Soledad en Silencio [Chishiya Shuntaro]

5 - Se acostumbró a ello

Miraba una hoja que había conseguido por ahí, la que tomó sin que nadie lo notara. Todavía tenía un día más para evitar los juegos, así que no era necesario ir a uno. Con el lápiz en la mano, se le ocurrió escribir su propio nombre, trazando línea por línea esa palabra con un significado vacío.

"Aleen Rimmer"

— ¿Es tu nombre?

Volteo la mirada para encontrarse con ese chico a quien sigue en todas partes desde que la ayudó. Curioso observando la hoja, esperando respuesta de ella. Y efectivamente, asintio confirmando la pregunta ya dicha. Admitía que le agradó esa sonrisa de parte de él.

— Al fin se como te llamas. —Dijo para después mirar sobre su hombro—. Se llama Aleen Rimmer, ¿qué te parece Kuina?

La nombrada se acercó con una sonrisa sincera y se cruzó de brazos, aún con el falso cigarrillo en la boca.

— Es un bonito nombre, Aleen. Creo que es un nombre de origen holandés si no me equivoco, pero el significado no lo recuerdo... —Murmuro pensativa.

Ésta quedó viéndolos en silencio, esperando a que terminen de hablar entre ellos. Bueno, eso creyó pero la azabache se despidió por un rato y los dejo solos, por un lado no pudo evitar quejarse a sus adentros, pues quería soledad. Unos momentos al menos.

El rubio tomó asiento a su lado para mirarla curioso, con esa sonrisa que hace casi todo el tiempo.

— En verdad... ¿no me entiendes?

Esta vez obtuvo otra mirada, era una de curiosidad, pero el seguía creyendo que algo ocultaba.

— Juguemos un juego. —Dijo sacando los dos puños de su bolsillo frente a ella, para luego extenderlos—. Uno tiene un regalo, el otro una llave. En la izquierda tienes la llave, pero no sabrás lo que abré.

Ahí era obvio que tenía trampa. La castaña mostró confusión por lo último dicho en japonés, pero claro, él intentaba descifrar si era por su idioma o por la llave.

— Bien, elige.

Ella miraba atentamente las manos, pensando en cuál tomar, sabía que tenía algún truco. Señaló con su dedo índice una y luego cambio de dirección al otro puño, estaba indecisa.
De la frustración frunció el ceño, ganándose una sonrisa de parte del joven.

<Tierna pero sospechosa>

No se iba a dejar engañar, aunque admitía que le divertía molestarla así y más cuando ahora es obediente.

Finalmente acercó su mano a la derecha, con lentitud y dudas pero parecía querer elegir esa. Él analizaba cada movimiento o expresión.

Hasta que unos pasos llamo su atención, provocando que dirijan la mirada hacia ese lado. No era nada más y nada menos que ese hombre con tatuajes. La castaña tomó el bate de reflejo y mostró miedo en su expresión, poniéndose de pie seguida por su compañero.
El de calva solo observo intentando intimidar a ambos, aunque no lo logró con el rubio, éste solo sonrió y le enseñó los dos puños a la joven.

— Elije rápido y nos iremos.

Y eligió izquierda sin pensarlo, mirando de reojo al de atrás.

Tomo su mano y le puso la pequeña llave en ella, sin que el de atrás pueda verlos, pero sospechaba mucho y eso era malo. No paso desapercibido por Chishiya, quien lo miro después de que la otra haya guardado su llave y sonrio.

— ¿Qué? ¿No podía hablar con mi novia un rato?

Entrecerro los ojos para despues irse, ignorando sus sospechas, ya pensaba que esos dos tenían algo, están juntos todo el tiempo.

Después de quedar solos, él la miro para analizar sus signos faciales, la cual solo mostraba alivio al ver que ese pelón se marchó. Luego saco la llave y lo miro confusa esperando una explicación.

— Ya lo sabrás en su momento, mientras tanto mantenlo guardado y que nadie lo vea, ¿si?

Asintio y ambos decidieron irse del lugar para evitar levantar sospechas nuevamente.

Ella aún pensaba en la llave que oculto, ¿qué abré exactamente?, claro que no iba a ir puerta por puerta para intentar abrirla, sería extraño y causaría problemas. Lo mejor era esperar al momento de saberlo, mientras tanto seguiría el juego de Chishiya.

Quería ese ponerle nombre a la protagonista por el significado.

Gracias por su apoyo, estoy agradecida