Nerushima es la hermana mayor de su pequeña familia, la cual con el tiempo a sufrido de traumas, pero al momento de conocer a dos pandilleros en espesifico su vida se iluminará un poco... O eso es lo que parece.
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Ningún personaje me per...
Después de que el Doctor se fuera lo único que escuchaba eran los sollozos de Draken preguntándose quien podía haberme hecho eso, sabía que mikey y yo teníamos tiempo de haber terminado, así que el no pudo haber sido el responsable de todo. El horario de visitas ya había terminado y Draken se terminó llendo dejándome sola, abrí mis ojos en cuanto se fue, recordé todas las palabras del doctor, estaba llena de tristeza pero era la primera vez en que no derramaba lagrima alguna.
Arranque aquellos medicamentos que me habían puesto atravez de mis venas, dolió, pero a estas alturas ya me daba igual, le levante poco a poco, me dolía todo, mas mi vientre. Mis pies tocaron la fría y blanca cerámica del hospital, tomé mi ropa que estaba en la esquina de la habitación dirigiéndome directo al pequeño baño que había, al entrar lo primero que vi fue mi reflejo frente al espejo, mi piel estaba más blanca de lo que ya era, mis labios nisiquiera tenían color, estaban secos y poco rotos, tenía grandes ojeras de una tonalidad verdecina, mi cabello estaba un poco desordenado. Parecía una completa muerta, desearía estarlo y no sólo aparentarlo.
Quite aquella bata de hospital de mi cuerpo, seguía teniendo las marcas de golpes sobre mi cuerpo, recordar ese día me daban ganas de volver a llorar, traté de ignorar aquel pensamiento pasando a cambiarme, pero sin darme cuenta mis ojos volvieron a soltar lágrimas.
Salí de aquella habitación sin decir nada, ya no quería saber de nadie, no quería que nadie me viera o me preguntara que fue lo que sucedió, de nada me serviría decir lo que me pasó si nadie me creria, nadie creria las palabras de una estúpida niña de 16 años que no sabía hacer nada por si sola.
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Al llegar a casa todo estaba igual de vacío que antes, ya no era la casa cálida y llena de vida que era antes, ahora solo era una casa sin vida, fría y sola. Entre incomoda, no me era de mi agrado regresar al lugar donde habían abusado de mi. Entre a casa sin quitarme los zapatos, realmente ya me daba igual todo, solo escuchaba rechinar un poco la madre a del piso, miraba cada parte de la casa, tomé un poco de valor para entrar a la cocina, las compras que había hecho aún seguían ahí, algunas estaban por el suelo o fuera de lugar. Levante todo colocándola en la pequeña barra que había en la cocina, me percate de algunas manchas de sangre que había por el piso, justo donde me había pasado aquello. Otra vez volví a soltar en llanto, ni siquiera podía estar en mi propia casa sin sentirme segura, solo quería que todo esto acabará, quería desaparecer, ir lejos de todo y empezar desde 0, tal vez así por fin lograría ser feliz.
~ir lejos~
~huir~
~escapar~
~Lejos de todo~
Aquellas palabras no salian de mi cabeza. Tal vez ir a un nuevo lugar podía ser mejor, no tenía nada pero tampoco tenía nada que perder, ya había perdido todo lo que tenía, que más me podía pasar si tan solo una vez en mi vida siguiera las voces de mi cabeza.
Subí a mi habitación por una maleta, tomé lo indespensable, ropa dinero y algunas otras cosas. Tenía miedo de tomar esta desicion, no sabía que me podía esperar a futuro, solo quiero sentir que por fin hago bien algo, que no volveré a salir dañada, solo quería vivir nuevamente en paz.
Al bajar mire por última vez lo que alguna vez fue mi casa, deje las llaves dentro de ella junto a mi celular, no quería volver a saber de nadie. No quería saber nada de Mikey, de los miembros de Toman, de mi mamá o papá, de la escuela y tampoco quería volver a saber de Ran o Rindou.
Tome mi patineta emprendiendo un viaje sin rumbo. Lo único que me distraía era la noche estrellada que había.
El camino era silencioso, veía como los autos pasaban a un lado mío junto a sus luces.
En el camino pensaba en todo. Por qué mi mamá jamás me amo a pesar de que era su hija, siempre hice lo que podía para complacerla. Teru, por que decidió dejarme tan pronto, sabía que yo vivía por el, era la mitad de mi vida y aun así terminó dejándome. Mi abuela, tal vez fue la única persona que me amo realmente, pero aun así, decidió dedicarme sus últimos días de vida mientras ocultaba una enfermedad que la mataba poco a poco. Mikey, pensaba que me amaba, pero no fui más que un simple entretenimiento para el, me entregue en cuerpo y alma a él, me obligó a hacer cosas que no quería, se aprovecho de que carecía de amor, se aprovecho de una estúpida niña de 14 años que hacía todo lo que le pidieran a cambio de resevir pequeñas muestras de amor. Ran y Rindou, que era lo que realmente buscaban de mi, jamás me pidieron hacer nada, pero querían que estuviera con ellos, tal vez solo les daba lástima por ser una estúpida que no tenía a nadie en su vida.
Llegué a la estación de tren, no sabía a dónde ir, solo quería ir lejos de todo, a un lugar donde sintiera paz.
Miraba aquel gran mapa que había en la parada del tren mirando todos los lugares que pasaba el tren, estaba perdida mirando una y otra vez aquel mapa. Entre al gran tren viendo que no había tantas personas, me senté lo más lejos posible, aun sentía miedo, pensaba que si me veían sabrían lo que me había pasado.
El camino fue largo, veía como poco a poco el tren se iba quedando solo, hasta llegar a mi parada, salí de aquel tren yo sola, las pocas personas que quedaron ahí estaban distraídas en sus asuntos.
Emprendí camino a aquel lugar que una vez fui y sentí una gran paz, no tenía lugar donde pasar la noche, pero me daba igual, ya había pasado tiempo viviendo en la calle y ya nada me sorprendería que me sucediera.
Aquellas calles poco estrechas adornadas con sus lámparas rojas colgadas por los ires, junto con algunas sombrillas que adornaban el cielo, era lindo ver como todo era tranquilo ahí, a pesar de estar ya todo cerrado, sentía calma y paz. Ahora mi nuevo hogar serían las calles del barrio chino.
¿Que me esperará para el futuro?
Lo único que podia desear es que por fin encontrará aquella felicidad que algún día desee encontrar.
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Hasta aquí la primera parte de "Corrompiendo Estrellas"
Se que es un final triste y me demore un poco en volver a subir caps, pero me costó mucho escribir estos últimos capitulos :c
Solo me queda decirles que muchas gracias a tod@s por el apoyo que le han dado a la historia, ver sus comentarios y sus votos me hacen muy feliz y me motivan a seguir con la historia.
También quiero decirles que este no es el final, estoy trabajando ya en la segunda parte que pronto saldrá, solo pido un poco de tiempo para que tengan la continuación de esta no tan linda historia. :3
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