Sempre com você - Versión Español

Cap 4

Mientras tanto, en Japón ya había caído la noche y después de disfrutar mucho durante el día, la pareja descansaba en la habitación del hotel. Manuel se había puesto sus cómodos pantalones cortos y estaba tumbado en la enorme cama, hojeando un libro que había ganado. En el baño Lucero se estaba pasando un producto por la cara para quitarse el maquillaje que llevaba, en cuestión de minutos salió y siguió admirando a su marido que estaba en el balcón viendo el ir y venir de la gente. Su espalda estaba desnuda, lo que atrajo aún más a su amada que con pasos lentos se acercó a él y lo abrazó por detrás, dando ligeros besos en sus hombros que se estremecieron al sentir sus caricias.

Inmediatamente Manuel se dio la vuelta y se encontró cara a cara con ella. Sonrió sólo con los ojos, sin ocultar su felicidad por tenerla tan cerca. Sin pensarlo mucho ni decir una palabra, las manos de Manuel acariciaron su espalda mientras sus labios se unían en un beso, con lengua y agarre. Se han detenido. Estaban jadeando.

Estoy preparada - dijo Lucero - quiero que me ames como nunca y que me hagas sentir la mujer más feliz del mundo.

Manuel le pasó la mano por la espalda y sin pensarlo mucho la tomó del brazo, sus piernas se enredaron en las caderas de él, ya sentía lo excitado que estaba. Sin detener su maravilloso beso y la maravillosa brisa del viento, Manuel le levantó la camisa blanca que llevaba puesta y le dio un suave apretón en las nalgas. Sus manos se enredaron en el cuello de él y parecían no querer soltarse nunca. Manuel sin mucho esfuerzo consigue bajarle las bragas rojas que llevaba y luego le baja los calzoncillos y la penetra lentamente haciéndola suspirar y morderse el labio inferior. Camina con ella aún encima y se sienta en un gran sillón que había allí en el balcón, sin pensarlo mucho aumenta las embestidas, sus pechos se balanceaban en constante ritmo según el movimiento que hacían.

Lucero acabó poniendo cara de dolor y Mijares se paró al mismo tiempo.

¿Te he hecho daño? - Pregunta preocupado y mirando hacia abajo nota un poco de sangre en las piernas de ella y en él también - Reina estás sangrando - Se quedó quieto.

Esto es normal mi amor, perdí la virginidad que conservé durante tantos años y todo fue tal como lo imaginé - Ella suspira y responde con calma - Pero vamos a ducharnos.

Se quita el top y va hacia el baño quitándose la ropa y quedando completamente desnuda. Mijares hace lo mismo y la sigue, en el baño ambos se meten y se enjuagan quitándose todo lo sucio. Mijares la voltea sin decir nada y la abraza fuertemente dejando que su cuerpo se ablande poco a poco con el calor que solo su cuerpo era capaz de transmitir, sus manos se dirigieron hacia lo que él tenía entre las piernas masajeando lentamente mientras lo besaba, sus manos hacían lo mismo entre las piernas de ella.

Quiero probarte - dijo Mijares tomando su mano y llevándola a la cama de la pareja.

Y siguieron con su locura amorosa, Mijares estaba encima de ella mientras sus manos clavaban las uñas en su espalda que ya mezclaba el sudor del calor con el agua del baño, haciendo líneas rojas.

Creo que.... - Lucero intentó hablar pero en vano llegó al límite y en segundos Mijares también explotó

Le da un gran beso en la boca y se acuesta a su lado.

Nunca pensé que sería tan maravilloso entregarme a ti, gracias por respetar mi momento y comprenderme. Te quiero Manuelito - dijo ella y se acurrucó en su bazo.

Manuel: Esperaría mil años aunque me quitara la vida, cuando mi cuerpo está en sintonía con el tuyo es lo mejor del universo. - Le da otro beso y suspira mostrando su sueño. 

