Son las 10 p.m, decido salir a la sala, donde están todos platicando, a excepcion de él, él sólo los observa mientras acomoda unas cajas. Me ve llegar mi madre y nota que estoy mirando a Charlie.
-Abril, ya despidete y dile a tus hermanos que ya nos vamos.
Asiento y regreso a la habitación, les ayudo a recoger los juguetes y salimos todos de la habitación. Se empiezan a despedir y yo opto por despedirme de Charlie al último, le doy su móvil y sólo le digo, adios, Charlie.
Si, adiós, no volveré a verlo, apuesto a que regresara a su viejo hogar, me gustaría saber más de él pero no pertenece acá, esto es Puebla y el es de México. Se irán mañana, Isabella, Israel y Charlie a trabajar, se irán a Chiapas, asi que después de esta noche, no sabré nada más de él.