Capítulos únicos - Marlícia - Espanhol

lluvia de amor

Espero que les guste, estos capítulos únicos son ideas de mi guri, ellos mandan la trama y yo solo escribo... amo demasiado a mi familia de carretas ❤️

Aquella noche quedaría marcada en el pecho de Alicia, había visto salir al amor de su vida por las puertas grandes de su casa con lágrimas en los ojos y la cara triste, era doloroso pero necesitaba cumplir con su palabra y acabar de una vez por todas con esa relación que para ella era imposible de continuar. Al ver que las puertas se cerraban y el silencio se hacía presente el único sonido que se emitía era de dolor y llanto, le dolía, era como si le hubieran "arrancado la vida" en ese momento. Se dirigió a la parte de cristal de su casa y observó la noche que para colmo comenzó a llover, se abrazó a sí misma y respiró profundamente recordando los pequeños momentos que pasó con Martín, sus ojos se cerraron y fue como si sintiera su abrazo allí calentándola del frío que había en su alma, su mente se embarcó en ese hermoso viaje que era estar con él, abrió los ojos y miró a su alrededor, estaba vacía al igual que su corazón, yaya ya se había recogido, su madre se había ido, Miranda estaba en su habitación hablando por teléfono con Culebra y estaba enamorada, Gonzalo se había ido con Lorena y estaba enamorado, Yuri estaba hablando con alguien misterioso y sus ojos no negaban lo enamorada que estaba y Sergio estaba con su futura esposa "enamorado". ... ¿Y por qué no podía hacer ella lo mismo? ... ¿Por qué negar esta pasión que se inflama en su pecho, por qué prestar atención a lo que dicen los demás? Se merecía ser feliz.

- ¿Qué he hecho?" Alicia se llevó la mano a la frente, arrepintiéndose de la decisión que había tomado y cogiendo su bolso, sin mirar atrás salió de su casa sin importarle nada ni nadie y mucho menos con la lluvia.

***
Cuando Alicia fue a reunirse con Martín se encontró en el bar que siempre frecuentaba para tomar algo y tratar de aliviar el dolor que sentía.

- No voy a renunciar a ti Alicia, no lo haré - El hombre se lo repitió varias veces mientras se limpiaba las lágrimas que insistían en rodar por su rostro - Te quiero Alicia, te quiero .
Una copa de Martini sería suficiente para esa noche mientras su mente sólo podía concentrarse en Alicia.

[...]

Alicia llegó frente a la casa de Martín y estacionó su auto, sin importarle la lluvia salió bañada por el agua que caía del cielo, al llegar a la puerta de Martín tocó pero no obtuvo respuesta.

- Martín, por favor, abre la puerta - insistió Alicia y pensó que él no quería verla.
Después de muchos golpes, miró a la calle y se dio cuenta de que su coche no estaba allí, por lo que volvió a su coche a esperarlo. Los minutos pasaban y Alicia llamaba a Martín pero él no llamaba, y su única compañía era la paciencia...
Después de casi una hora y con la cabeza apoyada en el volante Alicia escuchó el ruido de un coche y levantó la vista viendo que era el coche de Martín, éste se marchó intentando no mojarse y ni siquiera se dio cuenta de que era el coche de Alicia el que estaba allí, el corazón de la mujer se aceleró y sin pensárselo dos veces se bajó del coche con la lluvia aún cayendo sin dar tregua, le llamó y rápidamente él se giró reconociendo aquella dulce voz.

- ¿Alicia? - Martin la vio de pie sin importarle la lluvia y volvió a colocarse a su lado - ¿Qué ha pasado? Vamos a entrar.

- Te quiero - declaró Alicia, haciendo que Martín abriera una amplia sonrisa - Quiero quedarme contigo, no quiero que me importe nada que pueda separarnos, siento esta inseguridad, te quiero Martín.

Martín se emocionó con esa simple declaración y se acercó a ella abrazándola, y en medio de la lluvia se besaron sellando ese momento único, al separar el beso juntaron sus frentes y sonrieron

- Creo que es mejor que entremos, nos vamos a resfriar - sugirió Martin ...

[...]

Dentro de la casa Martín condujo a Alicia al piso de arriba para que se diera un baño caliente, ella se quitó la blusa fría y Martín se quitó la camisa para deshacerse de esa prenda mojada, ambos se miraron, la mujer llevaba una fina blusa blanca que al mojarse dejaba ver que su ropa interior era roja, Alicia tampoco podía apartar la mirada del cuerpo de Martín que estaba mojado dando un aire muy sensual. Cuando sus miradas se encontraron Alicia se avergonzó y se pasó la mano por la nuca nerviosa con la situación, Martín vio como ella estaba desconcertada y como su mirada estaba puesta en él y se acercó haciendo que ella se quedara sin aliento, los cuerpos chocaron y uno frente al otro se besaron con ansiedad, sus lenguas no tardaron en encontrarse haciendo que aquel baile fuera el mejor de todos, pero Martín pensó que besarla en esa situación sería demasiado precipitado y no quería hacerle daño.