El toque de la villana

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Desde el inicio del viaje solo miradas de desprecio fue las que recibió Amaris quien a los ojos del todo el imperio era una villana como las de los cuentos de hadas y que al igual que ellas tenían un final trágico

- Llegaremos dentro de poco.. usaremos un portal..- dijo con desdén el príncipe heredero

- Vaya hasta el final tienes tantas consideraciones conmigo y pensé que la amabas a ella..- dijo en tono burlón Amaris

- Cállate... simplemente ya no quiero verte mas y entre mas rápido me deshaga de ti la paz a la vida de Lorelei y a la mía será permanente

- Que tonto príncipe heredero... la paz no es permanente ni las tormentas tampoco...

- Tu como te atreves a hablarle así a su alteza..- dijo el secretario pues los tres iban en el carruaje

- Decir la verdad no es un pecado... además de añadir uno mas a mi lista no harán que me exilien del mundo

- Me alegra no tener que ver tu cara nunca mas..- dijo el secretario con arrogancia

- Si a mi también me alegra.. - dijo Amaris sonriendo

"Que tonta fui me enamore de un hombre como el que siempre me a visto solo como un estorbo en su paz pensé que mi amor y mis acciones sinceras llegarían a su corazón.. pero mi imagen ante sus ojos nunca cambio o simplemente el no la quería ver al verdadero yo"

- Su alteza hemos llegado..- anuncio uno de los caballeros

Sin darse cuenta el tiempo paso muy rápido y ya se encontraba en su nuevo destino con una sonrisa amarga Amaris suspiro

- Muy bien... que hacen aun sentados.. quiero bajar ya de aquí... puedo hacerlo antes que ustedes verdad después de todo soy una exiliada- les dijo poniéndose de pie

Ellos sin mas salieron del carruaje y luego ella que con una pequeña maleta la cual tomo con fuerza de su manigueta empezó a caminar hacia un destino que era incierto para ella

" Es hora de encontrarme a mi misma ... adiós Daymon... espero tener una mejor vida de la que tuve aquí.. madre por favor estés donde estés por favor no me dejes sola"

Con aquellos pensamientos y una fuerte pero cálida brisa empujándola Amaris salió del imperio Daymon, la tranquilidad e incertidumbre de su corazón fueron tan fuertes para opacar incluso la partida del carruaje y los soldados de su antiguo hogar

Caminando con pasos firmes pero con manos que temblaban como una porción de gelatina al ser tocada empezó a observar el lugar donde se encontraba parecía ser un pequeño pueblo donde la miraban con recelo

" Tal vez es tan evidente que e sido exiliada.."

Sin importarle el que dirán continuo caminado pero después de un rato llego a un parque donde decidió descansar

- Necesito saber donde estoy y también encontrar un lugar a donde dormir ..- de pronto una ráfaga de viento helado la hizo temblar de frio- Parece que aquí las noches son frías.. debo buscar una posada

Ella se puso de pie y se acerco apresuradamente a un hombre que lucia como un caballero al cual miraban como a ella como una amenaza

- Señor.. disculpe.. pero podría ayudarme.. - le dijo con esperanzas de obtener una respuesta

- En que le puedo ayudar..- dijo el hombre de mediana edad de forma muy rígida lo cual hizo poner mas cómoda a Amaris quien estaba nerviosa

- Espero no molestarle pero podría indicarme un lugar en donde pueda pasar la noche.. llegue recién hoy y no conozco nada de aquí..

- A tenido suerte señorita yo no soy de aquí tampoco

- Que quiere decir..

- Aquí los turistas no son bien recibidos si no tiene invitación por lo cual será un poco difícil que alguien hable con usted

- Oh ya veo..

- No se preocupe conozco un lugar no muy lejos de aquí en donde de seguro la recibirán.. después de todo aquel lugar no pertenece a ningún reino o imperio

- Perdón pero que quiere decir con que no pertenece

- Este lugar es muy especial pues su antigua dueña no permitió que sea conquistado por nadie y esta sumamente protegido con un poco de magia.. por el momento su nuevo dueño no a aparecido pero a diferencia de aquí reciben a los extraños después de un análisis con los brazos abiertos

" Rayos suena bien pero.. y si en aquel análisis descubren que soy exiliada por mis crímenes y no me dejan entrar.. "

- Y en que consiste aquel análisis- pregunto temerosa

- Bueno un mago revisa tu resistencia hacia la magia y es solo eso pues ya sabes que muchos tiene problemas con eso

- Oh enserio.. y el lugar esta muy lejos de aquí..

- Si nos vamos ahora podremos entrar antes de que cierren las puertas

- Señor puede llevarme allí

" Esto es arriesgado pero tal vez sea mi única oportunidad de empezar de nuevo o al menos sobrevivir... además en mi maleta tengo una daga servirá por lo menos para herirlo y huir"

- Descuide señorita la ayudare conozco mas que nadie aquella sensación de no saber que hacer... pues porque que veo las personas que la trajeron aquí no la quieren para nada

- Como sabe eso.. ósea que me trajeron

- Viéndola no creo que haya venido por su cuenta

- Si tiene razón pero eso ya es parte de mi pasado, estoy empezando una nueva vida

- Muy bien entonces sígame por aquí.. tengo un caballo extra que iba entregar hoy en aquel lugar así que por ahora sígame

- Si muchas gracias- Amaris tomo su maleta y siguió al hombre

Cuando llegaron en donde se encontraban los caballos ella abrió su maleta y fingiendo sacar un poco de dinero saco su daga y la guardo en su bolsillo

- Señorita permítame su maleta la atare a mi caballo

- Oh gracias por cierto quisiera darle esto..- ella estiro su mano y le dio algunas monedas de oro

- No le pedí dinero a cambio

- Considérelo como el  pago por prestarme el caballo

- Muy bien.. entonces sabe montar

- Por supuesto- con gracia y elegancia ella subió al caballo y ambos empezaron a ir por un sendero hacia su destino