***

Pasan cuatro años, Lucero llevaba ya cuatro años casada con Mijares. Era el año 2001 y muchos los consideraban la pareja de México, siempre rodeados de muchos fans y las cámeras. Estaban muy felices y más enamorados que nunca, hacía menos de una semana que Lucero había terminado su grabación para una gran telenovela de éxito llamada Mi Destino Eres Tú y Mijares terminaba sus ensayos para un gran espectáculo que tendría lugar en el Auditorio Nacional y que contaría con la presencia de Lucero, ambos hacían dueto  cantando dos hermosas canciones "El privilegio de amar" y "Cuatro veces amor". Era un lunes por la mañana, Lucero acababa de despertarse y se sorprendió de no sentir la presencia de Manuel en la cama.

Dios mío... no puedo esperar mucho, no quiero tener un ataque de ansiedad aquí mismo - repitió mientras se daba mil vueltas en el baño - Nunca he visto pasar diez minutos tan lentamente - suspiró aún a la expectativa.

Finalmente se detiene y respira.

No, no... No me lo puedo creer - Ella recoge su test de embarazo que estaba en la orina recogida minutos antes - ¿embarazada? ¿Voy a ser madre? - Incluso sin darse cuenta da varios gritos de euforia y camina de lado a lado sin reaccionar.

Hace una foto rápida y se la envía a su madre. Que a los pocos minutos recibe una llamada eufórica de ella.

Hija, estás embarazada, no puedo creerlo. Felicidades mi amor - Mamá León estaba aún más eufórica - ¿Y cuándo lo sabrá papá? Conociendo a Mijares te tendrá mucho cariño, su sueño es ser padre.

Mamá, aún no lo sé. Mi prueba dice que estoy de tres meses, tengo que asegurarme e ir al médico para ver cómo está mi bebé. Y si todo va bien, en menos de un mes hará un concierto en el auditorio nacional y si todo va bien allí le contaré esta noticia, tengo muchas ganas de saber su reacción. Este bebé llegó en el mejor momento de mi vida -  respondió Lucero mientras se acariciaba el vientre.

Mientras tanto, un poco lejos de allí, Mijares estaba sentado con unos amigos cantantes en un restaurante, celebrando su éxito en los últimos años. Estuvieron charlando mientras se tomaban unas copas. Los amigos que estaban con él empezaron a despedirse, dejándolo solo. Estaba concentrado en su bebida, pasando los dedos lentamente por el borde y pensando un poco en la vida. Cuando una mujer no muy extraña aparta la silla frente a él sentándose y mirándole fijamente.

Tú? - dijo sorprendido - ¿Cómo me has encontrado?

¿Por qué sorprender  Manuel? ¿Soy tan extraña? No quiero nada de ti, sólo que reconozcas a tu hijo. - La mujer dijo en tono serio.

Hijo? ¿Has bebido algo? No tengo ningún hijo. Nuestra relación hace tiempo que desapareció, y cuando me di cuenta de la tontería que había hecho le pedí que no me buscara nunca más. ¿Por qué apareciste años después de la nada? - Mijares ya estaba perdiendo el control.

Mira Manuel, esa noche que tuvimos resultó en un bebé que nació en mi vientre. Sólo no te busqué antes porque me dijeron que no hiciera esa estupidez, me dijeron que sería humillada por ti. Y cuando tuve el valor de enfrentarme a ti y hablarte del hijo que tienes, acababas de casarte y rehacer tu vida, fui por tu madre y me ofreció dinero para que me deshiciera de Daniel. Y yo... - Iba a continuar pero Mijares la detiene.

¿Daniel? Mira, no sé lo que has bebido. No puedes aparecer y decirme que tengo un hijo, esto podría arruinar mi matrimonio y mi vida. Esa noche nos prevenimos y no es posible que simplemente... te hayas quedado embarazada... - Suspira - ¿Estás segura? ¿Que este niño es mío? 

¿Quieres hacer una prueba de ADN? - Se ríe.

No, no tengo que hacerlo. Es que... yo... bueno - le da una vuelta a la bebida en la boca, necesito poner la cabeza calma y pensar un poco. Entonces vendré a ti para resolver esta situación, todo esto es muy difícil para mí, ni siquiera sé qué pensar e imaginar al respecto.

Mijares se levanta aturdido y se va.