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- Hasta luego, Brooke - Se despidió Ivonne, la chica que me pidió que la ayudara en unos asuntos hoy, era muy divertida - ¿Qué harás el hoy por la noche? - Pregunto antes de que pudiera cerrar la puerta.

- Mmmmh - Me puse a pensar si tenía cosas pendientes para esta noche - Nada - Dije al fin - ¿Por?

- Unas amigas y yo iremos a pasarnos el rato al Caribe y pensaba en si quieres ir - Me sonrió amablemente.

- ¿Al Caribe? - Pregunte sorprendida.

- El Caribe es un club nocturno que está en el centro - Rodo los ojos divertida - No me digas que no lo conoces.

- He escuchado a los estudiantes de Wright Hall hablar de él, pero jamás pensé que era un club nocturno.

- Ahora lo sabes - Reímos las dos juntas - Entonces, ¿Qué dices? - Enarco ambas cejas.

- Claro - Sonreí ampliamente.

- Bien, te pasare a buscar a las ocho - Se despidió y se fue caminando por los pasillos hasta desaparecer al bajar las escaleras.

Cerré la puerta y mire el reloj, seis menos cuarto. Me puse a recoger el departamento, optaría por dormir, pero me conozco, si me ponía a dormir no despertaría a tiempo para arreglarme, asi que mejor me puse a organizar mi departamento que bastante desorganizado lo tenía.

Las horas pasaron y ya al fin había llegado la hora de ir al club, me había puesto unos shorts desgastados, un suéter blanco y unos vans, iba muy informal, todo lo contrario a ellas que iban con vestidos cortos y ceñidos a su cuerpo, tacones y maquillajes glamusoros.

- Oye - Ivonne me codeo - Hay un nene precioso mirándote desde hace rato - Comenzó a mover las cejas de forma graciosa, provocando mi risa - Ve háblale.

- No, tengo novio - Le dedique una sonrisa timida. Ella bufo.

- ¿Y eso que? Solo será un faje, estoy segura que el haría lo mismo - Apretó los labios.

- No - Fruncí el ceño enojada - Matt no es ese tipo de hombre - Hable firme.

Las comisuras de sus labios se curvaron hacia abajo a la vez que sus ojos se abrían.

- Vale, vale - Decía a la vez que se iba.

Solte un suspiro para después pararme de la silla y salir al balcón a tomar un poco de aire. La noche no estaba fría asi que no había problema.

Extrañaba mucho a Matt, no lo veo desde la navidad pasada. Extraño mucho sus abrazos y la forma en que me mira y me consuela cuando estamos viendo una película de terror y me asusto. Joder, estoy tan enamorada de el.

- Oye, preciosa - Una voz varonil hizo que me sobresaltara, me volte a ver de donde provenia, había un chico parado en la entrada el balcón, la luz era tenue, pero podía darme cuenta que era moreno y musculoso, y caminaba lentamente hacia mí - ¿Qué haces tan sola aquí afuera? - Una sonrisa coqueta apareció en su rostro.

- A usted que le importa - Fruncí el ceño.

Soltó una leve carcajada - ¿Eres dura, eh?

- Vete a la mierda - Lo fulmine.

- No me hables así, puta - Se acercó a mí y me acorralo en una pared cerca del borde el balcón - Te voy a follar bien duro para que aprendas a respetarme - Dijo a la vez que intentaba desabrochar mi short.

- Suéltame, cerdo asqueroso - Le escupí la cara. Me soltó una cachetada.

- Vas a ver ahora - Me intentaba subir el suéter.

Damnific ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora