Polvo de Ángel || Chanbaek

Tercer capítulo

Baekhyun estaba sentado en el sofá de la sala porque un mareo casi lo había hecho caer. Pensaba que cada vez se ponía más débil.

Mientras se levantaba para trapear la cocina, pensaba en que pasaría si aquellas medicinas no… no afectaban a su bebé. Su bebé, —esto es una pesadilla, —susurra mientras se detiene y baja la mirada para ver su vientre aun plano, aunque cuando deslizó su mano pudo sentir una ligera curvatura dónde descansaba su hijo.

—¿Estás bien? —puede escuchar la voz de su hermano por lo que quita su mano y dirige su mirada hacia Minseok. —¿Pasa algo malo? —pregunta preocupado al ver la mirada entristecida de Baekhyun.

—¿Qué haré si no se va? —chasquea la lengua y suspira.

—Bueno, no podría decirte. —Su voz también bajo el volumen. —Podrías ir a buscar… —desvía la mirada sintiéndose incómodo por lo que iba a decir, —a su padre. 

—¿Qué? —frunce el ceño, —ni siquiera sé dónde vive y además él me pegó eso, —susurra lo último. 

—Es cierto, lo sé. Pero no sé que más podrías hacer si tus medicamentos no le hacen nada, solo es una probabilidad, no es seguro. —Se cruza de brazos y apoya su espalda contra la pared. —Papá y mamá se darán cuenta cuando tú barriga empiece a crecer. 

—Lo sé, lo sé, —dice desesperado mientras empieza a llorar siendo abrazado inmediatamente por Minseok, —yo no quería nada de esto. 

Los días pasaron y Baekhyun comenzó a recuperarse poco a poco, además aquellas llagas en su parte íntima habían desaparecido lo que le causó algo de tranquilidad, aunque sentir aquellos movimientos extraños en su abdomen lo desmotivaron porque sabía que aquel pequeño seguía creciendo.

—¿Estás listo? —pregunta Minseok entrando a la habitación de su hermano, —ponte un abrigo, hace frío, —recomienda mientras mira el pequeño vientre de Baekhyun.

—Sí, sí ya voy, —Baekhyun sale de sus pensamientos y de inmediato va a un armario para buscar algún abrigo. 

Como sus padres habían salido de viaje, ambos aprovecharon para ir a la cita médica de Baekhyun; el tratamiento ya había culminado. Fueron caminando hacia el centro de salud donde tuvieron que esperar un rato antes de ser llamados. 

—¿Cómo te has estado sintiendo? —pregunta la obstetra mientras realiza una ecografía a Baekhyun. 

—Mejor, solo un poco de náuseas y antojos de dulces, —suspira para luego mirar a la pared.

—¿No quieres verlo? Ya está más formado, —señala ella, —tienes casi tres meses así que pronto pasará el tiempo de peligro. —Explica.

—Que bien, —susurra sin ánimo.

—¿Por qué nunca vienes con tu marido? —pregunta ella.

—No tengo… —susurra algo avergonzado.

—¿No? ¿Y la mordida en tu nuca? —pregunta ganándose una mirada de extrañeza por parte de Baekhyun. 

—¿Cuál mordida? —pregunta él mientras lleva una mano a su nuca. 

—La que tienes ahí, dónde estás tocandote, —señala.

Baekhyun no dijo nada más y luego le mandaron a hacer más estudios por lo que estuvieron casi toda la mañana y parte de la tarde dentro del centro de salud. Baekhyun veía de manera incómoda a los otros omegas en cinta que estaban cerca; todos estaban con sus alfas lo que le hizo sentir mal a él.

Minseok dejo un rato a Baekhyun en la sala de espera para poder ir a recoger los exámenes. Prefería que su hermano no camine demasiado, así que no le molestaba hacerlo.