta el auto.
-Gracias Darren.
-De nada; y una cosa más.
-¿Qué?. Dijo exasperada.
-Me llamo Derek.
Ella sonrió y arrancó en su coche.
*Narra Holly*
¡Me había quedado dormida!, NO LO PODÍA CREER.
¡No puedes ser tan estúpida Holly!.
Arranqué el auto lo más rápido que pude y me fui directo a mi casa maldiciendo.
En el trayecto habré fumado unos 5 cigarrillos, uno detrás del otro.
Llegué y entré.
-¡Holly!. Dijo mi madre. -¿Te encuentras bien?.
No contesté.
-¡Holly!. Dijo nuevamente.
-¿QUÉ?.
-¿Otra vez Holly?, ¿tomaste tu medicación?.
-NO.
-¿Por qué?.
-Porque no.
-¡HOLLY!.
La ignoré.
-¿Dónde has estado?
Silencio.
-¡MICHAEL!. Gritó llamando a mi padre.
-¿Qué sucede?.
-Otra vez el mismo problema.
-Dios bendito... Dijo mi padre con tono de cansancio.
-¡Déjenme en paz!. Espeté.
-Holly, queremos ayudarte. ¿No ves como te pones cuando no tomas la medicación?.
-Dejen de tratarme como una loca.
-Holly, no estás loca. Tienes problemas de ansiedad, sólo es eso.
Me calmé un poco.
-Traeré un poco de agua. Dijo mi madre.
Yo me quedé en la sala con mi papá. Él me abrazó y apoyé mi cabeza en su pecho.
Poco a poco me calmé. Finalmente tomé la medicación.
*Narra Kyra*
Estaba tendida en mi cama pensando en Derek. Lo extrañaba.
¿Y si lo llamo?, no, puede estar durmiendo. ¿Y si le envío un mensaje?, no, es muy tarde. ¿Y si voy a su casa?, no, mi hermano no me dejará.
Mierda.
Decidí despejar mi mente y dormir. Mañana iríamos de día de campo con mi mamá y Sean. Ya son pocos los días que compartimos realmente en familia...
¡Capítuloooo 9!. Por ahora no están pasando cosas muy interesante, pero ya vendrá la acción. CHAN CHAN CHAAAAN. :D
Hoy: Hanna Harrison, la hermana menor de Holly.
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BITCH, he's mine
Teen Fiction3 jovencitas, 1 mismo objetivo. Lana West: rica, malcriada, orgullosa. Kyra Riley: humilde, sensible, amable. Holly Harrison: ciclotímica, efusiva, impulsiva. La amistad de estas jóvenes siempre tuvo altos y bajos por las diferentes personalidades d...