Vinculos de sangre

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22 de octubre de 2021, el día de la última actualización. Me disculpo y brindo contexto de la historia para los interesados en continuar leyendola:

La historia esta situada en la primera guerra magica, donde tenemos a Tessie y Rabastan viviendo juntos en secreto sin tener una relación formal, mientras él es un mortifago activo y ella le miente a su familia sobre su ubicación.

Peor resumen nunca escrito, acepto colaboración.

Informacion importante para a quienes se les olvido: Tessie muere antes de la caida de Voldemort que ocurre el 31 de octubre de 1981.

No puedo dejar una historia incompleta. Sobretodo porque yo sé que pasa y los que aun desean saber, no.

Comencemos con el capitulo, espero que alguien aun quiera saber que pasa.

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Vinculos de sangre

Agosto 1981

Era una noche sin luna.

Un ruido seco retumbó en toda la casa desde la entrada, haciendo que la pelirroja saltara de la cama.

Su respiración se aceleró; su compañero de cama solía ser silencioso.

Ella se envolvió en la bata rápidamente y sujetó su varita. Tenía el hechizo listo. Sin embargo, se quedó congelada al ver la escena. Nunca había visto tanta sangre y esta bañaba el cuerpo de Rabastan. Tal vez, si la situación hubiera sido diferente, le habría prestado más atención al hombre enmascarado que lo sujetaba.

La pelirroja se acercó al castaño y antes de que pudiera decir algo, escuchó: "Tess... no llores... no quiero..."

Soltó un quejido mientras el hombre tras la máscara lo interrumpió, dejándolo sobre el mueble más próximo. Sin inmutarse, con un rápido hechizo, el invitado atrajo unos frascos y se los extendió.

—Tírame como basura... no esperaba menos de ti —dijo el rubio, sin perder la socarronería.

—Deja de actuar como un niño.

—Sé bueno con ella —dijo antes de beber las pequeñas botellas y quedarse dormido.

El enmascarado no respondió.

Le tomó unos segundos a la pelirroja procesar lo que acababa de pasar, aunque ver cómo las heridas del rubio comenzaban a cerrarse le diera algo de calma.

El hombre de capa negra seguía caminando por la casa como si buscara algo.

La joven se levantó, intentando limpiarse cualquier rastro de lágrimas y sangre. En un tono que le sorprendió por su seriedad, soltó: —Quiero pensar que tú eres Rodolphus —el invasor se detuvo en seco—. No nos conocemos oficialmente, yo soy Tessie Prewett, un placer.

—Al menos eres de sangre pura —dijo sin quitarse la máscara y con un gesto de la mano, añadió—. ¿Hace cuánto que esto sucede?

—Vivimos aquí hace como 9 meses, desde principios de año.

Aunque no pudiera ver su rostro, notó cómo su atención se enfocó en su vientre.

—No estoy embarazada, si eso es lo que te estás preguntando.

Una pequeña risa se escuchó.

—Si Rabastan está aquí desde hace tanto, debe de haber buen alcohol en alguna parte.

—El mueble de la esquina, junto a los calderos de peltre.

—¿Quieres algo?

Negó con la cabeza.

La chica PrewettDonde viven las historias. Descúbrelo ahora