Omega Brujo

Capítulo 10

Dedicado a @Yiritaeri

-Ya obtuviste tu recuerdo, ¿eh, cachorro?- la voz cruda de su pareja le calienta los sentidos.

Él asiente. Si, fue un maravilloso momento que atesorará por siempre. No duda que en el futuro habrán más y mejores mamadas, pero esta fue especial. Oh, él explotó en la boca de su vampiro... Hubiera querido verlo tragar su esencia pero cerró los ojos fuertemente en su liberación. Otra vez será. Sin dudas hará el horario de las mamadas.

Baja la vista entre sus piernas. Su pareja descansa la cabeza en la ligera depresión entre su pelvis y el comienzo del muslo. Baila una risilla de suficiencia en sus ojos. Ah, sabe que lo dejó tonto y saciado. Sin embargo, Yixing se percata de un detalle: Junmyeon no ha obtenido nada. Intenta incorporarse en la cama, quiere hacer algo por su pareja, no es justo recibir y no dar a cambio.

Pero la mano de su amante en su pecho, lo detiene. Este se incorpora y lo mira con un hambre tal que el omega se siente caliente en segundos.

-Pero tú... tú no...-

-Tranquilo, pequeña cosita deseable.- y la voz del vampiro no lo calma en absoluto, hay una promesa subyacente que lo enciende - Bien, ahora voy a darte el recuerdo de tu primera follada...

Yixing ve la habitación girar en redondo. Su cara se aplasta contra las almohadas. Intenta cobrar el equilibrio pero es en vano, Junmyeon lo toma por las caderas y lo levanta dejándolo empinado de nalgas. Su corazón da un brinco. Sip, su pareja lo va a follar. Ansias y temor a partes iguales luchan en su interior. Él se sabe bendecido, este es su pareja y, entonces, está bien.

Junmyeon le da una nalgada. Fuerte. Hace eco por todo su cuerpo y regresa al punto donde el golpe impactó. Caliente. No quiere ser un quejica. Prestará atención a cada detalle para aprender de su pareja. Este busca entre sus piernas, rueda sus testículos suavemente y culmina en una caricia a su miembro semi erecto. A Yixing le gustan las caricias. Una nueva nalgada lo saca de su confort.

Junmyeon lo trae arriba y abajo como un yo-yo. Mucho placer y un poco de dolor. No le da tiempo para absorber ninguno completamente. Besos, caricias, lamidas, mimos, sin que haya un patrón definido para el momento de la nalgada.

La piel de su trasero quema pero después disfruta de los cuidados con que su pareja lo premia. Quejidos y suspiros: una mezcla rara. Ahora Junmyeon es más brusco pero Yixing no se siente maltratado.

El vampiro sube por su espalda salpicando su piel de besitos juguetones y le gusta. Se restriega como un gato al sol contra él. Espera la nalgada. En la nuca le hace cosquillas con la lengua y se eriza por todas partes. Sigue esperando la nalgada. Su polla pica suavemente en su vientre ya completamente despierta. El plan de Yixing es ladear la cabeza para besar a su pareja por encima del hombro, pero no llega a hacerlo...

El grito bloquea su garganta. La rudeza con que aprieta las almohadas le deja las manos insensibles. Su vista se desenfoca. Todo su cuerpo tiembla.

-¡Duele!- se queja mordiendo las palabras casi en un sollozo.

-¡Sí!- le dice Junmyeon al oído con oscura lujuria.

El vampiro se ha enterrado hasta la raíz con un solo movimiento. Yixing arruga la cara y trata de respirar entre jadeos lastimosos. Fue tan rápido, esperaba otra cosa cuando se acabaron los besos suaves pero su pareja le cambió el juego. Sus ojos se llenan de humedad.

-Jun-Junmyeon... duele-e... - lloriquea como el que pide piedad ante el cadalso.

"Voy a hacer que se sienta bien, mi Mate... Ten paciencia y confía en mí."