˗ˏˋ 𝕵𝖊𝖔𝖓𝖌𝕾𝖆 ˎˊ˗
↳❝La llegada de esa pequeña cachorra llamada Jeongyeon a la vida de Sana fue como la llegada de un hermoso ángel.
Y en ese mismo momento las dos tuvieron una conexión angelical muy sorprendente. Tanto que Sana...
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Después de que Momo fuera adoptada por Dahyun y se hubiera ido de la casa de Sana, las cosas ya no estaban tan desordenadas y sucias como antes, ya que la japonesa había impuesto reglas que la híbrida trataba de acotar a la perfección.
Lo intentaba...
A pesar de que las últimas semanas hayan transcurrido cosas que Sana nunca pensó que le llegarían a pasar, no se arrepentía de tener a Jeongyeon en su vida, la pequeña cachorra alegraba de una manera inimaginable las mañanas de la japonesa, haciéndola sonreír en cada momento, y calmandola cuando estaba triste, Jeongyeon la ayudaba mucho.
A Sana le divertía ver como la híbrida trataba de preparar panqueques viendo un tutorial de YouTube, su cocina estaba hecha un desastre llena de harina, leche y claras de huevo salpicadas por todos lados, pero los ojos de la japonesa solo se fijaban en Jeongyeon.
Se reía en silencio, le parecía completamente adorable como la híbrida estaba llena de harina por su rostro y sus orejitas.
ㅡ ¿Qué te parece tan gracioso? ㅡ dijo Jeongyeon con el ceño fruncido
Desde hace unos minutos se había dado cuenta de la japonesa la miraba con atención y se reía, ¿acaso se estaba burlando de ella?
ㅡ Me pareces tierna
Las palabras salieron de la boca de Sana sin que se diera cuenta y sintió un calorcito asomarse a su mejillas que tomaron un color carmesí. Jeongyeon se quedó sorprendida sobre lo que acababa de escuchar y se sonrojó casi de inmediato.
ㅡ No soy tierna ㅡ respondió con un puchero formándose en sus labios.
ㅡ ¿Necesitas ayuda? ㅡ dijo Sana retomando su cordura
ㅡ S-si... ㅡ susurró suavemente la híbrida
Sana se acercó a la cocina tomando un recipiente para hacer una nueva mezcla mientras Jeongyeon la miraba con atención y no precisamente a la mezcla de panqueque que la japonesa estaba haciendo, estaba observando a Sana; nunca se había fijado es lo hermosa que era su dueña, se sentía de alguna manera afortunada de tenerla.
ㅡ Y así es como se hace una mezcla perfecta para los panqueques perfectos... ㅡ sonrió satisfactoriamente ㅡ ¿Jeong? ¿Jeongyeon? ㅡ llamaba a la híbrida pero parecía que ella estaba en un transe mientras la veía fijamente
ㅡ ¿Eh? Dime... ㅡ le respondió la híbrida mientras salía del transe el que había caído gracias a la belleza de la japonesa
ㅡ Terminamos los masa de los panqueques
La híbrida se atinó a decir solo un "ohh" y acompañar a Sana la estufa mientras colocaba la sartén para que se calentara y poder freír los panqueques. Jeongyeon mantenía su distancia con la estufa pues le daba miedo el fuego, así que Sana tuvo que optar por freír los panqueques mientras que la cachorra observaba desde una distancia prudente.
Sana colocó un poco de la mezcla sobre la sartén caliente viendo como el panqueque empezaba a cocinarse, esperaba pacientemente que se cosiera de un lado para darle la vuelta, y cuando lo logró hacer no dudo en usar sus habilidades para hacer que el panqueque volará alto, escuchó un "wow.." por parte de la híbrida lo que la hizo sonreír inconscientemente.
Jeongyeon se acercó un poco más a Sana hasta llegar hacia su espalda para posar su mentón en el hombro de la japonesa haciendo que esta se ponga nerviosa y estática al sentir el frío contacto de la híbrida y su cálida respiración cerca de su oído el cual le causaba un leve cosquilleo.
ㅡ Huele delicioso ㅡ habló la cachorra viendo como Sana sacaba el primer panqueque se la sartén y procedía a hacer otro.
Sana le ofreció el primer panqueque a Jeongyeon quien sorprendida por el acto amable de la japonesa aceptó con alegría derramando un poco de jarabe de maple sobre el panqueque y decorándolo con fresas y crema chantillí.
La híbrida lo comía gustosamente y a Sana le alegraba que la cachorra disfrutara de su comida, se le veía muy feliz que inmediatamente fue contagiada por eso.
ㅡ Edta delitioso ㅡ dijo Jeongyeon mientras tenía un bocado de postre en su boca.
ㅡ Me alegro que te guste ㅡ le contestó Sana mientras se sentaba frente a ella para poder disfrutar de su panqueque.
Jeongyeon terminó rápidamente, agradeció a Sana y dejó su plato en el lavabo para echarse en el sofá y ver televisión.
La japonesa esbozó una sonrisa en sus labios, le gustaba la actitud despreocupada de ella.
Le gustaba tenerla en casa.
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