Mejor lejos que cerca

53 6 12
                                    

Scarlett

Salgo de la oficina de Mike con mucha prisa he quedado con Estela para comer juntas.
En el transcurso al hotel, no puedo dejar de pensar en ese beso tan exquisito que nos hemos dado. Estoy jodida me gusta más de lo que debería y eso me aterra porque Jess ya me había advertido en el pasado sobre él.

Por otro lado deseo dejarme llevar y tomármelo como una "aventura"... no sé tengo un lio en la cabeza porque sé muy bien que Mike Stewart lo único que quiere es follar. Una alegría al cuerpo no me vendría nada mal, sin embargo el temor se apodera de mí por la manera en el que mi cuerpo reacciona a su tacto.

Estela me esta esperando en la esquina del hotel. Ella se ve muy animada y con ganas de contarme como le ha ido la mañana. Hablamos de cosas triviales hasta llegar al restaurante, de vez en cuando se pierde en la pantalla de su móvil contestando a varios mensajes que escucho que le llegan.

Me hace un comentario acerca de esto...

— Estoy alquilando una habitación de mi apartamento y la inmobiliaria me tiene loca con rebajar el precio.

— ¿Y cuanto quieres por la habitación?

— doscientos cincuenta dolares al mes, además que esa habitación tiene baño privado.

No me parecía nada caro y le sonrió porque creo que es momento de alejarme de Mike, además que no puedo estar viviendo con él que solo hace confundirme más.

— Estela, me encantaría ser tu inquilina...

Ella me sonríe y puedo ver en sus ojos que la idea le encanta. Estela es una tía genial y estos días hemos congeniado muy bien.

— Que mejor inquilina que tú, encima trabajamos juntas y nos acompañariamos.

Afirme con la cabeza...y me decido a contarle lo que me paso.

— Estoy muy agradecida con Mike porque me ayudo en un momento muy delicado de mi vida pero no quiero seguir aprovechandome de su buena fe.

Entonces ella me hizo la pregunta...

— ¿Vives con él? A ver Scarlett, nos habíamos dado cuenta de que llegabais juntos. Pensábamos que teníais algo pero en la fiesta dijeron que erais como familia y además que Giorgina estaba ahí también. Y a ti no se te ve una tía que comparta hombre.

Entonces le cuento todo lo que me había pasado.

— Realmente pensaba quedarme poco tiempo en este estado pero en Miami no tenía trabajo y empezaría desde cero. Aquí me siento a gusto en el puesto que estoy desempeñando y además que le ayudo a Mike, es una manera de pagar mi deuda con él.

— ¿Y tienes familia en Miami a parte de Jess?

— Mi madre pero no puedo contar con ella— Dije sin más.

Realmente la relación con mi madre no era nada buena. Ella es alcohólica y vive de la paga que recibe por su viudes. Por eso cuando mi hermano y yo cumplimos la mayoría de edad nos largamos de su casa.

— Si quieres puedes quedarte ya esta noche, te acompaño a la casa de Mike y cogemos tus cosas.

Asentí con la cabeza contenta, le obvie  a Estela los juegos que tengo con Mike y por supuesto los besos. Mi plan es huir de su lado para tener un trato cordial de Jefe y empleada.

Llegamos a mi nuevo hogar con maleta en mano y Estela muy contenta por ser su nueva compañera.

Después de cenar y mirar un poco la tele me sentía con la obligación de enviarle un mensaje a Mike.

Dos Polos IntensosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora