Cuando Te Vuelva A Ver (En Curso)

🍂 Capítulo 24🍂

Veo el reloj de mi mesa y marcan las 6:03 de la mañana, llevo hora y media mirando a Tatiana dormir, lleva una de mis franelas puesta y unas medias también, nunca he entendido porque le gusta dormir con ellas puestas. Detallo su rostro que está medio cubierto con sus cabellos, lo retiro cuidadosamente para detallar ese lunar que tiene en el pómulo, justo debajo de su ojo derecho, es hermosa hasta dormida, detallo todo de su rostro, sus labios, sus cejas y pestañas, es increíble lo que siempre me ha hecho sentir esta pequeña saltamontes. Cómo podré estar lejos sin mirar está carita a diario, sin escuchar su risa y sentir esa mirada curiosa queriendo saberlo todo.

Sin hacer ruido saco mi diario, ese, en el que hace semanas no escribo y plasmo los últimos acontecimientos junto a ella, los anteriores, esta noche y me adelanto a escribir mis temores por la universidad, sobre la distancia y nuestra relación, se me escapa una lágrima que limpio rápidamente cuando la escucho hablar

— ¿Qué haces? — pregunta somnolienta

— ¡Hola, buenos días! — susurro con cariño besando su frente — solo anoto unas cosas — dejo el diario sobre la mesa para mirarla

— ¿Porqué no estás durmiendo?, ¿Que hora es? — se sienta a mi lado

— 6:30, ¿seguirás durmiendo aquí o te irás a casa?

— Ummm, no quiero irme — se queja recostandose de mi hombro

— Entonces sigamos durmiendo otro rato — la estoy abrazando para volver a dormir cuando mi celular suena — ¿Hola?, Ya bajo

— ¿Quien era? — pregunta extrañada

— Theresa, creo que está borracha y no puede abrir la puerta — me pongo un pantalón de pijama y salgo dejándola acostada nuevamente

Al llegar a la puerta oigo risas y murmullos, no distingo quienes son así que abro con cautela, ni hermana está en el piso hablándole a su celular cosas poco claras de entender,  llora y maldice con frustración. Llego a su lado y efectivamente está ebria, con su maquillaje corrido y roja de tanto llorar

— Me dejó — sorbe por la nariz y pone su mano en el pecho como si algo le doliera — Antho… anthony me dejó, me dijo que se cansó de las peleas. Peeeero yo no peleo, yo solo lo extraño

Ver a mi hermana en ese estado quiebra mi alma y toca una fibra delicada en mi, quiero protegerla y evitar que sienta cualquier tipo de dolor, la ayudo a levantarse, la abrazo fuerte mientras acaricio su cabello

— Shuuuuu nena, todo va a estar bien — la ayudo a caminar dentro de la casa, pero sus pies se arrastran, la cargo y la llevo escaleras arriba, entro a su habitación y la acuesto sobre su cama

— La distancia es una mierda Theo — arrastra las palabras al hablar y a pesar de lo que sucede es muy graciosa

— Ya lo veo hermanita. Tal vez solo sea una discusión más y, ahora o mañana vuelvan a hablaras

— NO, NO… — grita furiosa — yo también me cansé de sentirme insegura, de no dormir imaginando cosas, de esperar llamadas y mensajes que no llegan, ya no quiero seguir siendo infeliz Theo, ya no más — su voz está rota de dolor y no se que hacer para consolarla

— ¿Te parece un baño de agua caliente y galletas con helado? — me mira con los ojos inundados en lágrimas, sonriendo con tristeza

— Oreo por favor

Le dejo en la ducha mientras busco su ropa dejándola en su cama

— ¿Estás bien? — pregunto tocando a su puerta

— Si, en un momento salgo

Salgo directo a la cocina a buscar un pote de helado y las galletas oreo, unas tazas y cucharillas para dos, al subir me asomo a mi habitación y Tatiana no está en la cama, entro a buscarla pero no sé encuentra en la habitación, en la cama hay una nota que dice:
" Nosotros para siempre, te amo"

Miro hacia la ventana por inercia aunque está cerrada, dejo la nota sobre la mesa de noche y noto que mi diario sigue alli <<Mierda, que no lo haya abierto>>. Regreso con Theresa que ya está vestida metida en su cama en posición fetal

— ¿Estás dormida?

