My love and my life [TERMINADA]

✨18✨

🍬🍬🍬2 AÑOS DESPUÉS...🍬🍬🍬

— ¡Sun Mi!— Corrí hacia mi hermana para abrazarla como nunca. La había extrañado demasiado. 

— ¡T/n! ¡Ya te extrañaba demasiado! Pensé que moriría sin mi pequeña hermanita.

— No exageres, Sun Mi. ¿Oye y mi bebé?

— Pues yo que sé. Tú viniste corriendo, creo que ya se te perdió.

— Estoy detrás de ti, amor.

— ¡Mi amor!— Me lancé a él y lo abrace fuerte. Fueron cinco minutos, pero ya lo extrañaba.

— Me romperás las cosquillas si sigues así. 

— Ups. Bueno, Sun Mi, ahí lo tienes. Te dije que era cierto.

— ¿No te creyó?— Negué e hice puchero— Bueno, seguro pensó que con lo loca que estás, te quedarías soltera.

— ¡Bebé malo!— Y le di un pequeño golpe en la nuca. 

— Yah, solo bromeaba. Estás loca, pero así te quiero.

— Wacala. Guarden sus calenturas para cuando estén a solas, ok?

— ¡Sun Mi!— Le grité sonrojada.

— ¿Que dijo?

— Eh... Pues que nos vemos muy lindos juntos. 

Alzó una ceja y me miró. No me la creyó.

A quien quiero engañar. Le enseñé mi lengua, así que me fregué.

— Si entendí un poco, T/n, no todo, pero si entendí lo primordial.

— Olvídalo, amor. Está loca.

— Como tú.

— ¿Quieres morir?

— No, señora.

— Mucho mejor, bebé.

Me tomó de la mano y fuimos a su casa. La idea era dejar todo ahí y luego salir a pasear un rato para "volver" el tiempo.

— ¡¿Suho, que haces?!

— ¡No! ¡¿Tú que estás haciendo?!

— ¡No! ¡¿Tú que estás haciendo?!

— ¡No! ¡¿Tú que estás haciendo?!

— Bien, paremos aquí.

— Sí, mejor. ¿Ya tienes todo listo? 

— Suho, solo vamos a ir al centro comercial, no a bailar con la reina de Inglaterra. 

— Igual, porque después estamos en apuros, corazón.

— Ok, ok, no negaré eso, bebé.

Sonrió y salimos de la casa para ir al centro comercial. Hablábamos de muchas cosas mientras recordábamos todo lo que vivimos hace tres años cuando vivíamos aquí. 

— Está lleno. Me largo.

— Oh, no, amor. Tú quisiste venir, te aguantas.

— ¡Pero, Suho!

El chico no hizo caso a mis súplicas y me arrastró dentro. Que fregado. 

— Mira— Me señaló a... ¿Una pista de hielo? 

— Ah, sí que bien. Vámonos tengo hambre.

— Ash, amargada. Vamos a patinar, pues. Luego te compro lo que quieras.