Draken Y ___

21. Casarme Contigo

Moisés

Ponen a Méndez frente a mí y él parece aterrado, trueno mis dedos.

Moisés: Tenías un solo maldito trabajo...

Méndez: Te juro que yo...

Moisés: ¡Son unos niños! Eres veinte años mayor que ellos, ¿Cómo mierda pudieron hacerte lo que quisieron?

Méndez: Hablé con ellos, como pediste... Pero no respetaron el plan y... ¡No, por favor, no!

Rozo la punta del arma en su cabeza, él comienza a temblar, sonrio al ver esa reacción en él.

Moisés: No me vas a volver a joder otros planes, pedazo de imbécil.

Miro de reojo como mi socio se acerca a nosotros y me hace bajar el arma, él mira a Méndez.

Padre: Déjalo vivir... Esa zorra aún no sabe que este cabrón es alidado tuyo y es más fácil acercase a ella.

Moisés: Como sea...

Trueno los dedos, tres hombres entran a la habitación y se llevan a Méndez.

Moisés: Una buena chinga no le viene mal.

Padre: ¿Qué sigue?

Moisés: No te alteres... Aunque no puedo acercarme a ella por Mikey, debe de haber otra forma.

Padre: Hazte su amigo.

Suelto una carcajada, él sonríe sentándose mientras que yo camino a la puerta.

Moisés: Me largo, asegúrate de no hacer ninguna pendejada.

Salgo de la oficina, la chica que se encarga de cubrirme me hace una reverencia y me sigue hasta el coche.

Moisés: Vamos a comer algo.

Chica: Cómo usted diga.

Comienza a conducir, pongo mi vista en el camino de simpre.

Trabajar, matar, golpear, comer, beber y dormir.

Así una y otra vez durante años, reconozco que es lo que quería desde hace mucho pero ahora que lo tengo es tan estúpido.

Antes cuando veía a pandillas pensaba que eran geniales y que yo quería una para poder ser el jefe.

Ahora que lo soy es hasta aburrido, la policía japonesa es más dura pero igualmente he logrado mantenerla al margen así que es un obstáculo menos.

Las demás pandillas tratan de no acercarse mucho.

Las personas me respetan.

El dinero me sobra.

Sin embargo todo sigue como antes de tener estas mierdas, nada pero absolutamente nada ha cambiado.

Sigo mirando a ___ desde lejos, ella es tan despreocupada como de costumbre y sin querer consigue todas las cosas que yo tengo pero tuve que sacrificar otras.

Sigo siendo su maldita sombra la cual trata de llevarla a la mierda solo por envidia a su felicidad.

Una jodida felicidad que traté de conseguir pero acabé ensuciando mis manos cada vez más hasta el punto de casi matarla.