— Pensé que no vendrías — levanta su cabeza para mirarme

— Jamás te dejaría sola. Comeremos helado con galletas y veremos una de esas películas que tantonte gustan

— Espero que tú y Tatiana manejen mejor esto de la distancia, yo fracasé — dice comiendo una gran cucharada de helado

— Eso espero yo también — lo digo con clara duda

Mi hermana solo come unas tres cucharadas de helado y se queda dormida abrazada a mi, mientras yo acaricio su cabello. Pienso en lo que ha pasado y vuelven los temores, voy a mi habitación por mi celular y no hay ni un mensaje de Tatiana, así que le envío uno

Para: Mi novia Carrie Piraña 8:18 AM
Tu y yo para siempre novia ¡PARA SIEMPRE! Te amo Tatiana Carson

Su mensaje me llega en pocos segundos

8:19 AM
¡TE AMARÉ SIEMPRE THEODORO EVANS!

Sonrío como un tonto al leer su mensaje, se que podré con ésto, podremos con todo, le propondré una vez más que vaya conmigo a Alemania.

Una semana después….

—¿De verdad nadie me va a pasar un espejo? — Andrew está histérico queriendo mirar cómo quedó su rostro

— Estás igual de guapo, incluso me atrevo a decir que más que antes — mi novia trata de tranquilizarlo pero parece no funcionar

— Hermano por favor, tienes que calmarte un poco…

— NO, NO QUIERO — se cruza de brazos con molestia

Una enfermera le acerca un espejo para que se calme y deje ya el ataque de rabia que tiene porque no le hace nada bien. Le arranca el espejo con premura mirándose y chilla con horror

— Mi rostro tiene cicatrices, estoy marcado —  comienza a llorar

— Las puntadas pronto terminaran de cicatrizar y las marcas será casi invisibles — le habla la enfermera pero el solo se mira al espejo tocando las marcas que tiene cerca de su ojo, en su labio superior y en el pómulo  

— Mira mi labio Lisa, nadie querrá besarme ahora — expresa con dramatismo

— Sigues siendo atractivo y se que muchos seguirán queriendo besarte — le contesta Tatiana con dulzuraz quien lo toma de la cara y lo besa en los labios sorprendiendolo

Yo sonrío ante la táctica de mi novia y la reacción de mi mejor amigo, se queda perplejo y me mira con miedo

— Creeme hasta yo pensé en besarte para que dejaras el ataque de histeria — le comento riendo

— Fuchi no, eso sería como cometer incesto o algo así — pone una nueva de desagrado

Me acerco rápidamente lo tomo del rostro y beso cada cicatriz incluyendo la de su labio, dejando a todos una vez más sorprendidos

— Eres increíble, maravilloso, bondadoso y muy guapo. Quien te quiera lo hará sin importar como se vea tu rostro después de sobrevivir a un ataque violento o al despertar en las mañanas — sus ojos se cristalizan y asiente sonriendo — es más importante tu belleza interior, tu inteligencia y la madurez con la que afrontes está nueva vida que tendrás ahora. Te amo hermano — nos damos un abrazo fraternal que aviva el alma

— Gracias de verdad por soportarme y hacerme poner los pies en la tierra nuevamente. Estoy vivo y eso es lo importante

Nota:

Allí está Theo sin poder dormir de tanto pensar...

¿Y quién no ha pasado noches en vela, pensando en algo que nos atormenta?

Pobre Theresa tiene un guayabo que ni el alcohol ni el helado se los quitan