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Calle entrelazó su mano con la de Poché y le sonrió intentando transmitirle confianza.

Calle: ¿Que pasa cariño? ¿Son ellos? - preguntó preocupada.

Poché: si Calle, de verdad no quiero verlos, volvamos más tarde ¿Si? - dijo Poché con los ojos llorosos, pero Calle no iba a permitir que esos idiotas tuvieran un motivo para pensar que pudieron con ella.

Calle: No María José, es momento de demostrar que no te vas a dejar caer por la traición de esa mujer y mucho menos por un idiota como ese. Yo estaré aquí y no permitiré que te digan algo cariño.

Poché: no se Calle, yo no sé si pueda soportar esto, yo no sé enfrentar esto.

Calle: no te preocupes preciosa, que tú futura esposa te va a defender de esos energúmenos.

Y con eso Calle tomó a Poché de las mejillas y le plantó un beso en los labios que Poché recibió gustosa, pues los labios de Calle eran tan suaves que por un momento se olvidó del lugar en donde estaban y tomó a Calle de la cintura para pegarla más a ella y besarla de manera más profunda.

Poché: l-lo siento, eso fue intenso. Me deje llevar, perdona - dijo Poché un poco avergonzada viendo aún los labios de Calle.

Cuando Calle le iba responder Poché no aguanto y volvió a unir sus labios con los de ella en un beso suave, delicado y tierno que Calle gustosa recibió sin prostestas.

Calle: no mi amor, intenso fue lo que hicimos anoche - dijo Calle lo suficientemente alto como para que los dos individuos que estaban observando la escena escucharán - y no te disculpes que esa es la prueba de la pasión que hay entre nosotras, ahora, vamos que tenemos una boda que planear.

Poché le sonrió y Calle pasó su brazo por el suyo y siguió su camino hasta la oficina de Don Juan Carlos, pero Laura que había salido de su estado de shock por lo que había visto le impidió el paso a ambas.

Laura: lo siento, pero no pueden pasar. El señor Garzón esta ocupado ahorita y no puede recibir visitas - dijo sería mientras analizaba a Calle de arriba a bajo.

Calle: bueno, pero nosotras no somos ninguna visita, así que déjeme pasar o tendrá serios problemas conmigo.

Laura: lo siento, pero tengo órdenes explícitas de no dejar pasar a nadie y a usted no la conozco así que problemas no tendré, además yo soy especial en esta empresa - dijo con aires de suficiencia y Calle rodó los ojos.

Calle: ¿Ni siquiera su hija la deja pasar?

Laura: lo siento Poché, pero sabes cómo es tu padre cuando está ocupado y....

Calle: oye, ella es la señorita Garzón para usted, no sea tan igualada y manténgase en el lugar que le corresponde, ahora exijo ver a mi suegro.

Laura: ¿Suegro? - preguntó confundida dándole una mirada a Poché quien solo la miro fríamente y tomó a Calle de la cintura.

Calle: si, mi suegro. ¿Usted quien es? - preguntó haciendose la desentendida ya que sabía perfectamente quien era.

Laura: yo soy la novia de María José - dijo muy convincente teniendo una guerra de miradas con Calle.

Poché: ex-novia - dijo Poché viéndola con desprecio y Laura volteó a otro lado avergonzada.

Calle: bueno ex-novia, quiero ver al señor Garzón ahora mismo - dijo con suficiencia.

Laura: lo siento, pero no la dejaré pasar...

Pero en ese momento sale de su oficina Juan Carlos quien había escuchado una discusión afuera de su oficina y por curiosidad salió a ver de quienes se trataban. Sorpresa se llevó al ver a su hija tomando de aquella manera a Daniela Calle quien tenía una guerra de miradas con Laura.