Narra Maite:
Salgo del boliche pensando en Nacho. Que enigma este pibe. Podría estar horas hablando estupideces con él. Nunca me imaginé que sería de esta manera. La verdad que lo juzgué por lo que sé de Ecko y me olvidé que atrás de todo eso es un chico común y súper simple.-Tomás:- interrumpe mis pensamientos- lista nena? - me espera apoyando en la puerta de su auto
-Maite: lista- digo poniéndome mi saco-Tomás: ni te gastes porque te va a durar muy poco puesto - me hace reír siempre con estas frases cuando estamos solos.
Llegamos a su departamento y en el momento que se cierran las puertas del ascensor me acorrala contra una esquina y comienza a besarme con furia.
Esta vez me cuesta seguirle el ritmo, me toma de los costados del rostro y me sostiene para que no me aleje ni a tomar más aire.
La puerta se abre y me va guiando caminando de espalda hasta su puerta sin cortar el beso. Le saco la llave del bolsillo y abro su departamento.
Aprovecha que me doy vuelta para besarme el cuello y comenzar a sacar mi blazer. Vamos dejando las cosas en la mesa, mi bolso, mi abrigo y me sigue guiando hasta la habitación.
Me sienta en la cama y extiende una de mis piernas para bajar el cierre de mi bota. La saca con más facilidad de la que pensaba y hace lo mismo con la otra.
Vuelve a besarme y me paro para poder sacarle más fácil lo que tiene puesto. Lo empujo para que se siente en la cama y me coloco sobre sus piernas con las mías a los lados.
Creo que hace bastante tiempo que no estamos juntos, porque me besa con una violencia... su lengua recorre mi boca mientras que sus manos presionan mis glúteos con fuerza. Me hace levantar los brazos y saca mi vestido. No tengo corpiño así que solo me queda una prenda.
Tomás: extrañaba tu cuerpo - dice bajando sus besos por mi pecho. Tomi siempre me dice cosas tiernas, me trata como una reina y lo más importante me llama para tener sexo casi una vez a la semana.
Ya ni me acuerdo como empezó todo, yo era nueva en el equipo, nos tocaba hacer varias tareas juntos. Yo intervenía mucho en las disposiciones de los predios y él era el encargado de todo el mobiliario y el personal de armado así que íbamos a todos lados juntos.
Nunca creí que esto terminaría pasando. Vivíamos tirándonos indirectas pero siempre era en tono de broma. Hasta que un día se fue todo de las manos y me gustó lo qué pasó.
No pensé que se repetiría, él es seis años más grande que yo, pensé que se había sacado las ganas de estar con la pendeja nueva del trabajo y nada más. Pero me siguió buscando una y otra vez y así llegamos hasta este momento.
Me levanta y me tumba con la espalda sobre la cama. Toma un preservativo de la mesa de luz, se lo coloca y se posiciona encima mío. Suelto un gemido cuando entra en mi.
Que esto sea sin compromisos es lo mejor, asi no complicamos las cosas en el trabajado o varias veces salimos todos juntos a bailar, lo vi con otras chicas charlar muy cerca pero no me dio celos.
Él si es un poco más posesivo, dice que lo hace para cuidarme que los chamulleros no se me acerquen jaja. No me espantó a nadie interesante así que no me molesta. Se que lo hace en broma, o eso es lo que me dice.
Guía el ritmo de mi cadera con la suya. Junta mis manos sobre mi cabeza y aumenta la velocidad. Ya ni me besa, solo apoya su boca sobre la mía, porque nos cuenta respirar.
Tomas: hermosa - le sale apenas audible.
Maite: seguí así - me suelto de su agarre y lo tomo del cuello para soportar el dolor de los músculos. Me rodea con sus brazos ya que tengo casi toda la espalda suspendida.
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Escape [Ecko]
RomanceNarra Ecko: Es mi impresión o se acerca más? Está concentrada observando el tatuaje y a mi no me salen las palabras, me quema cada centímetro que va tocando. Maite: -levanta la vista y sonríe- me gusta Mi mente piensa rápido las opciones. Pero so...