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Mañana, mañana es mi cumpleaños y no puedo estar más feliz. Me levanto con buen pie y una sonrisa, abro ni armario y todo se siente diferente. Como vísperas de Navidad, me siento muy feliz.

-Oh, t/n, hoy te veo muy feliz -dice mi madre mientras me ve bajando las escaleras.

-Sí, mañana es mi cumpleaños y estoy muy emocionada y un poco nerviosa -digo y suelto una leve risa.

-Entiendo, bueno, hoy debes ir a la escuela, mañana te dejaré que no vayas, ¿si? -dice y salto a sus brazos, dándole un fuerte abrazo, la escuela es insoportable y me gusta no tener que ir.

-Gracias mamá.

(...)

Llego a la escuela y me siento en mi pupitre. Las clases van pasando hasta que se escucha barullo en los pasillos.

-Joven, usted no puede pasar.

-Callate viejo y dejame pasar.

Oh vaya, esa voz la conozco muy bien.

Rápidamente, recojo mis cosas y salgo de clase, excusandome con el profesor y los alumnos me miraban curiosos.

-Señor director, ya nos ibamos, dejelo estar, lo lamento de su parte -digo, mirando al chico responsable y hago una leve reverencia.

-Lo dejaré pasar porque eres una estudiante que llegó hace poco, pero ya no más.

-Claro, gracias -digo sonriente, al ver que se va, agarro la mano de este y salimos fuera sin decir nada.

-¿Pero que te pasa mujer? -dice Ran, mirando su mano.

-Nada, solo que has llegado y has liado un escándalo en el pasillo y encima, con el director. ¿Es que siempre das el cante? -pregunto masajeandome el entrecejo.

-No es eso... Solo que quería verte.

-¿Por que? -pregunto curiosa.

-Porque nos vamos a ir a un sitio -mis ojos brillan en ese instante y el sonrie.

-¿A donde? ¿Al cine? ¿Un picnic? -voy diciendo cosas aleatorias hasta que el me calla, colocando su mano en mi boca.

-Shh... Iremos a una feria -me dice y me pasa el casco de la moto, que es suyo.

-¿Tienes casco? No sabía eso -digo, pero aún así me lo pongo.

-Solo que no lo uso, es todo.

Al colocarlo, me subo a la moto y paso mis brazos por su cintura. Creo, que si que invitaré a Ran, es... mi amigo.

(...)

Al llegar a la feria, fui corriendo a una montaña rusa de la zona. No es muy grande como un parque de atracciones, pero tiene buena pinta.

-Oye, ¿deberia montarme? -pregunto, mirando curiosa la atracción.

-¿En mi? Claro -dice y me sonrojo al instante, mirando a otro lado.

-Idiota... No digas esas cosas aquí, hay niños ¿sabes? -le digo pero siento que agarra mi muñeca y me lleva con el a la atracción.

-Sí, deberías.

Al bajar, mis pelos están despeinados y su pelo se ha soltado, sin trenzas.

-Trencitas... -digo y toco su pelo, bajo su atenta mirada- Tus trenzas...

-Le dije a mi hermano que las apretara, el muy idiota -chasquea su lengua y eso me gusta.

-Bueno, sigues guapo de todas formas -digo sin pensarlo mucho pero me arrepiento al instante. No puedo hacerle esto a Rindou, el me gusta y yo a el, pero Ran tampoco se queda atrás.

-Tu también eres sexy -dice sacandome de mis pensamientos mientras se dirije a la cabina de algodón de azúcar.

-Idiota... Eso no fue lo que dije -digo nerviosa y sonrojada mientras lo sigo, con una sonrisa.

¿A Quién Debo Elejir? -Ran y Rindou Haitani-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora