Arreglando el pasado (Sirry)

Capítulo 25

A la mañana siguiente, Tom tocó la puerta de Harry, sonriendo como de costumbre con su boca desdentada y llevándole una taza de té. Siendo el viaje largo y no querer someter a Hedwig al viaje innecesario, la forzó (gracias voz de dragón porque ella ya lo había picoteado en su terquedad de no querer estar encerrada, acostumbrada a la libertad como estaba y siendo días horribles con los Muggles) que Ron irrumpió en su habitación abriendo de golpe la
puerta y entrando enfadado mientras se ponía su camisa.

—Puedes creer que Percy me culpa de manchar de té su foto de Penelope Clearwater. —bufo—. Cómo si me importara o lo hiciera a drede, ni estaba cerca de su tonta foto, ella se esconde ahora por su nariz manchada

—Típico - contestó Harry - Sabes tu padre...—fue cortado por Fred y George que felicitaban a Ron   por enfadar a Percy.

Harry decidió hablar con Ron luego, sería interesante tener una perspectiva diferente con respecto a su tío y toda esta enredada situación.

Tampoco es que pudieran conversar mucho con los gemelos obligándolos a bajar a desayunar. Encontraron al señor Weasley, que leía la primera página de El Profeta con el entrecejo fruncido, y a Harry le dio curiosidad, lo más probable es que la noticia fuera sobre su tío cirios o tal vez de alguno de sus otros familiares.

Mientras que la señora Weasley estaba hablando con Ginny y Hermione contándoles de una poción de amor que había hecho de joven, las tres reían con risa floja, aunque notó que Hermione parecía aprensiva.

Harry no la culpaba, en el Mundo Mágico la poción de amor "amortentia" se producía y vendía como si fuera un dulce, menores de edad podían adquirirlo y hacerla ellos mismos, obteniendo al objeto de sus caprichos para ellos. Eso era horrible Además de que Harry sabía incluso dumbledore sabía todos los sangre pura maldita seas que esa cosa traía consecuencias nefastas niños nacidos bajo la poción si en la capacidad de amar personas prácticamente violadas, despojadas de su razón, libertad y todo tomado como una chiquillada algo tierno sinsentido maldición todos los que tenían acceso a libros magos o cuántos mangos sabían que esa cosa era parecida a un imperio es como ser la bella durmiente y cuando despiertas tienes hijos que no sabías en qué momento sucedieron Tom Riddle es un claro ejemplo de no usar esa posición para gustarle a alguien cualquiera que usará esa poción para tales fines Aunque todo en si era funesto tener sexo, casarse y un hijo era lo peor, debería ir Azkaban.

Ron no preguntó que le quería decir Harry, no con cualquiera pudiéndolo escuchar y no es como si tuviera un tiempo en el ajetreo de bajar los baúles, Ron estaba mirando el cielo y renegando por la minoría de edad, todo para dejar apilada sus cosas junto a las jaulas de Hedwig y Hermes, la lechuza de Percy, en la puerta incluso la cesta que contenía a  Crookshanks estaba ahí y se movía ruidosamente.

Con el ajetreo de la partida, Harry tampoco tuvo tiempo de hablar con Ron.Todos estaban muy ocupados bajando los baúles por la estrecha escalera del Caldero Chorreante y apilándolos en la puerta, con Hedwig y Hermes, la lechuza de Percy, encaramadas en sus jaulas. Al lado de los baúles había un pequeño cesto de mimbre que bufaba ruidosamente.

—Vale, Crookshanks —susurró Hermione a través del mimbre—, te dejaré salir en el tren.

—Pobre, no le gusta el encierro —dijo Ron terminantemente—. Con Scabbers estarán libres.

Se señaló el bolsillo del pecho, donde un bulto revelaba que Scabbers estaba allí acurrucada.

El señor Weasley, que había aguardado fuera a los coches del Ministerio, se asomó al interior.

—Aquí están —anunció—. Vamos, Harry.

El señor Weasley condujo a Harry a través del corto trecho de acera hasta el primero de los dos coches antiguos de color verde oscuro, los dos conducidos por brujos de mirada furtiva con uniforme de terciopelo verde esmeralda, todos mirando a ambos lados de la calle llena de gente.