five

111 17 15
                                    

러시안 룰렛 Russian Roulette

Un reproche escuchó de parte de la maestra que lo sacó de su estado de furia. Jimin suspira cansado y se arregla la camisa. Al verla ella mostró una expresión de agrado al enterarse que se trataba del alumno Jeon y el nuevo, que le habían anticipado el día anterior. La profesora dejó pasar a los dos. Jimin se dirigió a su asiento y Hoseok estuvo varado en el pizarrón enfrente.

Algunos comenzaron a murmurar sobre la presencia desconocida. Hoseok solo lanza una mirada afilada. Y los alumnos tiemblan de sus sillas con el contacto ocular de aquel alfa, que sin decir nada cualquiera lo tomaría como '' No te metas conmigo sino eres hombre muerto''.

—Jung, puedes presentarte.- menciono la profesora.

El castaño puso sus manos en sus bolsillos y se balanceaba de su lugar. Dio un ligero bostezo y de reojo se fijaba en Jimin, que esté le había mandado insultos, y ¿cómo lo sabe? por el movimiento de los labios del rubio, que no soltaba ninguna palabra, pero Hoseok sabía exactamente qué era lo que decía. Y no eran para nada palabras pintadas de flores y amor.

—Soy Jung Hoseok, vengo de la preparatoria Sal y espero que nos llevemos bien o algo así-dijo rascándose la nuca, sin importarle mucho.

Jimin saca la lengua, asqueado al escuchar el nombre y apellido completo de ese alfa. Hoseok chasquea los dientes y le muestra su dedo medio. Después, Jimin hace lo mismo parándose de su asiento.

Algunos alumnos con cara de asombro se miraban entre sí al nunca ver esa faceta del rubio, pues los buenos modales se fueron por el retrete.

—Oh, vaya parece que se llevan bien. Jung siéntate en el asiento vacío, al lado de Jimin. - dijo la maestra.

—No hay otro asiento. No quiero de casualidad pisar a este enano.- mencionó el joven alfa en tono burlón.

Jimin estaba apunto de cometer asesinato si escuchaba una palabra más de salir de la boca del alfa.

Antes que el castaño diga otro comentario ofensivo, la profesora lo arrastra hasta el asiento donde se encontraba cerca del rubio, a lado derecho.

Hoseok detesta este ambiente tan incómodo, quiero que la tierra se lo coma entero y lo escupe al otro lado del mundo. Si es posible en Argentina, aunque no conocía nada de ahí. Pero escucho que hay ricos asados.

—No te acerques tanto o te golpeare lo que te queda de tu rostro.- dijo Jimin mostrando su puño cerca de la cara del alfa.

—Esa es mi línea, escarabajo. No quiero que me contagies de algo, así que aléjate.- saco la lengua y trata de gruñir, pero se contiene.

La profesora da golpes en el pizarrón para que presten atención a su clase e indica que saquen los libros para la siguiente lectura.

Hoseok busca en su maleta. Pero se detiene, recordando que como es nuevo no tiene ningún libro a la mano.

—¿Algo pasó, Jung?- pregunto la profesora.

—No es que aun no tengo el libro, disculpa.

—Idiota .- susurro el rubio.

Hoseok agarró un pedazo de su cuaderno, se lo metió a la boca, masticó un poco y le escupió al rubio. El papelito en forma de bolita y llena de baba estaba pegada en la mejilla del rubio, este muestra una mueca de desagrado. Y le tira uno de sus lapiceros pero el castaño lo esquiva, sorprendido por sus reflejos salidos de la película de Matrix  que desgraciadamente aparecen cuando menos conviene a la situación

—Puedes compartir con Jimin.

Hoseok miro concertado a la profesora para después decir:

—No es necesario, lo puedo hacer con la la compañera de al lado ¿cierto compañera?

𝐔𝐧 𝐚𝐥𝐟𝐚 𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐉𝐢𝐦𝐢𝐧 [Hopemin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora