Tu Recuerdo

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Se separaron de aquel beso que por alguna razón, los había transportado a los primeros besos que se dieron, la vez que ella le robó un beso, o dos...

Manuel solo suspiró y la miró como siempre, enamorado, sus labios habían deseado tanto volver a sentir los de ella.
Ella acarició su rostro mientras analizaba cada detalle de su cara y de repente suspiró- me haces tanta falta Manuel, yo...yo todavía te...

-no digas nada, por favor-la interrumpió y bajó la mirada mientras ella acariciaba sus mejillas-quiero tratar de procesar lo que acaba de pasar, tu eres una mujer comprometida y yo de verdad lo siento si mis palabras te conf...-ella lo volvió a besar, a pesar de que ambos sabían que estaba mal, sus cuerpos no entendían de razones y empezaban a reaccionar, en un movimiento preciso, Lucero se colocó a horcajadas sobre él, se separó del beso, lo miró dos segundos y volvió a besarlo con mayor intensidad, tomó las manos de Manuel e hizo que las colocara sobre sus caderas, mientras las de ella exploraban su pecho por encima de la camisa. La toalla cayó de la cabeza de Lucero y las manos de Manuel se infiltraron debajo de la blusa del pijama, estas recorrieron un espacio de su espalda y pronto se encontraban sobre su abdomen, el aire les faltaba pero sus cuerpos ya estaban en llamas, era demasiado tarde para poner un alto, respiraciones agitadas en la sala y suaves gemidos se comenzaban a escuchar.
Las caderas de Lucero iniciaron un movimiento suave sobre el regazo de Manuel, logrando un roce perfecto entre ellos, las manos de él ascendieron y llegaron a sus senos, despegaron sus labios y Manuel comenzó a besar el cuello de Lucero, ella mordió su labio inferior emitiendo un leve quejido mientras se retorcía sobre él...

-Puta!! No, no, no, no!!!!- dijo ella deteniendo las manos de Manuel, se bajó inmediatamente y llevó sus manos a la frente-soy una pendeja!! Carajo!! Esto esta mal...-lo miró arrepentida y en él solo se veía confusión y placer-perdoname, perdoname por favor, que vergüenza, Diosss, lo siento tanto-se puso de pie y subió a su recámara dejandolo ahí con millones de incógnitas y sin ninguna respuesta.

Él tomó la toalla humeda que ella olvidó en el suelo y la olió, tenía el aroma que había amado desde hace mas de 25 años, el olor de su cabello, recordó aquella primera sesión de fotos en la que Lucero estaba molesta y renegaba mientras sus coletas golpeaban el rostro de él, no le importaba nada de lo que decía, sólo disfrutaba tenerla tan cerca, suspiró y sus pensamientos se vieron interrumpidos por Jos y Lucerito que ya habían llegado, revolvió la toalla y la escondió detrás de los cojines del sofá blanco.

Jos: Que onda, todo bien?

Manuel: si, si! Por qué lo dices?

Jos: nomas

Lucerito: y mi mamá?? Todavía no sale de su recámara??

Manuel: Ah si....salió hace rato pero recibió una llamada que era importante y subió para contestar

Lucerito: Bueno, voy a verla para avisarle que ya estamos aquí

Manuel: No no!!! deja que tome su llamada tranquila, mejor vente beba, vamos a poner la mesa en lo que sale tu mamá.

Lucero en su recámara se metió al baño y se quedó frente al espejo.

Lucero: ¿Qué hiciste Lucero Hogaza, qué hiciste?-comenzó a sentir culpa y arrepentimiento-estas desquiciada! Cómo se te ocurre hacer eso, qué va a pensar Manuel de tí, Dioss!!-se reclamaba a sí misma.
-Lo peor de todo esto, es que ese beso...ese beso me removió todo...-susurró y pasó sus dedos sobre sus labios-BASTA! pareces una loca hablando sola

Alguien tocó la puerta de su recámara y ella se asustó, se acercó en silencio para tratar de averiguar de quien se trataba

-ma?? -preguntó Lucerito desde el otro lado y ella respiro tranquilidad

-nena...sí, que pasó?

-pues nada, que la mesa ya está servida y queremos comer, ya vienes??

- sí, si...ahora bajo
Oye, y tu papá? Se fué?

- No ma, solo te estamos esperando a tí

-mierda...-susurró por lo bajo

-Qué?

-que ya bajo amor, dame dos minutos.

Se puso una bata encima del pijama, respiró profundo y bajó con los demás

Jos: Quién te llamó a esta hora, ma??

Lucero: Llamarme??

Manuel: Lucerits, si!-interrumpió Manuel-La llamada que recibiste y que me dijiste que era urgente. Por eso entraste a tu recámara y te tardaste

Lucero lo miró tratando de entender por qué había inventado semejante mentira

Lucero: Aaah, si. No...era Chanty que necesitaba contarme algo y ya ves que soy bien mitotera, así que me entretuve un buen rato.

Jos: aaah, ok ma

Lucerito: Ya está todo en la mesa, vamos a cenar, no??

Lucero: Sí, si...vente Manuel pasate con toda confianza, estás en tu casa-bromeó y él sonrió


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