Sidenotes - [ En otra vida ]

Te odio... no realmente

A/n: ¿Qué acabo de hacer? ... No sé.

Créditos: A mí, mientras escuchaba Celoso- Lele pons y se me ocurrió esto.

Creo que ví el nombre del ship en un post de ig ... Aunque no es como que Rojarias o Reingrojas me terminen de convencer.

Ubicado en la línea de tiempo, esto sucede después del final de Nuestra vida, final que aún no escribo pero en fin... XD

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Sam estaba en una gala organizada por L-Corp, reemplazando a Lena, quién tuvo problemas en casa y desgraciadamente no pudo asistir.
La CFO estaba usando un vestido negro y ajustado, de los que no suele usar porque son super incómodos, pero que este tipo de eventos requería.

Con una copa de champagne en la mano, recorrió el lugar ofreciendo sonrisas a todos los inversores que se cruzaba y entablando pequeñas conversaciones aquí y allá.

Comparada con la primera vez que Lex la llevó a una gala de la empresa, ahora todo era mucho más fácil.

Estaba conversando con uno de los accionistas sobre los futuros proyectos de L-Corp, cuando un hombre viejo que Sam reconocía como uno de los más molestos de todos los inversores, se acercó, colocando su mano en su espalda baja.

Antes de que pudiera alejarse del toque no deseado, alguien más tomó la mano del hombre y la retiró.

— Sin tocar, por favor. — Dice Andrea, con una sonrisa de advertencia.

El hombre parece avergonzado al escucharla, se disculpa y busca una excusa para retirarse.

Sam alza una ceja al ver a Andrea.

Al recordar que no estaba sola, mira al accionista con el cual estaba hablando y le da una sonrisa de disculpa. — Disculpa Mark, terminemos nuestra charla en otro momento.

El hombre está de acuerdo y se retira, agradeciéndole a Sam por su atención.

Sam vuelve su atención a Andrea. — Gracias por lo de antes. Aunque, yo misma podría haberme hecho cargo.

— Voy a quedarme con el gracias. — Andrea le da una sonrisa victoriosa. — De nada.

La mirada de Andrea se pasea por el vestido de Sam y la morena lo nota.
—  ¿Qué quieres, Rojas?

— Nada ¿Una ya no puede disfrutar la compañía? — Pregunta, inocentemente, la CEO.

Sam resopla, sabía muy bien que la mujer no era tan simple como para estar aquí solo para disfrutar de su compañía.

— Pensé que tu novia te acompañaría. — Comenta Andrea, tratando de lucir indiferente mientras miraba a la morena.

Sam frunce el ceño levemente ¿Cuál novia? Entonces recuerda la vez que se cruzó a Andrea a la salida de un bar. Estaba saliendo en compañía de una mujer, así que supone que de ahí la confusión.

Ella quiere reírse un poco por la actitud de Andrea pero simplemente sonríe. — ¿Celos?

Andrea se burla al oír tal sugerencia. No había una buena razón para estar celosa, sólo porque compartieron una que otra noche noche no quiere decir que Andrea se hubiera enamorado de la morena o algo así.

Andrea suelta un bufido, levanta el mentón un poco y sonríe con arrogancia mientras mira a Sam. — En tus sueños, Arias.

Y es su actitud de superioridad lo que hace que Sam quiera jugar con ella un poco. — ¿En serio? Porque aunque finja no darme cuenta, puedo sentir tu mirada sobre mí cuando bailo con otras personas.