JANE-
Casi muero de la risa con el nombre con el que guardó su contacto enseguida lo cambié a ¨Estúpido Engreído¨, en serio cree que me tocaría mirando su foto, pues si tenía toda la razón, desde el primer momento que vi la vi sentí un cosquilleo en mi sexo, por qué no podía ser como todos y tener una foto casual, pues no, la de él era sexy muy sexy con el torso descubierto enseñando lo bien trabajado que estaban sus pectorales y biceps, su abdomen tonificado, su pelo negro cayendo por los lados de forma desorganizada, pude ver algunos de sus tatuajes, uno en especial llamó mi atención tenía escrito un nombre en el lado izquierdo de su pecho ¨Judith¨, quién sería la afortunada de ocupar ese lugar, seguramente alguna ex tóxica, pensé; vaya si que estaba bueno el trigueño, con esa imagen y evocando los recuerdos que había recuperado de mi mano sobre su polla llegué al orgasmo, luego de eso dormí plácidamente.
Al otro día desperté con la notificación de un nuevo mensaje, solo leer que era de Estúpido Engreído me sacó una sonrisa ¨Bonita espero que hayas disfrutado tu orgasmo mirando mi foto¨, -imbécil- dije para mí poniendo los ojos en blanco, si lo había disfrutado pero eso era algo que nunca admitiría ante él, este chico se tenía lo de galán conquistador muy creído, por lo que me propuse buscar la forma de bajarle esos aires de grandeza, primero me acercaría a él hasta conseguir averiguar lo que pasó esa noche en el hotel y ya en el camino encontraría una forma de herir su ego, si es que no caía yo en sus redes primero.
A pesar de ser virgen conocía mi cuerpo y sabía lo que me gustaba, podía darme placer yo misma, por lo que no había tenido apuro con las relaciones sexuales hasta que no encontrara un chico del que estuviera enamorada, tal vez era una tontería pero esa era mi forma de pensar, después de leer tantas novelas románticas, esperaba que uno de sus protagonistas llegara a mi vida y tener mi propio final de fueron felices y comieron perdices. El ruido del despertador me sacó de mis pensamientos haciéndome levantar de la cama, ni siquiera le respondí el mensaje a Alex, fui hacia el baño, me puse mi uniforme y recogí mi pelo en una trenza, maquillé un poco mi rostro y guardé la ropa deportiva que usaría para la audición de las porristas.
Al bajar mis padres ya estaban desayunando y me recibieron con una sonrisa,
–Hija hoy no llegues muy tarde, vendrán a cenar a la casa el gobernador de la ciudad, su esposa e hijo, necesito de su aprobación para unos negocios, así que las quiero más radiantes y carismáticas que nunca- nos dijo mi padre, eso era algo raro papá no acostumbraba a traer los negocios a la casa y menos para cenar, una cena familiar era algo que solo hacíamos con mis tíos y sus respectivas familias, no dije nada al respecto solo asentí y comencé con mi desayuno.Al salir de casa pasé a recoger a Lily, al montarse en el auto me preguntó que me traía con el trigueño de la cafetería, a lo que solo le respondí que era mi compañero de clases y que teníamos que hacer equipo juntos, me contó de cómo él le había coqueteado la noche antes y eso me incomodó un poco.
Nos dirigimos hacia nuestros salones, al llegar al mío Alex estaba en la puerta, me tomó del brazo para apartarnos un poco de la entrada y me dijo
Me encanta como te ves hoy bonita, si solo con los orgasmos que te causa mi foto amaneces así ya quisiera ver tu cara si recordaras lo que sucedió en aquella habitación.
Lamento decirte que tu foto no me causa nada, y para tu mala suerte no recuerdo lo que sucedió en esa habitación, y si no me acuerdo no pasó, así que bájale dos rayitas a tu ego- y le di la espalda entrando al salón, a los pocos segundos se sentó a mi lado, de tantos puestos tenía que estar ahí, eso ya lo hacía para molestarme, la clase comenzó, sinceramente no estaba prestando mucha atención el olor de su colonia me tenía embobada, además de que estaba entretenida espiando a Alex que estaba con su móvil en un perfil de Instagram con fotos de unos paisajes, cuando se dio cuenta de que lo miraba se acercó a mi oído, y en un susurro dijo – Te gustan las fotos que hago?- a lo que levemente asentí con un movimiento de cabeza, las fotos eran increíbles, si no me lo decía no me pasaría por la mente que él las había tomado.
– Si, me gustan, se te da mejor como fotógrafo que como modelo- a lo que respondió con una pícara sonrisa- Y cómo crees que te verías tú siendo mi modelo mientras estas desnuda envuelta en mis sábanas?- Sentí cómo el calor tomó mi cara en ese momento y también llegó hasta otros lugares.
