Pasado.

Capítulo 7

Xavier caminaba al lado de su peor pesadilla. La presidenta caminaba al centro y al frente, no se tomó ni un momento para mirarlo. Ella se movía tan rápido como él. El ambiente se tornaba pesado e incómodo. Llegaron a una habitación rodeada de estanterías y repletas de libros. Era un deleite para Xavier. Ella se sentó en una silla detras de un escritorio. Comenzó a buscar entre unas carpetas y luego entre unos libros.

-Puedes sentarte Xavier. -le ofreció la presidenta.

-¿Cómo sabe mi nombre? -le preguntó Xavier. Nunca antes se habia encontrado con ella, y ella sabía su nombre.

-Soy la presidenta, lo se todo. -dijo con un tono de autosuficiencia. Dejó de mirarli y se centró en lo que buscaba. Sacó una hoja de papek amarillenta y la leyó en voz alta. -Señora Presidenta Thin. Le hemos de informar por medio de esta carta, las perdidas del mes de Agosto. Por nombre, procedente y grupo le informamos lo siguiente: Will, Salma, edificio 21M5.
Colyn, Greta, edificio 341F0.
Faith, Dinna, edificio 219F1.
Zin, Wendy, edificio 658M1.
Xavier, Nima, edificio 532M4. -termino de hablar y miro a Xavier a los ojos. -Quiero contarte algo Xavier... -dijo la presidenta. Él asintió. -La única persona de esta lista que sigue con vida eres tú...

Xavier había conocido a Will. Su edificio quedaba cerca de los rieles, y se encontraron el mismo día en que se fugaron. Era un chico de su misma edad, como todos, tenía una gigante cabellera rubia que brillaba y unos alegres ojos miel. Suspiró por el recuerdo.

-¿Que sucedió con las casa de las vías del tren? -preguntó Xavier, tratando de no parecer interesado. No iba a preguntar por Ruth. Tragó saliva y se puso más nervioso.

-¿Quieres saber de tu amiga? -le preguntó alzando una ceja y con una sonrisa alargada. -Pues ella viene hacía acá. -dijo. -pero para cuando ella venga tú no estarás aquí.

-¿Me matará?

-Claro que no. Te necesito. -finalizó. Se levantó de su silla y presionó un botón que estaba pegado al escritorio. Segundos más tarde, aparecieron dos hombre pñen la puerta. Tomaron a Xavier por los hombros y lo arrastraron. Él estaba más confundido por el porqué de que la presidenta lo necesitara, que porque estaba siendo arrastrado por dos hombres más altos que él.

***

La presidenta miraba la cara de Ruth como si estuviera en una búsqueda. Hasta que Ruth agachó la cabeza.

-Sal de aquí Tom. -le ordenó la presidenta al moreno. Este se perdió en la puerta. Estuvieron en silencio durante un momento. -Así qué... ¿Cómo te llamas?

-Ruth... -murmuró.

-Vamos, levanta la cabeza. -le ánimo la presidenta. Ruth levantó la cabeza lentamente. -Mmmm... Eres muy bonita ¿no crees?

-No lo sé. -contestó Ruth. La presidenta sacó de uan gaveta un espejo con bordes dorados y con un nombre por detrás ~Sky~. Lo colocó enfrente de la cara de Ruth. Ella lo observó por un momento, su mente le dio un vistazo de la mujer de sus sueños. Era grande el parecido. Su cabellera negra era decorada con unos ojos verdes esmeralda, que palpitaban en medio de su pálida piel. Retiró el espejo sin decri alguna palabra.

-¿Para que me quiere? -preguntó Ruth.

-Eres impaciente. Pero está bien. A mi tampoco me agrada que las personas anden con rodeos. -cruzó los brazos. -Pero, necesito que entiendas algo. Voy a contarte algo. Creo que cambiará tu vida...