You and Me

Epílogo 3

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Sana y Yuri
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—Mamá, mamá. Mira. —decía emocionado Haruki mostrando el pequeño gato que tenía en brazos y al parecer estaba incómodo por la posición en que era tomado.

—Me arañó. —se quejó Hime de tres años con los ojos inundados de lágrimas y sus labios mostrando un gesto de molestia contenida.

—Oh Hime, se debió asustar y por eso te rasguño. Pero es muy lindo, mira. —indicó acariciando la cabecita del animal que ronroneo ante el tacto tan amable.

Haruki que aún sostenía al gato sonrió, le alegraba saber que ese gato quería a su mamá, no entendía como alguien podría odiarle, si era una persona tan buena. Su tío Katsuki molestaba a su mamá e hizo cosas malas que lo entristecieron mucho, por eso siempre se vengaba cuando el rubio le gritaba a su madre que era tan amable, hasta el punto de tratar bien al hombre. Su abuelo Hisashi decía que a los malos debían ser castigados o darles una lección y como él no tenía quirk solo podía hacerlo con su fuerza como le enseñaba su abuelo Enji.

Hime, alzó su mano rasguñada y acarició al gato que en esta ocasión no le araño.

—Es bonito.

—Dijiste que era feo. —acusó Haruki.

—Es porque me arañó.

—Haru, no seas malo con tu hermana. —dijo Izuku mirándole de forma seria al niño que infló sus mejillas y miró a otro lado.

—A veces es molesta, yo no quería una hermana.

—¡Haruki no me quiere, mamá! —dijo llorosa Hime que recibió el abrazo de Izuku.

—Sí te quiere princesa, solo no te comprende y necesita tiempo para hacerlo.

Haruki le saco la lengua a Hime que ocultó sus ojos llorosos y se aferró a la pierna de Izuku que suspiró, al mismo tiempo que apagaba las parrilas con el curry de la cacerola y cargar a su hija mientras Haruki le seguía con el gato en brazos cuando dijo que iba a curar el rasguño.

—Deberías ser más amable con Hime, Haru. —pidió Izuku.

—Acapara a papá.

Izuku al escucharle se rio levemente, pues Shouto decía que sus hijos le robaban su atención. De cierta manera eso le parecía divertido, sus hijos les querían, pero cuando uno prestaba más atención a otro, ellos buscaban la atención ya fuera de él o Shouto, y su esposo de por sí buscaba su atención por ser muy cariñoso con él, demasiado debía admitir, tosió ante su vergüenza.

Sacó el pequeño botiquín para buscar el algodón que remojo en alcohol para limpiar el rasguño de Hime.

—Acaparas a mamá. —atacó Hime con su ceño fruncido chillando por el ardor del líquido.

—Lo lamento linda. Ninguno de ustedes nos acapara, solo quieren atención y eso está bien, pero deben aprender a llevarse mejor como su tío Kacchan y yo.

—Tío Kacchan, es grosero contigo.

—Tío Katsu es raro, parece caricatura. —Izuku se rio ante el comentario de Hime, le puso una bandita y beso su frente y para que Haruki no se sintiera menos querido, recibió una bandita en la misma zona que su hermana y le dio beso en sus cabellos.

—Su tío Kacchan es un tanto especial, pero eso no importa. Yo los amo por igual mis pequeños.

—Te amamos, mamá. —dijeron los dos abrazando a Izuku, pero Haruki parecía receloso con Hime que le sacó la lengua.