Meeting the family

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Fred Weasley x Female Reader

Estabas nerviosa. Estabas muy nerviosa. Cuando Fred te pidió que vinieras a casa con él durante parte del verano y que conocieras al resto de su familia, no te lo habías pensado dos veces antes de decir que sí. Pero ahora, mientras estás sentada en el expreso de Hogwarts, desearías haber pensado en la cantidad de estrés que esto te está provocando.

Por supuesto, sabías que tus nervios eran innecesarios, la forma en que Fred hablaba de su familia siempre te había alegrado el corazón. No había necesidad de estar tan ansiosa por conocer a los padres de Fred o a sus hermanos mayores, Fred te quería y te aseguró que su familia también lo haría.

"Deja de inquietarte, amor, todo va a estar bien" te dijo Fred riendo entre dientes. Acercándote a él para que tu cabeza se apoyara en su hombro y no en la ventana del tren.

"Lo sé. No sé por qué estoy tan nerviosa" suspiraste, depositando un beso al azar en el hombro de Fred.

Fred volvió a sonreírte cariñosamente acercándote aún más para que tu cabeza quedara acurrucada en el pliegue de su cuello. Fred te dio un beso en la parte superior de la cabeza, contento de que su hermano y Lee no estuvieran allí para burlarse de ustedes. Especialmente en tu estado de nerviosismo. "Todo va a salir bien, cariño. Te van a adorar"

Tus nervios se calmaron ligeramente cuando te encontraste con Arthur Weasley en la estación de tren. El hombre te recibió con los brazos abiertos después de saludar a sus hijos. "Vaya, tú debes ser la chica de la que siempre habla Fred. Tienes al alborotador envuelto en tu dedo, así es. ¿Por casualidad conoces el uso correcto de un pato de goma?" No pudo evitar reírse ante la extraña pregunta. "Son juguetes para niños muy pequeños" soltaste una risita, sintiéndote mucho más a gusto, aunque todavía nerviosa por conocer al resto de la familia de Fred.

"Oh, Merlín" no pudiste evitar murmurar al llegar a la madriguera. La altísima casa te dejó sin aliento. Aunque el lugar era viejo y los materiales de construcción estaban mezclados en algunos lugares y los bordes eran desiguales y parcheados en otros, pensaste que el lugar era hermoso. Y lo que le faltaba para demostrar su valor lo compensaba con su carácter.

"Sé que no es mucho" murmuró Fred a tu lado, frotándose la nuca. Sabía que no te importaba cuánto dinero tenía su familia, sobre todo porque los dos estaban a punto de graduarse el año que viene, y de empezar sus propias vidas, pero la ligera inseguridad que suponía crecer en la pobreza siempre conseguía hacerse notar.

"Fred, es increíble" le tranquilizaste, "cómo se las arreglaron para tener la casa tan alta" Fred dejó escapar una risita aliviada, murmurando un "no lo sé" mientras los dos seguían finalmente al resto de la familia al interior.

"____ podemos adelantarnos y poner tu baúl en mi habitación" sugirió Ginny mientras se movía para ayudarte a mover tu equipaje. Cuando terminaste, optaste por ayudarla a mover su baúl también antes de dirigirte a la pequeña sala de estar y sentarte en una silla frente al sofá donde estaban sentados Fred y George.

"Papá ha dicho que mamá ha ido al pueblo a comprar algunas cosas para la cena, Charlie no llegará hasta dentro de un par de horas y Bill sigue en el trabajo" te informó George. Asentiste como respuesta mientras los chicos empezaban a jugar una intensa partida de ajedrez de magos. Cogiste un libro de tu mochila, decidiendo pasar el tiempo con la lectura. Eso fue hasta una hora más tarde, cuando tus nervios volvieron con fuerza.

