YIZHAN "Until the end of Time"

Uno Más.

- ¿Así que tu nombre es Xiao Zhan?.- Kenta sonrió.

- Si...- Hizo una reverencia.- Mucho gusto.

- Vamos.- Agitó su mano.- No es necesario las formalidades, mi nombre es Kenta.- Estrechó su mano.- Kenta Ueyama.

- Mucho gusto.- Zhan sonrió.

- ¿Podríamos dejar las presentaciones para después?.- Yibo suspiró.- Debemos movernos antes de que seamos detectados.

- Entonces vamos.- Kenta se detuvo.- ¿Estás lastimado?.- Observó el tobillo vendado de Zhan.

- No es lo que crees.- Zhan agito ambas manos.- No es una mordida, sólo fue una mala pisada.

- No vas a poder caminar todo el trayecto de esa manera.- Kenta negó.- Yibo...

- ¿Que?.- Yibo arqueo una ceja.- ¿Acaso quieres que yo lo lleve?

- Ya que decidiste traerlo con nosotros entonces debes hacerte responsable.- Kenta sonrió.

- ¡Tu!...- Yibo apretó sus dientes.

- Vamos, los niños ya llevan mucho tiempo solos.- Kenta empezó a caminar.

- Sube...- Se colocó en cuclillas frente a Zhan.

- ¿Que?.- Se Agitó

- Dije que subas, te llevaré en mi espalda.

- No...- Negó.- Yo puedo caminar.

- Escucha...- Yibo suspiró.- Si te dejo caminar solo nos retrasaremos y mis hermanos ya llevan mucho tiempo solos, quiero llegar pronto así que sube, no pienso perder el tiempo en tontas discusiones.

- Lamento las molestias. Quizás sea algo pesado.- Trepó a la espalda de Yibo.

Aquel chico a pesar de ser unos centímetros más alto que yo en realidad no era tan pesado como se esperaba, su cuerpo delgado reposaba en mi espalda y podía notar lo liviano que era.

Sus blancas manos se aferraban a mis hombros con algo de precaucion, como sino quisiera cruzar la línea de la confianza. Mientras regresábamos a casa se mantuvo en silencio, solo podía escuchar el fluir de su respiración en mi oído, una respiración agitada y llena de miedo.

Se suponía que a esta alturabla humanidad ya estaría del todo acostumbrada a la existencia de los Zombies pero cuando sentía como las manos de aquel chico se tensaban sobre mis hombros cada vez que a lo lejos escuchaba un gruñido o un grito desgarrador entendí que el chico sobre mi espalda aún no había asimilado la situación en que vivía.

Nunca viví con miedo, siempre enfrente las cosas, incluso mucho antes que todo esto se desatara. El miedo nunca fue parte de mi hasta que me di cuenta que ahora llevaba en mis espaldas no sólo mi vida sino la de mis pequeños hermanos, fue en ese momento que el miedo me embargó, miedo a morir, a dejarlos solos en este caos, miedo a que no vieran un mañana.

Quizás por eso sentí algo de empatia hacia este chico cuando notaba su miedo, porque en algún momento de mi vida yo también lo llegué a experimentar. No sé lo que le sucedió y tampoco quiero saberlo, una de las cosas que he aprendido en este tiempo es que crear acercamiento e incluso relaciones con otras personas a la larga solo traerá perdida y dolor, así que debo mantenerme al margen, de todos...de él.

~~~

- Yi Yi...Ying Ying.- Yibo caminó por la habitación.

- Gege...- Ambos niños salían de su escondite y corrían hacia él.

- Lamento haberlos hecho esperar.- Los abrazó.- Me demoré un poco más.

- Está bien Gege...- La pequeña se alejó y corrió hacia Kenta.- Me alegra que hayan regresado a salvo.- Se detuvo al ver a Zhan.- ¡Oh! Hola.- Sonrió.