Con el paso del tiempo, Scarlett cada día demostraba lo valiente que era. Sus padres y tíos estaban muy orgullosos de ella. La niña era muy pura, amable y cariñosa. Además, a sus cinco años, demostraba tener una gran madurez. Por una parte, los enorgullecía, pero por otro, esa madurez sólo les servía de recordatorio de lo difícil que fue la vida de la pequeña. Durante ese tiempo, la pequeña se fue acostumbrando más a su nueva vida. Uno de los nuevos aspectos de su vida fue el colegio. Scarlett temía pasarlo mal de nuevo al igual que en el antiguo, pero nada más lejos de la realidad. Sus nuevos compañeros eran encantadores y su nueva profesora, muy amable. Siempre se comportaba cariñosamente con ella, la apoyaba y la ayudaba a mejorar. Como consecuencia, Scarlett dejó de reprimir su talento y en poco tiempo se convirtió en una de las alumnas más brillantes del colegio para orgullo y gozo de su familia. Otro cambio más fue tener nuevas amistades: Ron, Daphne y Blaise se convirtieron en grandes amigos, sin embargo, con el que más estrechó lazos fue Neville convirtiéndose ambos en mejores amigos. Su relación llegó a estrecharse tanto que el pequeño pidió a su abuela presentar Scarlett a sus padres. Ese día, Augusta y Alexander llevarían a Neville a visitar a sus padres.
Neville era feliz. No recuerda haber sentido tanta alegría y tranquilidad antes. La vuelta de sus padrinos cambió su vida. Cada semana, ellos le visitaban, incluso organizaban excursiones en las cuales Scarlett y él se lo pasaban muy bien. Para Neville, era agradable tener a personas que le querían y que se preocupaban por él. Adoraba pasar tiempo con su padrino quien le enseñaba fotos de su padre y le contaba anécdotas de su infancia, su madrina siempre le hacía postres muy ricos y le enseñaba a cuidar sus pequeñas flores, Scarlett le abrazaba y le dejaba jugar con sus juguetes, además siempre compartía con él sus chuches y chocolatinas, luego también estaba Sirius que le enseñaba bromas y Remus quien le leía libros.
- Buenos días, cariño. – Dijo Augusta con una sonrisa mientras entraba al cuarto de su nieto para ayudarlo.
Desde la vuelta de los Potter, la mujer experimentó un cambio de 180 grados. Se veía más sonriente, más feliz y esperanzada. ¿Cómo no estarlo? Hace unas semanas, Lily había retomado su trabajo en San Mungo. Inmediatamente, recuperó sus investigaciones sobre los efectos de la maldición torturadora. Las noticias no podían ser más prometedoras. Las primeras dosis del tratamiento ya fueron aplicadas y se puede observar una mejoría en ambos. Ese hecho hizo que a Augusta se le quitara un peso de encima. Dejó de ser aquella mujer estricta y dura y volvió a ser aquella cariñosa y amorosa madre/ abuela que fue antes de que la tragedia llegara a su casa.
- Buenos días, abuela – Respondió el niño con un abrazo que su abuela correspondió encantada ya que antes el niño no se atrevía a lanzarse a los brazos de su abuela. La mujer no podía evitar culparse por no haber sido más cercana a su precioso nieto antes.- Vamos a prepararte. Hoy iremos a visitar a tus papás. - Dijo emocionada.
- ¿Vendrá el tío Alex?
- Claro que sí, amor. Sabes que el tito está estudiando en la academia de aurores, pero ha pedido permiso y nos acompañará. – Respondió la mujer con una sonrisa correspondida por su nieto quien siempre se alegraba de la presencia de su tío.
Pasados unos minutos cuando la mujer ya terminaba de atar los cordones de los zapatos de Neville, este la llamó.
- Abuela…
- Dime, cariño.
- ¿Puede…puede Scarlett venir?
Augusta sonrió. La pequeña pelirroja a la que ella llamaba princesita se convirtió en un gran apoyo para Neville hasta el punto de que él le contara todo lo que sabe sobre sus papás.
- Cuando terminemos de desayunar, hablaré con tu tía Lily para ver qué opina.
Neville asintió y bajó al salón donde se encontró un riquísimo y saludable desayuno. Mientras se lavaba los dientes, Augusto contactó vía red Flú con Lily.
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Una nueva vida para Scarlett || Fem Harry
Fanfic~Universo Scarlett Potter~ El 31 de octubre de 1981, todo cambió para los magos que vivían en Gran Bretaña. Finalmente, aquel tenebroso mago que amenazaba sus vidas desapareció, por fin podrían vivir en paz sin miedo a nada. Felices, todos se prepar...