- No, cabrón.
- Si, cabrón.
México abrió como platos los ojos, mirando a su pareja, Argentina.
- ¿Enserio?
- Si. Hace dos horas lo vengo diciendo.
- Seré... padre... ¿Contigo? - Sus ojos se iluminaron.
- Si, mi tamalito.- Sonrió el Argento.- Vamos a ser papás.
México no emitió más palabras y abraza a la lucecita de su vida, dando a entender que estaba más que feliz por la noticia. México realmente quería ser padre, y si era con Argentina, más lo deseaba.
- Te amo mucho, mi vida.- México acercó su rostro al de su pareja, cerrando sus ojos al sentir la frente del Argento tocando la suya.
- Yo igual, corazón.
....
Jeje