Dos Polos Intensos

Cap.9 - Cambios de humor

Mike

La reunión ha sido un éxito, nuevos clientes para mi negocio y seguimos sumando proyectos para el futuro. Sin embargo nesecito relajarme un poco porque no puedo quitarme de la cabeza la escena de esta mañana con Scarlett.

Verla de aquella manera tan vulnerable ante mi contacto solo hace que tenga pensamientos lascivos con ella y el calenton que tengo acumulado en mi entrepierna sea permanente.

Por otro lado, no debería seguir tirándole los trastos, más que nada porque no creo que Scarlett este dispuesta a jugar a mi juego. Sé que ella no lo aceptaría y yo no estoy preparado para meterme en una relación.

No podría, no después de todo lo que he visto y vivido con mi desastrosa familia.

Debería salir a despejarme algún sitio y beberme un buen whisky. Sin pensarlo mucho saco mi móvil del bolsillo y mando un mensaje a Scar.

— Llegaré tarde a casa, deberías coger un taxi, tengo una copia de las llaves en la oficina principal, la secretaria te las dará.

— Vale... ¿y la dirección? Recuerda que siempre voy contigo...

— Ahora te envío la ubicación GPS.

Es lo mejor, mantener las distancias. Si la viera esta noche no podría controlarme y la estamparia contra la pared. Le envío la dirección en un enlace de Google.

La vida nocturna en el centro de Boise es de lo más activa, a pesar que hace frío, la gente tiene ganas de marcha. Estaciono mi coche en un famoso Pub de la ciudad, me introduzco en el lugar, acercándome a la barra y pidiendo un Johnny Walker con hielo.
Saboreo del primer trago, girandome para mirar mejor el ambiente del lugar. Algunas mesas están llenas, mis ojos se percatan de una chica rubia que baila sola con una copa en la mano.

El contorneo de su cuerpo al ritmo de la música hace que me levante de mi sitio y me acerque para entablar conversación. Ella al percatarse de mi presencia, me sonríe y su mirada me hace saber que no le soy indiferente.

La noche promete ser movida e intensa, lo cuál por algunas horas elimino de mi mente la escena con Scar y me concentro en regalarle el oído a está desconocida. Despierto en una habitación de mi hotel que he usado con esta chica...no recuerdo si se llama Laura o Lara. Que más da por lo que me dijo ella también necesitaba olvidar y solo quería disfrutar.

Lo mejor de las relaciones de una noche es que no tienes que explicar nada a nadie, disfrutar del momento y salir renovado del encuentro carnal.

Son las cuatro de la mañana y voy directo a casa para ducharme, cambiarme de ropa e ir al trabajo como me gusta ir elegante. Entro con cautela de no hacer mucho ruido para no despertar a Scar...pero antes de adentrarme a mi habitación, me doy cuenta que el salón tiene la luz encendida, supongo que ella se la dejaría. Estoy a punto de decirle a Alexa que apague todas las luces y puedo ver en el sofá a una Scar plácidamente dormida echa una bolita con un pantalón de pijama corto que muestran sus bonitas piernas.
Se le ve tan tierna de esta manera que me quedaría observándola por un buen rato, muevo mi cabeza de lado negando ese pensamiento. Doy la orden a mi asistente de apagar todas las luces de la casa y con el teléfono móvil me alumbro hasta llegar a mi habitación.

Me ducho y con el cuerpo limpio me tiro en mi cama para dormir al menos una hora antes de irme a trabajar.
El sonido del móvil hace que me despierte.

— Joder si solo he pestañeado...— me digo a mi mismo.

Me pongo mi ropa formal, me peino y me echo uno de mis mejores perfumes para que el olor no se vaya en todo el día.
Salgo de mi habitación y veo que en la cocina no hay nadie, es raro que Scar no esté aquí tomando un café.