No podías evitar tu carácter inquieto, sabías que Molly Weasley regresaría en cualquier momento seguida del resto de los hermanos de Fred. Sabías que Molly Weasley era una mujer muy cariñosa y Fred te había asegurado una y otra vez que te querría absolutamente. Sin embargo, aquí estabas sentada en medio de la casa de los Weasley sintiéndote como si estuvieras a punto de hacer un examen de venenos. Estabas emocionada por conocer a la familia de Fred, y te preguntabas si tu necesidad de su aprobación era la causa de tus incesantes nervios.

"¿____? Estás bien" saltaste al oír la voz de Fred, sobresaltándote de tu neblina nerviosa.

"Sí, sí, estoy bien" respondiste, forzando una sonrisa de labios apretados. Fred frunció las cejas al oír tu respuesta y te miró con simpatía.

Fred sabía que tus nervios te estaban matando, y eso le sorprendía más que nada. Estaba muy emocionado por presentar a su familia a la chica con la que quería pasar el resto de su vida, pero ahora pensaba que podía ser demasiado para ti. "Amor, ven a sentarte conmigo" sonrió Fred suavemente, moviendo el tablero de ajedrez de Mago fuera del sofá y apartándose un poco para que tuvieras espacio para sentarte al otro lado de él. Luego se inclinó hacia George susurrando algo y señalando hacia la cocina. George hizo un pequeño gesto con la cabeza a Fred, enviando una mirada hacia ti antes de asentir de nuevo y dirigirse a la cocina.

Te levantaste de la silla y dejaste el libro en la mesa de centro mientras te dirigías a sentarte con Fred. Cuando te sentaste, Fred te rodeó inmediatamente con su brazo, acercándote y dándote un beso en la frente.

"Lo siento, Freddie, sé que no tengo ninguna razón para estar nerviosa, sólo estoy emocionada y realmente quiero gustarles a todos. No quiero preocuparte" Murmuraste en el pecho de Fred.

"Amor, no tienes que disculparte. Todo va a estar bien. Te quiero, y si no estás preparada para esto no pasa nada" Fred respondió, apartándose para encontrarse con sus ojos.

"No. Estoy preparada. ¿Me tomarás de la mano todo el tiempo?" Te ríes entre dientes.

Fred te dedica una amplia sonrisa, "¿soy el único que piensa que esa petición suena familiar?" Tus mejillas se sonrojan al oír eso, y lo único que querías era borrar esa mirada de suficiencia de la cara de Fred, pero tu vergüenza te paralizaba.

"¡Fred!" La sonrisa del chico no hizo más que crecer, llevándote a esconder la cara entre las manos.

"Vamos, amor, sólo estoy bromeando. Por supuesto que te llevaré de la mano" La mirada engreída de Fred se había esfumado mientras te aseguraba. El pelirrojo enlazó tus dedos con los suyos, acercando tu mano a su boca y depositando un beso en el dorso de tu mano.

Cuando Molly llegó a casa te saludó como si fueras suya. Te dio un gran abrazo en cuanto Fred te presentó. Y todas tus preocupaciones se desvanecieron cuando ella comenzó a hablar de lo mucho que Fred te había mencionado, regalándote cálidas sonrisas todo el tiempo.

Bill y Charlie te recibieron con el mismo entusiasmo cuando llegaron, Bill dijo que eras encantadora y que se alegraba de que estuvieras allí. Charlie te abrazó de forma muy parecida a como lo había hecho Molly, diciendo entre dientes "¿cuándo es la boda?" Sólo para burlarse de ti y de Fred. Como era de esperar la cara de ambos se puso roja.

Fred se alegró mucho de verte interactuar con su familia, su corazón se calentó cuando todos actuaron como si siempre hubieras estado allí. Se dio cuenta de que tus nervios habían desaparecido por completo y de que te habías adaptado rápidamente a la abarrotada casa. Y mientras estaba allí sosteniendo tu mano. Supo que esa era la chica con la que se iba a casar.


Historia de anxioussweasley

Fred & George Weasley One ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora