ENCUENTROS DE MEDIA NOCHE 1

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Era una noche despejada en Luna Nova y Diana había decidido contemplar la noche, sin embargo temerosa de las reglas usó el hechizo de transformación para así con la apariencia de una pequeña gata de pelaje blanco y ojos azules poderse recostar sobre una de las ramas del árbol que había en el patio de la escuela. Al cabo de unos momentos no podía creer lo que estaba viendo, pues sin darse cuenta de su presencia, Akko su amiga que seguía sin poder volar había pasado en una escoba mientras se elevaba por los aires para detenerse y contemplar el cielo.

Akko no podía dormir, habían pasado apenas meses de su aventura contra la bestia mágica de la profesora Croix y aunque las cosas marchaban aparentemente de maravilla a la vista de todos, la pequeña castaña sufría cada día sin poderle decir a nadie su secreto. Tomó su escoba y como queriéndose acercar mas al cielo se elevo por los aires para finalmente reposar en el aire acostada sobre su escoba, al sentirse observada volteó nerviosa al patio y los pasillos de Luna Nova, pero no veía a nadie, finalmente en medio del patio pudo ver los ojos penetrantes pertenecientes a un pequeño animalito. Descendió acercándose con cuidado para no asustarlo hasta finalmente ponerse a la altura de la rama donde el pequeño gato descansaba.

- Hola gatito bonito... bonita noche, ¿no crees?

- ...

- Que bonito eres, ¿me dejas acariciarte? ¿tienes dueña? - Akko acercaba lentamente su mano al gatito procurando que este no se alejara de ella

- ...

- Sabes si te encuentran podrían castigar a tu dueña - Finalmente posando su mano sobre su cabeza comenzó a hacerle caricias debajo de su hocico, atrás de sus orejas en su lomo que sorprendentemente estaba muy relajado - Oh vaya, eres una gatita... no lo había notado, disculpa

- ...

- ¿También vienes a ver el cielo de la noche? ¿Puedo verlo a tu lado? - la castaña se acomodaba nuevamente sobre su escoba para posar la mirada en el cielo.

- ...

- Se que no me entiendes, pero déjame fingir que si por favor... me hace falta

- ... - Diana podía ver la tristeza en la mirada de su amiga y no se atrevía a decirle que era ella por temor a que lo mal interpretara.

- ¿Sabes? tienes unos ojos hermosos, me recuerdan mucho a los de ella

- ...

- Y por andar diciendo cosas así es que estoy en un lio del que ya no puedo salir. - Akko se detuvo de seguir hablando como meditando lo que había dicho y continuó su pobre intento de monologo. - lo siento, se que viniste a ver el cielo y que no tienes la culpa de lo que me está pasando... solo veamos el cielo juntas.

- ... - Diana sin decir nada, se levantó de la rama y dando un pequeño salto se posó sobre el pecho de Akko acomodándose para mirar a los ojos a Akko.

- Gracias pequeña gatita... ¿tienes nombre? no traes puesto tu collar... - Akko miraba a la gatita acariciando suavemente su pelaje. - ¿Te puedo llamar Celeste?, por tus ojos y por la noche que nos detuvimos a mirar el cielo juntas

- ... - Diana se levantó nuevamente, movida por sus impulsos y le dio pequeñas lamidas a su amiga en la mejilla.

- Jejeje eso se siente muy agradable... lo tomaré como un si - Levantando a Celeste en brazos acerco su rostro para chocar su nariz con la suya. - Muchas gracias... Ya me siento mucho mejor gracias a ti... debo volver antes de que alguien me descubra y te recomiendo que hagas lo mismo o regañaran a tu dueña... - Levantando nuevamente a Celeste la acomodó delicadamente sobre la rama en la que estaba cuando la encontró - ¡Nos vemos Celeste! espero verte pronto - Y descendiendo nuevamente hasta llegar al piso se aseguro de que no hubiera nadie al rededor para entrar silenciosamente a los pasillos de luna nova en dirección a su habitación.

Diana no sabía que pensar de ese pequeño monologo de su amiga, su semblante deprimido distaba mucho del alegre rostro con el que la saludaba cada mañana y con el que desayunaba junto a sus amigas. Espero unos momentos para asegurarse de que no se encontraría a Akko en el camino y bajó del árbol para deshacer la transformación y volver a su habitación.

LA VERDAD OCULTA DE AKKODonde viven las historias. Descúbrelo ahora