🄲🄰🄿🄸🅃🅄🄻🄾 5.

3.8K 257 34
                                    

Un año y medio después — Anto 3 años.

Cuando Calle le dijo a Poché que quería tener otro hijo pensó que esta iba a negarse, pero como siempre la sorprendió diciéndole que sí. Tardaron algunos meses en ponerse de acuerdo para decidir que era el momento perfecto y Calle no tardó mucho en quedar embarazada.

Ambas estaban bastante felices con la noticia. El médico les había dicho que sería un niño lo que las tenía ambas encantada con la idea de tener a un pequeño varoncito en sus vidas.

Al nacer el “pequeño" ambas quedaron sorprendidas. El bebé era un pequeño mini clon de Calle, pero había sacado la condición de Poché, cosa que tenía a Calle encantada y a Poché algo preocupada ya que no se quería imaginar como su pequeño o pequeña por qué el bebé tenía un rostro totalmente femenino, no se quería imaginar cómo se llegaría a sentir si llegara a pasar por lo que ella tuvo vivir en un futuro.

Calle se encargó de hacerle entender a su esposa que el bebe iba a estar muy bien ya que ellas iban a estar ahí para cuídala y protegerla de todo y de todos.

Antonia: ¡Tia! ¡Tia! — comenzó a gritan Anto al ver a Paula entrar a la habitación.

Calle: Anto — le reprendió Calle — tu hermanita está durmiendo — dijo y Anto asintió sería.

Paula: hola mi vida — saludo Paula con una enorme sonrisa a Anto.

Antonia: tía, ya tengo un nuevo juguete — escuchó Calle que le contó feliz y está la miro confundía.

¿Será que Poché le había comprado algo y no le había dicho nada?

Paula: ¿En serio?

Antonia: ¡Si! — chillo emocionada hacia su tía.

Paula: ¿Y que es pequeña? — le preguntó curiosa.

Anto corrio hacia la cuna y señaló a su hermanita quien estaba durmiendo.

Antonia: ¡Aquí está!

Calle jadeo sorprendida ante la idea de su hija.

Calle: ¡Antonia Garzón Calle! Tu hermanita no es un juguete — masculló está entre dientes.

Pobre Calle, solo eso le faltaba. Ya se podía imaginar a su hija tratando de vestir y cargar a su “bebe" tal y como lo hacía con sus muñecas en casa. Nota mental: No dejarla sola con Emma.

Al principio cuando ambas le contaron sobre su nuevo hermanito a Anto está se mostró celosa, sobretodo con Poché a quien no le hablo durante dos semanas enteras. Pero cada vez que tenían la oportunidad comenzaban hablar con ella de lo genial que era ser una hermana mayor, también que ella podía ayudar a enseñarle a su hermano y muchas otras cosas más. Anto, a las pocas semanas y extrañando sus tardes con su madre pelinegra quien se la pasaba triste por el trato de su hija tomo al pie de la letra lo que ambas le dijeron y les dijo a ambas que estaba bien y que cuidaría mucho a su hermanito pequeño como lo hizo Poché con su tía Vale.

Calle casi sufre un infarto cuando está quiso cargar a su hermanita y Poché la puso en sus brazos. Que si, ella la ayudo a sostenerla pero Anto quería cargarla como a sus muñecas cosa que había asustado a Calle.

Antonia: ¡Pelo... Pelo es mi bebé! — se cruzó de brazos he hizo un puchero.

Calle: lo sé mi amor — suspiró — pero no es un juguete.

Poché: ¿Que no es un juguete? — preguntó Poché entrando en la habitación con unas bolsas de comida en sus manos. Emma apenas tenía tres días y ya casi le daban el alta, pero Poché se negaba hacer que Calle comiera la horrible comida del hospital que a su parecer no ayudaba en nada.

Calle: Emma mi amor, Emma — Poché la miro sorprendida y está se explicó — nuestra hija piensa que su hermanita es su nuevo juguete.

Poché jadeo.

Poché: Anto... — llamó a su hija mayor.

Antonia: ¿Si mami?

Poché: tu hermanita no es un juguete mi amor — reprendió suavemente.

Antonia: lo sé, mamá ya me lo dijo — se quejó — ustedes son abudidas.

Calle rodó los ojos.

Calle: esa niña salió igualita a ti Poché — gruñó Calle.

Poché: espero que lo digas por lo pelinegra — ironizó.

Paula: hey, hey. No vallan a comenzar a pelear y ponganme atención que no tome un vuelo para ser ignorada — las reprendió Paula a ambas.

Calle la miro avergonzada.

Poché: ¡Pau! — grito Poché feliz al ver a su mejor amiga — no puedo creer que estés aquí — la abrazó.

Paula: mi chica tiene otra hija, por supuesto que voy a estar aquí — dijo abrazando más a Poché.

Calle: ¡Hey! Que es mi chica, no la tuya — gruñó Calle celosa.

Poché le tiró un beso.

Poché: no seas celosa cariño, que tengo para las dos — bromeó, en serio Calle quería creer que bromeó.

Calle se cruzó de brazos.

Antonia: ¡Yo puedo ser tu chica mamá! — Anto corrio y se subió a la cama con Calle. Está se inclinó un poco y la tomo en brazos para comenzar a dejar besos por toda su carita. Las risas llenaron la habitación.

Poché: me estoy poniendo celosa — se quejo Poché.

Calle le saco la lengua juguetona.

Calle: quédate con Pau, yo ya tengo a mi chica.

Anto volvió a reír

Su risa calentó el corazón de todas en la habitación.

Poché las miro enfurruñada.

Ambas no podían esperar a que Emma fuera lo suficientemente grande para unirse a sus juegos tontos.

Tenían una familia hermosa

No podían pedirle más a la vida.

Este capítulo es algo corto, pero igual espero que les guste mucho.

🅴🅻 🅰🅼🅾🆁 🅳🅴 🅻🅰 🅲🅴🅾  𝖼𝖺𝖼𝗁É 𝗀!𝗉.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora