Capítulo 18

4.5K 236 74
                                    



Habían pasado unos cuantos días desde que por alguna manera decirlo, todo comenzó. Logan estaba dejando su desconfianza a un lado y me ha dejado salir cuantas veces he querido, claro, sin alejarme demasiado. Yo también intento no hacer esta relación si se puede llamar así más complicada de lo que ya es. Lo estamos tomando con bastante calma, aunque hay veces que sé que Logan quiere ir un poco más allá de los besos, pero sé que a ese punto aún no voy a llegar.

Hace casi un par de días que apenas le veo, me viene a ver y después se marcha, ni siquiera me habla. No se que diablos le pasa, deben de ser hormonas de lobo o algo por el estilo.

Ahora me encuentro de camino a casa de Lisa, me mandó a llamar de una manera un tanto extraña. Vinieron dos niños casi idénticos, me dieron un papel y salieron corriendo.

Una vez estoy en la puerta de su casa, antes de llamar la puerta se abre, la mano de mi amiga me sujeta por el cuello de la camisa y me empuja hacia dentro. Ahogo un grito por la impresión. ¿Qué diablos le pasa?

Una vez dentro cierra la puerta con seguro lo que me asusta un poco.

— Se acerca la caza— su respiración está acelerada— se acerca la maldita caza— vuelve a repetir

Arrugo la nariz y el entrecejo. ¿Hormonas de embarazada?

— De que estas hablando— intento acercarme a ella, siempre ha sido un poco exagerada cuando explica cosas— ¿vamos a cazar ciervos?— intento bromear, pero al ver su expresión seria mi sonrisa desaparece— ¿de qué diablos hablas?

— Meghan— agarra mis hombros y me zarandea— una vez al año, todos los hombres lobos son dominados por su lobo interior, no son conscientes de lo que hacen, son animales— me vuelve a zarandear.

— ¿Como?— murmuro sin comprender— ¿se quedan en forma de lobo durante unos días?— frunzo el ceño— pues que se vayan al bosque— vuelvo a bromear.

Mi amiga me pellizca el brazo

— No idiota, su parte animal salea la luz y si quieren matarte lo harán— trago en seco— si quieren— se queda callada unos segundos antes de continuar— demonios si quieren poseerte lo harán.

Mi sangre se hiela por unos segundos

— Me estas diciendo— me quedo callada sin saber cómo continuar. Miro su barriga— el bebé— murmuro preocupada.

Lisa me mira como si se estuviera disculpando

— Yo no voy a tener ningún problema— murmura levantándose un poco el vestido dejando ver una marca en su muslo izquierdo.

— Que diablos es eso— me acerco para inspeccionarla, parece una mordedura ya cicatrizada.

Suspira sentándose en el sofá, me hace un gesto para que la acompañe

— Verás— entrelaza sus dedos— Una semana al año, como ya te he dicho los hombres lobo pierden el control racional. Entonces su animal interior sale a la luz— hace una pausa para ver si la estoy siguiendo— bien, son animales así que cazan, se alimentan y se reproducen— hago una mueca— pero al ser hombre lobo no cazan— se muerde el labio inferior— pero si se reproducen— se pasa el dedo por encima de el labio — y mucho.

Parpadeo sin poder creer lo que estoy escuchando

— Entonces solo me escondo y ya está— me mira como si le diera pena— ¿no?

Titubea antes de hablar

— Por poder, puedes hacerlo— se queda callada— pero si no lo hace contigo, lo hará con alguien más— mi corazón se encoge— repito que ellos no son conscientes de lo que hacen.

Tu voz #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora