El matrimonio de JiMin no va bien; años al lado de su esposo le hicieron darse cuenta de que no eran compatibles, pero el sentimiento de terror que le provoca pensar que puede perderlo lo orilla a buscar una rápida solución.
⠀⠀Finalmente, termina...
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⠀⠀El desasosiego que lo acompañó mientras observaba por el enorme ventanal del cuarto asignado fue suficiente para obligarlo a lagrimear levemente.
⠀⠀Desganado soltó un suspiro, mirando de soslayo la cama que había estado utilizando desde que había llegado a aquel edificio. Encima de ella, descansaba la ropa que había estado usando el día que se topó con JungKook.
⠀⠀Un vacío se instaló en su pecho, creando una presión que le hizo difícil poder respirar correctamente, aun cuando no era más que una ilusión de su mente abrumada.
⠀⠀—Más que nada —se sinceró, jugando con sus pequeños dedos—. Pero no es suficiente, JungKook. Mi decisión… Yo no estoy seguro.
⠀⠀—¿Entonces esto es todo? Te vas y todo lo que tendré para recordarte serán mis memorias… —interrumpió, una risa seca tensando el ambiente—. Está bien. Si es lo que quieres, entonces lo respetaré.
⠀⠀Podía notar la decepción latente en el tono y forma de actuar de su menor.
⠀⠀JiMin se quedó en silencio durante un largo tiempo, los pensamientos en su cabeza haciendo un caos de la misma mientras trataba de reparar en qué podría decirle.
⠀⠀Vaciló. —Antes habías dicho que querías pintarme, ¿verdad?
⠀⠀—Sí.
⠀⠀—El día antes de irme, si quieres, te dejaré pintarme. —Desvió la mirada—. Modelaré para ti.
⠀⠀Su corazón se encogió ante lo que estaba ofreciendo. Él no apreciaba el arte de JungKook de ninguna forma; la pintura siempre había sido la representación viva de negatividad para él. Modelar o ser figura de un cuadro estaba fuera de cualquier consideración.
⠀⠀Excepto que al ver el pequeño universo en los ojos de JungKook, no parecía tan malo hacer una única excepción. Después de todo, no lo volvería a ver una vez dejase el café, París y por tanto Francia.
⠀⠀—¿Estás seguro de querer? —pronunció por fin.
⠀⠀—Considerando nuestra situación, sí.
⠀⠀—En ese caso, gracias.
⠀⠀—Bien —cedió con un suspiro—. Mi último gesto para ti será dejar ser el modelo de uno de tus cuadros. Luego me iré JungKook. —Acarició su rostro lentamente, casi con miedo de ser demasiado brusco— ¿Entiendes eso?
⠀⠀JungKook tomó su mano en la propia, asintiendo con pesar. —Lo entiendo. El día antes de irte modelarás para mí, y entonces eso será todo...