- Alex y Jane, algo que compartir con la clase?- Dijo la profesora en forma de regaño, y ambos negamos en silencio, al rato siento una vibración en mi celular, cuando reviso era un mensaje de Alex “Ya tienes algo nuevo con que fantasear esta noche, tu desnuda tocándote mientras yo capto cada detalle con mi cámara” un leve cosquilleo invadió mi cuerpo pero no podía dejar que el notara mi reacción, solo guardé el móvil haciéndome la desentendida, por suerte sonó el timbre del almuerzo y no tuve que ver su cara de sexy trigueño conquistador.
Me reuní con Lily y Jake en la cafetería, este estaba muy entusiasmado hablando sin parar sobre un concierto que daría con su banda por el inicio de clase que no nos podíamos perder por nada del mundo, mientras almorzaba sentía que me observaban, cuando levanté la vista vi que provenía de la mesa que estaba próxima a la nuestra, mis ojos hicieron contacto con unos azules que me miraban curiosos, eran los ojos de mi crush, el capitán del equipo de básquet, un rubio alto de cuerpo fornido, que tenía un pequeño aro que brillaba en su labio inferior, a su alrededor se encontraban varios chicos con ropa deportiva, le sonreí con timidez, gesto al cual respondió con un guiño en forma de saludo,,, Wowww paren el mundo que había sido eso, después de semanas viéndolo en la cafetería hoy intercambiamos gestos como saludo. Tenía un pequeño conflicto mental últimamente Alex era quien ocupaba la mayor parte de mis pensamientos, entonces él era mi nuevo crush o lo seguía siendo el rubio. De repente se pone de pie y comienza a caminar hacia nuestra mesa, al verlo de cerca y la reacción de mi entrepierna confirmo que él conservaba el título de ¨MY CRUSH¨Hola, chicas ahora con los entrenamientos no podré pasar mucho por la cafetería, así que no me extrañen mucho por allá- dijo mostrando una hermosa sonrisa. – Nos vemos pronto Jane- <Oh dios my> ese chico se sabía mi nombre, me estaba hablando, y ahora que se supone que tenía que hacer.
Jake carraspeó un poco incómodo, y David lo tomó como señal para irse. En ese momento sonó el timbre que anunciaba que debíamos volver a clases, le estaba tomando cierto cariño a ese timbre, siempre me salvaba de situaciones en las que no sabía cómo actuar.
Al llegar todos estaban sentados con su compañero de equipo, por lo que no me quedó más remedio que ubicarme junto a mi estúpido y engreído compañero, la profesora de Historia del Arte recogió los folios con lo que había orientado, pero dijo que haría una evaluación sorpresa eligiendo algunas parejas al azar para que defendieran su trabajo ante todos, eso me puso un poco nerviosa, a pesar de que lo había leído y analizado el trabajo lo hizo él por si solo, la profesora notó mi incomodidad y nos eligió como primera pareja <Rayos>
Al llegar al frente Alex dijo cerca de mi oído: - Bonita empieza hablando tú, de lo que recuerdes o lo que quieras, yo me encargaré de reafirmar y argumentar todo lo que digas- Asentí y me alegré de que al menos esa vez no se comportara como un imbécil.
Con voz temblorosa comencé a exponer sobre algunas de las cuestiones que le había comentado a Alex en el audio la noche anterior, cuando ya no sabía que más decir miré a mi compañero, y él continuó con una voz fuerte y segura que derrochaba sensualidad, todas mis compañeras incluida la profesora estaban embobadas prestándole atención, al terminar recibimos un aplauso de todo el salón y un notable alto, además de las felicitaciones porque hacíamos un buen equipo.
– Si supieran que no solo en esto somos un buen equipo, somos mucho mejor cuando gimes mientras dice mi nombre- dijo Alex cerca de mí en cuanto llegamos a nuestro asiento
- En estos momentos soy la envidia de las chicas del salón por tenerte como compañero, así que puede que me esté gustando tenerte cerca, aunque no recuerde lo que se sienta gemir tu nombre- contesté segura divirtiéndome con la cara de asombro que se le quedó ante mi respuesta.
La profesora seleccionó la siguiente pareja para exponer, sin querer me quedé observándolo fijamente.
-Ey! Respétame! no me violes visualmente de esa forma- reí por lo bajo por lo que acababa de decir - si quieres no solo mires también puedes tocarme que no te voy a morder, por lo menos no en público- haciendo caso a su oferta sin descaro alguno acerqué la mano a su pecho en el sitio donde estaba su tatuaje sin perder el contacto visual dejando una suave caricia, aproveche que esto lo había sacado un poco de control para acercarme y preguntar
- ¿Quién es Judith?
- La mujer de mi vida- soltó con su mejor tono frío, su respuesta me hizo alejarme y cortar con todo el rollito juguetón que me traía, solo a mí se me ocurría hacer ese tipo de preguntas, si tenía su nombre obvio que era importante para él, menuda manera de intentar acercarme.
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Contigo o con él
Teen FictionJane lleva alrededor de un mes viviendo en una bella ciudad costera, un día decide salir de fiesta con su única amiga, lo que no sabía que esa noche conocería a un sexy trigueño que cambiaría su vida para siempre.