18. Esto no era parte del plan

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 La presencia de Loki en aquel lugar parecía transformar un día nublado, Thor permanecía sentado a su lado aguardando paciente para que este despertara, notaba como los nervios lo recorrían, incluso imagino múltiples respuestas a las preguntas aún no hechas por el chico que continuaba sumido en el mundo de los sueños.

Observaba aquel juvenil rostro que lucía una paz en medio de sus sueños. El rubio se preguntaba si estaría soñando con su hogar o si sus pensamientos estaban dedicados a esa versión joven de Bucky, nuevamente sintió el aguijón de los celos clavándose en su pecho. Dio un manotazo en el aire como si buscara espantar esos pensamientos oscuros, poco importaba en quien pensaba el chico pues ahora estaba a su lado, se dijo que pronto sería el único en sus pensamientos.

Pasó la yema de los dedos por la tela de la ropa que ahora vestía el joven, las antiguas vestimentas de su Loki, se tomó la molestia de cambiarlo mientras estaba inconsciente y era como si su hermano siguiera a su lado.

No transcurrió mucho para cuando se dio cuenta de que Loki estaba despertando, se apresuró a aproximarse tomando aquella mano.

—¡Por fin despiertas! He estado aguardando por ello. — anunció dando una sonrisa que buscaba transmitir sus sentimientos.

Loki abre lentamente los ojos, la cabeza le pesaba y se sintió aturdido.

Observó el rostro de su padre, no le pareció tan extraño salvo por la ropa que este llevaba, bajo la vista notando que también la suya era diferente, más que eso la mano que sostenía la suya de una manera que le hizo sentir extraño.

—¿Papá? ¿Por qué estamos vestidos de esta manera? — preguntó incorporándose, cuando lo hizo se soltó de la aquella mano.

—No me llames así...— dijo de tajo intentando aún mantener aquella sonrisa gentil.

—¿Perdón? ¿Así como papá?

—¡No me digas papá! No lo soy, así que solo no me llames de esa forma, por favor Loki.

El chico lo miró sin comprender, intentó organizar sus pensamientos dándose cuenta de que no tenía sentido lo que su padre decía.

—¿Dónde está mi madre? ¿Ya le dieron el alta en el hospital? —intentó buscar con la mirada, pero seguía sin reconocer aquella habitación. —Creo que he dormido bastante.

—Loki, por favor deja de preguntar por esas personas, no los encontrarás en este sitio.

El pelinegro lo mira como si estuviera desvariando, se preguntó si le estaban jugando alguna especie de broma, desechó la idea puesto que sus padres no eran amantes de ese tipo de bromas.

—No comprendo, ¿de qué personas hablas? Porque estás hablando como si yo te preguntara por extraños— busca ponerse de pie notando lo incómodo que es la ropa que está vistiendo. —¿Qué se supone que estoy usando?

Thor lo sigue con la mirada, se percató de que todas las posibles respuestas que estuvo ensayando se le olvidaron, ahora que el chico estaba despierto le resultaba complicado explicar la verdad.

—Sé que te parecerá una locura, aún no lo digo y yo creo que suena como algo alocado, pero debes creer lo que te diré...

Loki no supo por qué, pero sintió un escalofrío corriendo por su columna.

—Solo dilo papá...

Thor soltó un brusco golpe contra la pared al tiempo que alzaba la voz.

—¡No soy tu padre! ¡Te dije que no me llames de esa manera!

El chico retrocedió ante el arranque de violencia del que pensaba su padre. Aquello lo inquietó, se preguntó si su madre le fue infiel y su papá lo descubrió, quizás por eso se veía tan descompuesto, pero rápidamente apartó esas absurdas ideas. Sus padres estaban tan enamorados que solo pensar en algo así le daba asco.

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